Los expertos en guerra alertan de que el Kremlin tiene en su punto de mira a este país europeo

Los expertos en guerra alertan de que el Kremlin tiene en su punto de mira a este país europeo

Para Rusia, la posibilidad de una Moldavia integrada en la UE representa una amenaza a su esfera de influencia.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin.Getty Images

Moldavia se enfrenta a un punto crítico en su futuro con la elección presidencial y el referéndum de octubre de 2024, que podrían definir su camino hacia la Unión Europea y desafiar la influencia rusa. Son las conclusiones de un nuevo informe del Institute for the Study of War (Instituto para el Estudio de la Guerra) cuyos datos principales pasamos a resumir a continuación.

Un momento decisivo para Moldavia

Moldavia se encuentra en un crucial punto de inflexión con la próxima elección presidencial y un referéndum en octubre de 2024, que podrían definir su futuro geopolítico. La votación no solo decidirá el próximo presidente, sino que también podría sentar las bases para que el país avance en su proceso de adhesión a la Unión Europea. Sin embargo, el camino no está exento de obstáculos, ya que Rusia ha intensificado sus esfuerzos para mantener su influencia sobre la antigua república soviética y frustrar su acercamiento al bloque occidental.

El 20 de octubre, los ciudadanos moldavos no solo elegirán a su próximo presidente, sino que también votarán en un referéndum para enmendar la constitución del país. La reforma propuesta busca definir la adhesión a la Unión Europea como un "objetivo estratégico" y reafirmar la "irreversibilidad del curso europeo" de Moldavia. La medida ha sido respaldada por la actual presidenta Maia Sandu, quien lidera las encuestas y busca la reelección. Sandu ha promovido reformas gubernamentales desde su elección en 2020, lo que llevó a la apertura de negociaciones de adhesión con la UE en diciembre de 2023.

El referéndum requerirá un umbral de participación del 33 % para ser válido. A pesar de que las encuestas sugieren que este nivel de participación es alcanzable, la oposición, compuesta en gran parte por fuerzas prorrusas, ha lanzado campañas de boicot para socavar la votación. El resultado del referéndum podría fortalecer o debilitar los esfuerzos del país por integrarse plenamente en Europa.

La sombra de la influencia rusa

Para Rusia, la posibilidad de una Moldavia integrada en la UE representa una amenaza a su esfera de influencia. Desde la elección de Sandu y el establecimiento de una mayoría parlamentaria proeuropea en 2021, el Kremlin ha intensificado sus intentos por desestabilizar el gobierno moldavo. Los esfuerzos incluyen el uso de la región separatista de Transnistria, que alberga tropas rusas desde 1992, y la autonomía de Gagauzia, donde el apoyo a Rusia sigue siendo significativo.

La región de Gagauzia ha sido objeto de una creciente intervención rusa, con el banco estatal ruso Promsvyazbank proporcionando subsidios mensuales a empleados públicos y pensionistas, lo que refuerza la influencia de Moscú en una de las regiones más pobres del país. Además, el Kremlin ha empleado métodos híbridos, como campañas de desinformación y financiamiento encubierto, para influir en las elecciones y la opinión pública en Moldavia.

Candidatos en la contienda: una carrera por el futuro de Moldavia

La elección presidencial presenta una lista de candidatos con vínculos diversos con el Kremlin, lo que añade un elemento de incertidumbre sobre el resultado. Aunque Sandu lidera las encuestas con un 35 % de apoyo, el exfiscal Alexandr Stoianoglo y el exalcalde de Balti, Renato Usatii, aparecen como contendientes potenciales en una segunda vuelta.

Stoianoglo, respaldado por el expresidente prorruso Igor Dodon, ha ganado terreno en las encuestas a pesar de los cargos de corrupción en su contra, mientras que Usatii, con lazos comerciales con Rusia, ha mantenido una plataforma ambigua, rechazando tanto la adhesión a la UE como a la Unión Económica Euroasiática. La exgobernadora de Gagauzia, Irina Vlah, también compite, habiendo moderado su discurso prorruso en los últimos años en un aparente esfuerzo por captar votos proeuropeos.

El papel de la diáspora y la incertidumbre en torno al referéndum

La diáspora moldava, que representa aproximadamente un tercio del electorado, será clave en la votación del referéndum y la elección presidencial. En 2020, la abrumadora mayoría de los votantes en el extranjero apoyó a Sandu, lo que resultó decisivo para su victoria. Aunque el gobierno moldavo ha incrementado el número de centros de votación en el extranjero para facilitar la participación, la logística y el acceso siguen siendo obstáculos importantes para muchos votantes.

Las campañas de boicot y desinformación han disminuido el entusiasmo por el referéndum. Las encuestas recientes indican que la intención de participar ha disminuido, pasando del 79 % en mayo-junio al 68 % en septiembre. El margen para alcanzar el umbral de participación es estrecho, y el éxito del referéndum podría depender en gran medida del voto de la diáspora.

El futuro de Moldavia y la estrategia rusa

Independientemente de los resultados de octubre, la influencia de Rusia en Moldavia no desaparecerá. El proceso de adhesión a la UE durará hasta al menos 2030, proporcionando al Kremlin tiempo suficiente para utilizar sus relaciones con Transnistria y Gagauzia, así como para interferir en futuros comicios. Además, la composición de la Corte Constitucional moldava y otros órganos clave podría ser objeto de manipulación, lo que abriría la puerta para revertir reformas proeuropeas en el futuro.

Rusia también podría considerar una solución diplomática o militar al conflicto de Transnistria, cuyo statu quo ha persistido durante más de 30 años. Mientras tanto, Moldavia continúa siendo vulnerable, con un ejército pequeño y equipamiento obsoleto, lo que la deja dependiente del apoyo occidental para resistir cualquier agresión rusa potencial.

La guerra en Ucrania: factor clave en el destino moldavo

El desenlace de la guerra en Ucrania influirá directamente en la capacidad de Rusia para amenazar militarmente a Moldavia. Hasta ahora, la posibilidad de una invasión rusa a gran escala desde Ucrania es baja, pero el escenario podría cambiar si las fuerzas rusas logran avances significativos en el campo de batalla. Una invasión rusa de Moldavia podría complicar significativamente la planificación de defensa de la OTAN en su flanco oriental, aumentando la presión sobre los Estados miembros para proteger la frontera con Moldavia.

Moldavia se encuentra en una encrucijada: la elección presidencial y el referéndum podrían acercar al país a la adhesión a la UE o bien reforzar la influencia rusa. El destino de la nación dependerá en gran medida de la voluntad de los moldavos de votar y de la capacidad de sus líderes para resistir la presión externa.