Límite 48 horas: Biden se juega (buena parte de) su futuro entre jueves y viernes
Una agenda plagada de actos y una entrevista televisiva, las armas inmediatas para intentar apaciguar las cada vez mayores voces internas en su contra.
Como en aquella película con Nick Nolte y Eddie Murphy, pero sin atisbo alguno de ficción, Joe Biden se juega su futuro, o buena parte de él en un plazo límite: 48 horas. Las que incluyen un jueves y un viernes cargados de actos fundamentales en el devenir político del aún presidente de EEUU.
Desde hace siete días arrastra sin solución de arreglo el sonado batacazo que se dio en prime time en su debate con Donald Trump. El cataclismo político fue tal que, de inmediato, en el Partido Demócrata sonaron las alarmas. Poco a poco van apareciendo voces en público reclamando lo que, dicen en privado, cada vez más exigen: un cambio de candidato.
De momento, Biden sigue decidido a ser el candidato demócrata, algo que se daba por seguro hace apenas siete días. En un posterior mitin en Carolina del Norte o en un breve retiro familiar, el mandatario ha mostrado su compromiso con su candidatura, espoleado por su esposa y resto de familiares cercanos.
Pero esos avales no bastan y Joe Biden necesita un impulso mediático. En ese pequeño lapso de 48 horas, el veterano líder celebrará la festividad del 4 de Julio recibiendo a varias familias en la Casa Blanca. Los caprichos del destino han querido que el Día de la Independencia sea relevante en el futuro inmediato del país.
Pero si es relevante este acto, poblado de cámaras y posados, más lo será la entrevista en el canal ABC prevista para el viernes. Otra vez ante los ojos de millones de estadounidenses, Biden regresará a la televisión ocho días después de naufragar entre balbuceos en el de la CNN.
Para completar su jornada, ese mismo viernes, Biden se desplazará hasta Wisconsin, en el Medio Oeste, para celebrar un mitin de campaña con cientos de partidarios.
Biden se lo estaría pensando
Actos, especialmente la entrevista televisada, que en el seno del Partido Demócrata consideran fundamentales. Este mismo miércoles, una fuente interna confesó a The New York Times que condicionarían severamente el futuro.
"Él sabe que si tiene dos actos más como ese, estaremos en un lugar diferente", añadía esta voz, que quiso mantener el anonimato, hasta el punto de plantear que el propio Biden estaría pensándoselo, algo que no tardó en desmentir la Casa Blanca.
Más allá de esas 48 horas se le acumulan las citas sociales, como su intervención, acompañado de su esposa, ante miles de personas en la Asociación Nacional de Educación en Pensilvania el domingo. O la nada desdeñable Cumbre de la OTAN en Washington la próxima semana, en la que hay programada una rueda de prensa en solitario, algo no habitual en estos actos, así como numerosas entrevistas de radio.