El 'profesor Tim Walz' enciende aún más los ánimos demócratas con el discurso más importante de su carrera política

El Partido Demócrata ya tiene nueva rockstar. El gobernador de Minnesota, Tim Walz, ha aceptado este jueves la nominación del Partido Demócrata para completar, con Kamala Harris, el ticket electoral demócrata y convertirse en su candidato a vicepresidente de los Estados Unidos en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre y, con una sola frase ha sido capaz de meterse en el bolsillo a un público enfervorizado por la causa demócrata desde el pasado lunes, cuando dio inicio la Convención Nacional Demócrata en Chicago. 

"Nunca subestimen a un profesor de escuela pública". Con esta frase, el compañero de viaje electoral de Kamala Harris para evitar que el republicano Donald Trump vuelva a la Casa Blanca, Tim Walz, ha conseguido que el United Center de Chicago se viniese abajo con un grito enfervorizado que, por otra parte, es una buena muestra del ánimo que vive ahora una candidatura que hace solo un mes exigía la retirada de Joe Biden, cuestionado por su actuación en el primer debate presidencial televisado contra Donald Trump. 

La entrada de Kamala Harris en la contienda electoral, capaz de recortar distancias en las encuestas y la elección de un desconocido como Tim Walz para que aspire a convertirse en vicepresidente de los Estados Unidos, ha disparado el optimismo entre las filas de un partido que, pese a las dificultades, ha evitado la escisión interna antes de las elecciones y que esta semana ha cerrado filas en torno a su candidata, con el apoyo, primero de Joe Biden y Hillary Clinton, de Barack y Michelle Obama después o, por último, de Bill Clinton o la misma Oprah Winfrey. El discurso más importante de la carrera política de Walz viene a confirmar que el partido ha pasado de pantalla y se prepara para luchar contra Trump.

“Gracias, en primer lugar, a la vicepresidenta, Kamala Harris. Gracias por depositar tu confianza en mí y por invitarme a ser parte de esta increíble campaña. Y gracias al presidente, Joe Biden, por cuatro años de liderazgo sólido e histórico. Es el honor de mi vida aceptar vuestra nominación para vicepresidente de EEUU”, dijo Tim Walz ante una multitud entregada a la causa, que agitaba los carteles que ha repartido la mercadotecnia demócrata y en los que se podía leer "Entrenador Walz”.

Walz, que antes de iniciar su carrera política fue profesor y entrenador de un equipo de fútbol de secundaria, utilizó su experiencia como maestro para conectar a través de su discurso con las preocupaciones de la clase media estadounidense. "Cuando los demócratas hablamos de libertad, nos referimos a lograr una vida mejor para ti y quienes amas, para tomar tus propias decisiones en materia de atención médica y para ir a la escuela sin que teman que les maten a tiros”, enfatizó el gobernador de Minnesota y rival de J.D. Vance -aspirante del Partido Republicano a la vicepresidencia- en la contienda electoral y al que ha enviado ya los primeros dardos.

En su discurso, Tim Walz recordó sus años como maestro de secundaria y su lucha como gobernador por garantizar los derechos reproductivos de las mujeres, así como todos los avances que ha provocado el programa sanitario conocido como el 'Obama Care'. "Tenemos la oportunidad de convertir a Kamala Harris en la próxima presidenta de EEUU", afirmó con entusiasmo durante una intervención en la que presentó la opción de Harris como la vía para dejar atrás la era de Donald Trump. “Así es como pasaremos la página de Donald Trump… Así es como vamos a luchar. Y como dice la próxima presidenta de EEUU: cuando luchamos, ganamos”, concluyó, entre vítores, el demócrata.

Walz, quien fue elegido como gobernador de Minnesota en 2019 y reelegido en 2022, es una figura respetada dentro del partido, especialmente por su capacidad para conectar con los votantes en un estado con una marcada división entre áreas urbanas demócratas y zonas rurales más conservadoras. De hecho, se ha presentado ante los suyos como un hombre sencillo y comprometido con las necesidades de la clase media estadounidense. 

