Putin aprovecha el cambio climático para crear una nueva ruta de petróleo
El presidente ruso ha ‘atascado’ de buques la vía que se ha creado a raíz del deshielo del Círculo Polar Ártico.
El deshielo del Círculo Polar Ártico es una mala noticia desde el punto de vista climático, pero el presidente de Rusia, Vladímir Putin, le está sacando provecho para crear una ruta marítima alternativa.
El hecho de que el hielo se derrita está permitiendo que los barcos puedan discurrir por el océano Ártico, y el mandatario ruso lo ha convertido en una alternativa que no tiene nada que envidiarle al mismísimo Canal de Suez.
Tal y como recoge El Economista, Rusia ha multiplicado de manera exponencial la utilización de la ruta del Ártico para transportar petróleo y gas a China, el país al que está enviando una parte relevante de sus exportaciones ante las sanciones europeas.
Las cifras hablan por sí solas: Putin ha ‘atascado’ la vía con sus barcos. Los buques rusos han transportado entre enero y octubre de 2023 un total de 2.120.000 toneladas por la denominada Ruta Marítima del Norte (RMN) frente a las 200.000 toneladas que Rusia trasladó por esa vía en el mismo período del año 2022.
Un camino más arriesgado
Sin embargo, pese a que el deshielo del Círculo Polar Ártico permite hacer uso de la Ruta Marítima del Norte, las condiciones para el transporte de materias primas tan delicadas como el petróleo no son las ideales.
La RMN es una ruta más corta, pero también de mucho más riesgo, por lo que este gran aumento de la utilización del océano Ártico para transportar crudo y gas hace que el peligro de que se produzca un accidente con consecuencias medioambientales catastróficas se eleve considerablemente.
La ciudad de Avdiivka sigue concentrando los ataques más fieros, con el temor de Kiev de que se dañen infraestructuras esenciales.
Un “proyecto piloto” para sustituir al Canal de Suez
Pero Rusia parece dispuesta a exponerse a ese riesgo, ya que el incremento de tránsito por la Ruta Marítima del Norte durante 2023 se ha planteado como una experiencia piloto para sustituir al Canal de Suez.
Así lo ha confirmado Vladímir Pánov, representante especial para el desarrollo del Ártico de la agencia nuclear rusa Rosatom. “El tránsito en 2023 puede ser considerado un proyecto piloto. Las compañías aceptaron enviar a través de la ruta ártica entre verano y otoño parte de la mercancía que antes iba a través del Canal de Suez con destino a los países de Asia-Pacífico”, ha explicado, según la agencia Interfax.
Pánov ha precisado que “el principal cargamento fue petróleo. Se transportaron en torno a 1,5 millones de toneladas. Otras 350.000 toneladas fueron el concentrado de mineral de hierro”. Y todo apunta a que esta apuesta rusa por la Ruta Marítima se mantendrá en el tiempo, ya que el miembro de Rosatom ha subrayado que “nos hemos convencido de que la ruta es económicamente efectiva para el tránsito de mercancías”.
