España evacua a los ciudadanos españoles residentes en Sudán

Los españoles residentes en Sudán han llegado ya a Yibuti, después de que el Gobierno haya coordinado una operación militar para sacarlos de un país que lleva en conflicto desde el pasado 15 de abril. 

Alrededor de las 23:00 horas (hora de España), los dos aviones del Ejército del Aire desplegados despegaban desde una base militar situada a 16 kilómetros de la capital sudanesa, cuyo aeropuerto se encuentra fuera de servicio desde que los combates entre el Ejército y los paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido sumiesen al país en el caos.

A bordo de ambos, tal como informa El País, viajan el embajador de España en Sudán, Isidro González, un diplomático, el personal de la Embajada (ya cerrada), varios policías y algún religioso. A estos les acompañarían unos 30 españoles y un centenar de pasajeros de ocho nacionalidades distintas (portugueses, italianos, polacos, irlandeses, mexicanos, venezolanos, colombianos y argentinos), así como ciudadanos sudaneses.

"Acaban de despegar de Jartum los aviones del Ejercito del Aire con nuestros ciudadanos y de la Embajada de España en Sudán a bordo. También viajan otros ciudadanos europeos y latinoamericanos. Ningún incidente en el traslado de nuestro convoy", ha publicado el ministro en la red social Twitter.

Poco después, Defensa confirmaba su llegada a suelo seguro. Se espera que los evacuados tomen otro vuelo rumbo a España. Defensa ha enviado para ello un avión de pasajeros, además de cuatro aviones de transporte. 

Además de los evacuados en el operativo de hoy, otro grupo de españoles decidió, voluntariamente, permanecer en Sudán o abandonarlo por otros medios, mientras que otros habían conseguido salir del país ya antes de la puesta en marcha de este dispositivo, según informa EFE.

Con la evacuación de los españoles residentes en Sudán, España sigue los pasos de otros países que este domingo habían anunciado el inicio de operaciones para sacar del país a sus ciudadanos. Francia, Reino Unido, Alemania, Holanda o Turquía, entre otros países, además del Servicio de Acción Exterior de la UE, ya han completado sus operativos.. Estados Unidos evacuó ya un centenar de funcionarios de su Embajada en Jartum.

Éxodo de sudaneses

Los residentes de Jartum han comenzado este fin de semana un éxodo masivo para escapar de la capital sudanesa aprovechando las operaciones de evacuación internacional. 

La cadena panárabe Al Yazira informa de desplazamientos desde la capital hacia el este, en dirección a la costa de Puerto Sudán, y al norte hacia Egipto, una ruta esta última muy peligrosa, donde las caravanas de civiles están siendo víctimas de ataques y saqueos. Este movimiento, sumado a las decenas de miles de personas que siguen atrapadas en sus casas, ha provocado que la capital sea ahora mismo una "ciudad fantasma", según la corresponsalía de la cadena.

Naciones Unidas tiene constancia de desplazamientos de civiles en los estados de Jartum , Norte, Nilo Azul, Kordofán del Norte, Darfur del Norte, Darfur del Oeste y Darfur del Sur, y se han observado movimientos transfronterizos de Sudán a Chad, Egipto y Sudán del Sur. Por ejemplo, alrededor de 2.000 sudaneses han cruzado la frontera con Sudán del Sur huyendo de los combates que estallaron el 15 de abril, y que han dejado ya más de 600 muertos, según ha confirmado la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

En Darfur del Norte, entre 3.500 y 3.750 personas (700 a 750 hogares) han sido desplazadas de múltiples aldeas en la localidad de Tawila, huyendo de sus áreas por temor a la inseguridad. En el estado de Aj Jazirah han acabado desplazadas entre 500 y 750 personas (100 a 150 hogares) tras los enfrentamientos en las aldeas de Albageer Este, Benuie, Al Mahali y En Nuba en la localidad de Al Kamlin. En Nilo Azul, entre 4.000 y 4.500 personas han sido desplazadas del pueblo al barrio de Al Gassam en la ciudad de Ed Damazine.

Asimismo, Naciones Unidas avisa que está comenzando a recibir informaciones de violencia sexual y de género. ONU Mujeres, a este respecto, ha pedido a todas las partes que se aseguren de que ninguna mujer o niña se vea afectada por estos delitos, y a todos los actores que no escatimen esfuerzos para mitigar el aumento del riesgo.