El mayor banco de Brasil pide perdón por su papel en la esclavitud
La presidenta del estatal Banco do Brasil, Tarciana Medeiros, ha reconocido que "toda la sociedad brasileña debería pedir disculpas al pueblo negro por algún tipo de participación en ese momento triste de la historia".
La presidenta del estatal Banco do Brasil, Tarciana Medeiros, pidió hace unos días "perdón al pueblo negro" este sábado, por la complicidad que esa institución, fundada en 1808 por la corona portuguesa, mantuvo con el tráfico de esclavos durante el siglo XIX.
"Directa o indirectamente, toda la sociedad brasileña debería pedir disculpas al pueblo negro por algún tipo de participación en ese momento triste de la historia", manifestó en una nota oficial Medeiros, la primera mujer y primera afrodescendiente que preside esa institución pública.
La nota fue en respuesta a una demanda presentada por un grupo de 14 historiadores y acogida por la Justicia, en la que se le exigió al Banco do Brasil ese pedido de disculpas y la presentación de un plan de reparación por ese hecho histórico.
En archivos de un museo de Río de Janeiro, esos historiadores encontraron documentos sobre los vínculos que, en su época, el banco mantuvo con el aristócrata y traficante de esclavos José Bernardino de Sá, quien entre 1825 y 1851 desplazó hacia Brasil por la fuerza a unos 19.000 africanos.
Ese esclavista fue, además, el mayor accionista individual del Banco do Brasil, que también tenía entre sus directores a otros traficantes de esclavos.
En una respuesta primera enviada a la Fiscalía, la institución dijo creer en la "relevancia" del debate sobre "el papel del Estado y la colectividad" en la esclavitud, pero afirmó que en sus archivos no constaban detalles sobre relaciones con traficantes de esclavos, aunque aclaró que parte de los documentos "se perdió a lo largo del tiempo".
Sin embargo, en la nota divulgada este sábado, Medeiros manifestó que "el Banco do Brasil de hoy pide perdón al pueblo negro por sus versiones predecesoras, y trabaja intensamente para enfrentar el racismo estructural en el país".
Junto con el pedido de perdón, anunció una serie de medidas, entre las cuales citó un programa para promover la incorporación de negros al cuadro de funcionarios del banco, en especial de jóvenes y mujeres, y otras iniciativas dirigidas a estimular el combate al racismo y la inclusión de los descendientes de africanos, "a fin de ofrecer caminos que ayuden a comprender la construcción contemporánea de las identidades".