Durante su intervención en el cónclave demócrata, las cámaras captaron como sus hijos y su mujer, presentes entre el público, se emocionaban al escuchar las palabras de Walz que han disparado los ánimos demócratas y a los que animó a "meterse en las trincheras" para asegurar la victoria en noviembre. "Es el último tiempo y estamos un gol por debajo, pero estamos atacando y tenemos la pelota", explicó con una metáfora deportiva. Su hijo Gus, que tiene problemas verbales y déficit de atención, gritaba con orgullo con lágrimas en los ojos: “¡Ese es mi padre!”.

Bill Clinton y las bromas de McDonald's

La tercera jornada de la Convención Nacional del Partido Demócrata en Chicago también ha estado marcada por la intervención del expresidente Bill Clinton, quien pronunció uno de los discursos más cautivadores de la noche. No solo cuestionó la edad de Trump para asumir la presidencia de los Estados Unidos, también alabó la decisión de Joe Biden de apartarse de la carrera electoral para dar paso a Kamala Harris. “Es un marcado contraste con lo que sucede en el otro partido. Por eso, quiero agradecerle su coraje, compasión, clase, servicio y sacrificio", apuntó el expresidente estadounidense, convencido de que tomar una decisión de este tipo, nunca es fácil para un político.

En su discurso, Clinton, que acaba de cumplir 78 años, bromeó sobre su longevidad: "Soy el hombre más viejo de mi familia desde hace cuatro generaciones. Y de lo único que quiero presumir es que sigo siendo más joven que Donald Trump". Si el republicano gana las elecciones, se convertiría en el presidente de mayor edad en la historia de los Estados Unidos, al asumir el cargo con casi 79 años y 219 días, superando el récord que estableció Biden al tomar posesión de la presidencia, hace cuatro años, con 78 años y 61 días.

Clinton dedicó parte de su discurso a alabar a Kamala Harris, describiéndola como la única candidata con la "visión, experiencia, temperamento y voluntad” para liderar el país. En contraste, señaló que Donald Trump solo habla de sí mismo. "Es como los tenores que abren antes de subir al escenario diciendo 'yo, yo, yo, yo, yo'. Cuando Harris sea presidenta, cada día comenzará con 'tú, tú, tú, tú, tú'", ha llegado a decir el expresidente.

El toque de humor del discurso de Clinton llegó cuando recordó que él y Harris trabajaron en McDonald’s cuando eran jóvenes. “De joven, Kamala Harris trabajaba en McDonald’s, donde recibía a cada cliente con una sonrisa radiante y la pregunta: ‘¿En qué puedo ayudarle?’. Ahora, en la cima del poder, sigue haciendo lo mismo”, dijo. "Cuando entre en la Casa Blanca como presidenta, estaré encantado, porque romperá mi récord como el mandatario que más tiempo pasó en McDonald’s”, añadió el exmandatario, provocando carcajadas en el público, quien lo conoce también por su afición a la comida rápida.

Oprah Winfrey pide apostar por la "alegría" de Harris

La carismática presentadora Oprah Winfrey, una de las figuras más influyentes de la cultura popular estadounidense, hizo un enérgico llamamiento en la tercera jornada de la Convención Nacional del Partido Demócrata para que los votantes apuesten el próximo 5 de noviembre por la "alegría" que representa Kamala Harris.

En su discurso, Winfrey destacó los orígenes de Harris, hija de inmigrantes indios y jamaicanos, como un ejemplo del sueño americano. “Pronto enseñaremos a nuestros hijos cómo esta niña, de madre india y padre jamaicano, creció para convertirse en la presidenta número 47 de Estados Unidos”, afirmó. “Eso es lo mejor de Estados Unidos”, añadió, provocando vítores y aplausos del público que coreaba “¡USA, USA!”.

Winfrey, quien se registró como votante independiente pero ha apoyado al expresidente Barack Obama en 2008 y 2012, así como a Joe Biden y Kamala Harris en 2020, instó a los indecisos a reflexionar sobre los valores que deben guiar la elección presidencial. "Saben que esto es cierto. Saben que les estoy diciendo la verdad: que los valores y el carácter son lo más importante, tanto en el liderazgo como en la vida”, afirmó con contundencia.

La presentadora enfatizó la necesidad de “elegir el sentido común sobre el sinsentido” y “la alegría en lugar de la ira”, en clara referencia a la polarización política que vive el país. Su apoyo a Harris, en un momento crucial de la campaña, podría ser clave para movilizar a los votantes, especialmente a aquellos que aún no han decidido su voto.