¿Qué combustible usan los aviones de combate y cuántos litros consumen?
Un caza no usa el mismo combustible que los aviones comerciales. Usan un queroseno con otros aditivos y el consumo es brutal en el despegue.
En tiempos de guerra en los que nos ha tocado vivir este ultimo año se ha hablado mucho de armamento como los tanques Leopard o Abrams y es probable que en las próximas semanas se hablan de cazas, que es lo que reclama ahora Ucrania para dar otro paso al frente a la hora de recuperar terreno ganado por los rusos.
Entre todos los tipos de cazas, Zelenski parece convencido de que el F-16 es el idóneo para sus objetivos. Pero poco se ha hablado del combustible que usan los aviones militares y el consumo que tienen estas aeronaves. El mejor combustible para los aviones militares es el JP-8 (del inglés Jet Propulsion o propulsión para reactores), un combustible derivado del queroseno muy parecido al que usan los aviones comerciales, pero con otros aditivos para el uso militar.
El JP-8 se usa en aeronaves militares a excepción de los reactores embarcados en portaviones, que utilizan JP-5, también derivado del queroseno, pero con un punto de inflamación superior a su ‘hermano’ el JP-8. La razón del uso de este combustible en aviones embarcados en portaviones no es otro que evitar el riesgo de incendio.
¿Cuándo consume más un caza y cuánto?
El consumo de los aviones de caza resulta muy elevado y el momento en el que más combustible se quema es en el despegue. En la carrera de despegue y con quemador, que es lo más común, el avión puede llegar a consumir entre 400 y 500 litros.
El propósito del postquemador no es otra cosa que proporcionar al avión de combate mayor empuje a base de inyectar combustible adicional en la tobera de escape de la turbina. Este combustible entra en ignición por las altas temperaturas de los gases de escape y añade el empuje necesario.