El grupo mortal israelí adiestrado por beduinos y entrenado para dormir 20 días en el campo
Son unos de los militares mejor formados del mundo y casi con total seguridad, serán a los que recurra el gobierno israelí para acabar con Hamás en las próximas semanas.
Hamás e Israel continúan protagonizando uno de los capítulos más negros de las últimas décadas en Oriente Próximo y la situación no ha hecho más que comenzar. Por parte de Israel, el número de secuestrados y asesinados no para de aumentar, algo que también ocurre con la población palestina.
Por un lado se encuentra el grupo islamista Hamás que cuenta con un ejército de Brigadas especiales de casi 20.000 hombres, bautizado como Izz ad-Din al Qassam, milicia encargada de llevar a cabo la masacre del pasado fin de semana en tierras israelís, el país gobernado por Netanyahu también cuenta con sus propias Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI), denominadas como Sayerte Matkal.
Este ejército, también denominado como Unidad de Reconocimiento General de Estado Mayor, se fundó en 1957 y se trata de una división de las brigadas paracaidistas Sayerte. Su principal objetivo es combatir el terrorismo en todas sus vertientes: interviniendo en el campo de batalla, neutralizando los planes trazados por la inteligencia extranjera y el rescate de rehenes que están fuera de Israel.
Origen y funcionamiento de Sayeret Matkal
Todo se remonta al año 1957, cuando el oficial Abraham Arnán solicitó al Estado Mayor de las FDI la creación de una unidad especial que se encargara de infiltrarse en territorios extranjeros para neutralizar las misiones secretas de los enemigos.
Para una labor tan compleja y que requiere de una formación extraordinaria y tan solo al alcance de unos pocos, fueron 'adiestrados' por rastreadores beduinos, encargados de enseñarles a actuar y pensar como lo harían los árabes, con el objetivo de poder actuar y conocer los puntos débiles del enemigo.
Para ser conscientes de la clandestinidad y secretismo de sus filas, hay que destacar que el proceso de reclutamiento era tan inadvertido que tan solo podían acceder a la FDI conocidos o familiares de combatientes que ya estuvieran dentro.
Entrenamientos inhumanos
El proceso de selección de efectivos era uno de los pasos más complicados para los combatientes, que tenían que someterse a entrenamientos de extrema dureza, como aguantar varios días en un campo sin dormir, al tiempo que eran examinados física y psicológicamente por médicos.
Además, el período de adiestramiento lo componía un exhaustivo entrenamiento de 20 meses en los que se les instruía en artes marciales, orientación, camuflaje y uso de armas pequeñas entre otros muchos aspectos, para posteriormente ser entrenados en paracaidismo y patrullaje de reconocimiento de largo alcance, entre otros muchos aspectos.
Por todo esto, las tropas Sayeret Matkal serán, muy probablemente a las que el gobierno israelí recurra para liberar a los miles de rehenes que tiene Hamás bajo su poder, así como para neutralizar los futuros intentos de las milicias islamistas, frenando y atacando sus puntos débiles.