Los investigadores debaten durante siglos el origen de la misteriosa Piedra Negra

Los investigadores debaten durante siglos el origen de la misteriosa Piedra Negra

Es una reliquia musulmana que, según la tradición islámica, se remonta a los tiempos de Adán y Eva y se encuentra en la esquina este de la Kaaba. 

Varios peregrinos alrededor de la Piedra Negra, en La Meca.Turkish Religious Affairs Directorate / Handout/Anadolu Agency via Getty Images

La Piedra Negra es una reliquia musulmana que, según la tradición islámica, se remonta a los tiempos de Adán y Eva y se encuentra en la esquina este de la Kaaba, en el centro de la Gran Mezquita de La Meca. Su origen, sin embargo, ha sido objeto de debate durante siglos. 

Según la tradición, fue colocada en la pared del edificio por el profeta islámico Mahoma en el año 605 d. C. Desde entonces, la Piedra Negra se ha roto en fragmentos que se instalaron en un marco plateado en el costado de la Kaaba. Pese a su nombre, la reliquia presenta un color marrón rojizo, con grises dispersos.

En términos científicos, su origen natural ha sido muy discutido. Se ha descrito como una piedra de basalto, ágata, como una pieza natural de vidrio y como un meteorito. Esta última opción, ha sido la más popular y extendida, favorecida por la creencia religiosa de que vino del cielo. La Piedra Negra es, según la tradición islámica, un aerolito que el ángel Gabriel entregó a Abraham. Se dice que "descendió a la Tierra más blanco que la leche, pero los pecados de los hijos de Adán lo volvieron negro".

A principios del siglo XXI, sin embargo, el Museo de Historia Natural de Londres descartó la posibilidad de que se tratara de un meteorito, decantándose por su origen terrestre. Aunque el debate sobre su origen y color continúa hasta ahora. 

En 2021 Arabia Saudita reveló por primera vez fotografáis en alta resolución de la  antigua Piedra Negra, que fueron difundida por la Presidencia General para Asuntos de las dos Mezquitas Sagradas. Durante más de 50 horas se trabajó en las fotografías y el revelado de las imágenes. En total se tomaron unas 1.050 fotografías en una sesión que tuvo una duración de siete horas.

Afifi al-Akiti, miembro de estudios islámicos de la Universidad de Oxford, dijo entonces que las fotografías son significativas porque "en cierto sentido, esto no tiene precedentes". "Uno ve que en realidad no es negra, por ejemplo... Según tengo entendido, es la primera vez que hay una foto digital ampliada de la piedra y uno puede ver la piedra de cerca y personalmente", señaló.