Los líderes de la UE se dan 10 días más para pactar la renovación de sus altos cargos

Los líderes de la UE se dan 10 días más para pactar la renovación de sus altos cargos

Rechazada la propuesta del Partido Popular Europeo de que los cinco años de mandato del Consejo Europeo se repartan a la mitad entre ellos y los socialistas.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (i), durante la reunión que han mantenido los negociadores de las tres principales familias políticas europeas en Bruselas.MONCLOA

Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea han concluido sin acuerdo la cumbre informal convocada para negociar los nombres que ocuparán los altos cargos de las instituciones comunitarias los próximos cinco años. Después de un primer e infértil contacto, los seis hombres encargados de la negociación se han dado diez diez más para alcanzar un acuerdo, así que habrá que esperar a los días 27 y 28 de este mes para cerrar la renovación de la cúpula de la Unión Europea después de las elecciones.

Aunque el encuentro de este lunes estaba previsto como un primer intercambio de puntos de vista, a la mesa llegaban varios nombres con el apoyo de una mayoría. El Partido Popular Europeo da por sentado que su candidata Ursula von der Leyen repetirá al frente de la Comisión Europea, mientras se resiste a que el socialista portugués António Costa asuma la presidencia del Consejo Europeo o que la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, sustituya a Josep Borrell como la nueva jefa de la diplomacia europea.

Pese a que los líderes de la UE no eligen al presidente del Parlamento Europeo, estaba previsto que indicaran que, preferentemente, fuera un representante del Partido Popular Europeo, allanando así el camino para la reelección de la maltesa Roberta Metsola. "No hay un acuerdo esta noche, en este momento", ha dicho en declaraciones a la prensa al término de la reunión el presidente del Consejo Europeo, el liberal belga Charles Michel.

Por su parte, el primer ministro de Países Bajos en funciones, Mark Rutte, reconoció a su salida de la reunión que en Europa "todo puede ir en una dirección diferente" cuando los acuerdos no quedan del todo cerrados, pero aseguró que todo está más claro que en 2019 -última renovación institucional- cuando "todo estuvo en el aire durante tres días".

Fuentes de la delegación española señalaron a la Agencia EFE que aunque no se ha podido alcanzar un pacto en este encuentro, hay unos candidatos claros y todo apunta a que las conversaciones venideras les hace confiar en que el acuerdo será posible. Pedro Sánchez, que no hizo declaraciones al término de la reunión, es junto al canciller alemán, Olaf Scholz, el negociador del Partido Socialista Europeo.

El Consejo Europeo, ¿dividido en dos mandatos?

Poco después de que arrancase al negociación entre los líderes de los Veintisiete, el Partido Popular Europeo planteaba formalmente un cambio a la estructura tradicional de los cargos: que la presidencia del Consejo Europeo, a la que aspiran íntegramente los socialdemócratas, se divida en dos mitades  a repartirse entre ellos y los socialistas.

Las fuentes citadas por la Agencia EFE explicaron al término del encuentro de los líderes de la Unión Europea que se rechazó esta propuesta porque no forma parte de la tradición comunitaria, algo que sí ocurre con la presidencia del Parlamento Europeo. Aunque la presidencia del Consejo Europeo es en teoría de dos años y medio y prorrogable una vez, nunca se ha repartido entre dos personas.

La negociación la han conducido los jefes negociadores designados por cada familia política, con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el canciller alemán, Olaf Scholz, en nombre de los socialistas europeos; los primeros ministros de Grecia y Polonia, Kyriakos Mitsotakis y Donald Tusk, respectivamente, por los ‘populares’; y los mandatarios de Francia, Emmanuel Macron, y Países Bajos, Mark Rutte, por los liberales.

Este formato ha dejado fuera de la conversación no sólo a los candidatos con presencia en el Consejo (Von der Leyen, Metsola y Kallas), sino también al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y a otros líderes de peso como el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, y la italiana Giorgia Meloni. "Es muy importante la transparencia y la inclusión en el proceso, asegurar que los Veintisiete se sienten implicados en el proceso", ha advertido Michel. No obstante, si falla uno de los nombres podría decaer el grupo al completo, ya que se requiere respetar un cierto equilibrio de género, de procedencia geográfico y de color político.

Rutte, optimista sobre liderar la OTAN

El primer ministro en funciones de Países Bajos, Mark Rutte, ha expresado este lunes su optimismo sobre ser elegido próximo secretario general de la OTAN, tras reunirse con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, uno de los dirigente reticentes con su nombramiento.

La cumbre informal convocada para negociar la cúpula de las instituciones comunitarias ha servido para mantener un encuentro con Orbán, uno de los pocos líderes que no han dado su apoyo a Rutte para suceder a Jens Stoltenberg como próximo secretario general de la OTAN.

En este contexto, el mandatario neerlandés ha acordado con Orbán que escribirá una carta en los próximos días para "reflexionar" sobre la reacción social a sus palabras de 2021 cuando dijo que Hungría no tendrá cabida en la Unión Europea si mantenía sin cambios la ley que prohíbe charlas sobre homosexualidad en los colegios, y sobre los desafíos futuros de la alianza atlántica.

Según Rutte, el dirigente magiar no ha reclamado una disculpa explícita sobre sus palabras, que fueron consideradas entonces por Budapest como un "chantaje político", y su carta se limitará a "reflexionar" sobre la polémica que suscitó hace tres años sus declaraciones. Tampoco tiene previsto viajar a Hungría.

"Deben entender que bien son miembros de la UE y por tanto de la comunidad de valores que formamos o bien están fuera", declaró Rutte antes de una cumbre europea dominada por la controvertida ley promovida por el Gobierno de Viktor Orbán.

Rutte concita el apoyo mayoritario de los aliados de la OTAN, incluido Estados Unidos y los principales aliados europeos. De hecho, solo quedan por decantarse Hungría y Eslovaquia, aparte de Rumanía, que presentó el pasado marzo al presidente, Klaus Iohannis, y mantiene su candidatura pese a la falta de apoyos. En todo caso, la OTAN funciona por consenso por lo que todos los socios deberán dar su 'sí' al dirigente neerlandés para suceder a Stoltenberg.Rutte, optimista sobre liderar la OTAN