Reino Unido da por iniciada la "guerra por el Santo Grial de los naufragios" entre España, Colombia, EEUU e indígenas
"Es un gran lío y no veo una salida fácil".
Mucha tinta se ha vertido sobre el culebrón diplomático entre España y Colombia por el tesoro que alberga uno de los pecios que ya han sido definidos como una suerte de "Santo Grial de los naufragios", un símil de los restos del galeón español San José con uno de mitos más codiciados de la cristiandad, el cáliz de Cristo de la última cena.
Precisamente, un reportaje de la cadena pública británica BBC ha abordado el tema desde una perspectiva que ofrece una visión mucho más amplia de este campo de batalla legal y que no se reduce solo a un choque bilateral político entre Madrid y Bogotá. En medio subyacen los intereses y demandas de una empresa de EEUU, pero también de grupos indígenas que dejan un recordatorio incómodo sobre el pasado colonial.
En medio de este conflicto también han surgido las voces del sector privado, a través de la compañía de rescates submarinos -Sea Search Armada, antes Glocca Mora- que se lanzó en un comienzo a por el naufragio, o los propietarios originales de las tierras donde se extrajo el oro y la plata que conforma un importante volumen de los 18.000 millones de dólares en los que se calcula que vale el cargamento del San José.
"No creo que haya manera de que todos estén satisfechos" o "ellos nos deben esa deuda"
"Es un gran lío y no veo una salida fácil". Se trata de la afirmación -o resumen- de la experta e historiadora Carla Rahn Phillips sobre el ecosistema de parte implicadas en el descubrimiento del pecio. A su juicio, "el Estado español, el gobierno colombiano, los diversos grupos indígenas, los cazadores de tesoros. No creo que haya manera de que todos estén satisfechos".
"Esa riqueza provenía de las minas de Potosí, en el altiplano boliviano", subrayó Samuel Flores, representante del pueblo Qhara Qhara, uno de los grupos indígenas que reclaman una parte del valor del cargamento en compensación por el expolio de sus recursos naturales por parte del Imperio Español.
"Este cargamento pertenece a nuestro pueblo y creemos que debería ser extraído del fondo del mar para impedir que los cazadores de tesoros lo saqueen. ¿Cuántos años han pasado? ¿Trescientos años? Ellos nos deben esa deuda", esgrime Flores.