Plantón de España a Marruecos con el súper despliegue de 10.000 soldados

Plantón de España a Marruecos con el súper despliegue de 10.000 soldados

Madrid quiere evitar alimentar las actuales tensiones diplomáticas con Argelia, según la prensa marroquí, y por eso no acude al ejercicio defensivo African Lion.

Fuerzas Armadas de Marruecos hacen una demostración de uso de artillería durante el African Lion del año pasado.U.S. Army Europe and Africa

Marruecos y Estados Unidos están ultimando los detalles para la vigésima edición de las maniobras militares African Lion. Se aceleran las reuniones en Agadir, con representantes de las Fuerzas Armadas Reales y las Fuerzas Armadas estadounidenses, junto con delegaciones de una decena de países socios, para ir delineando las estrategias y actividades para el ejercicio, que se llevará a cabo del 20 al 31 de mayo.

Se trata del principal ejercicio anual que llevan a cabo Washington y Rabat, que llevan varios años reforzando su cooperación defensiva y diplomática, y en cuya organización ayudan Ghana, Senegal y Túnez de mayo a junio de 2024. Anualmente, más de 10.000 participantes de hasta 20 países y miembros de la OTAN -también estarán los europeos Reino Unido, Brasil, Francia, Italia, Países Bajos- entrenan juntos. Su meta: mejorar su interoperabilidad entre naciones y la organización.

Sin embargo, España no será de la partida, por más que sea el vecino el norte de Marruecos, frontera sur de la Alianza Atlántica y gran aliado de Marruecos, como declaró el presidente Pedro Sánchez en su visita de febrero

Según cita El Debate, varios medios marroquíes han informado desde febrero sobre la ausencia de España y la explicación, dicen, hay que buscarla más al este, en Argelia. Estos ejercicios tiene lugar en parte cerca de ese país y, según los citados medios, el Gobierno español quiere evitar alimentar las actuales tensiones diplomáticas con Argel. Es el segundo año que da un paso atrás por el mismo motivo. 

¿De dónde vienen estos roces? De hace dos años, cuando Sánchez sorprendió alineándose con la postura de Marruecos sobre el Sáhara Occidental. El plan de autonomía de Rabat, el ocupante, es el más "serio, realista y creíble" para acabar con el conflicto, dice ahora nuestro país. Argelia sigue siendo el país que acoge a los saharauis en sus campos de refugiados y el paso dado no gustó. 

En este tiempo se han producido algunos acercamientos, como el regreso del embajador a Madrid o la reanudación del comercio y los vuelos, pero el encuentro de Sánchez con el rey Mohamed VI hace poco más de un mes, en suelo marroquí, otra vez ha causado incomodidad. Por ejemplo, la Casa Real marroquí difundió un comunicado tras la citada reunión en el que desvelaba el refrendo español a proyectos en el Sáhara, como el gasoducto que iría desde Nigeria a Marruecos, pasando por varios países del África Occidental.

La muerte de tres civiles argelinos, el 1 de noviembre de 2021, en un presunto bombardeo de Marruecos -según la acusación de Argel, no desmentida ni confirmada por Rabat- reavivó la tensión entre los dos antiguos adversarios en el Magreb. Que haya roces no es algo nuevo, pero los gestos no amistosos o directamente hostiles empiezan a encadenarse con demasiada frecuencia y demasiada hondura para lo que es habitual en las últimas décadas, por lo que las alarmas, forzosamente, saltan. 

Aquel fue el incidente más serio desde la llamada Guerra de las Arenas, que los enfrentó durante dos meses en 1963. Tras aquello, no ha habido un conflicto abierto, pero sí enfrentamientos de baja intensidad, que ahora se suceden con más frecuencia. Y es que la lucha por la hegemonía en el norte de África la está ganando Marruecos y Argelia reacciona, incómoda.

Su posición sobre el Sáhara ha sido avalada también por Estados Unidos, con idénticas palabras a las usadas por España, y hasta se han establecido lazos con Israel, en el marco de los Acuerdos de Abraham, que abarcan hasta a lo defensivo. Un refuerzo que tiene que ver con su posición estratégica y, también, con sus recursos naturales