China abre el cofre del tesoro que mayor temor genera en Occidente

China abre el cofre del tesoro que mayor temor genera en Occidente

Las minas occidentales se ve obligadas a cerrar al no poder competir con el aumento de los minerales chinos de bajo costo.

  A handfull of nickel balls at a mine.Getty Images/Bloomberg Creative

China ha ganado la partida del níquel a Occidente. Nadie sabía bien cómo procesar el tipo de níquel llamado lixiviación ácida a alta presión, o HPAL. Las empresas occidentales habían fracasado en su intento porque las temperaturas abrasadoras y la enorme presión involucrada en el proceso dañaron el equipo y generó grandes cantidades de residuos ácidos que son difíciles de eliminar.

Sin embargo, investigadores chinos se aventuraron a probar y resultaron más exitosos, aunque también tuvieron muchas dificultados. The Wall Street Journal cuenta que la empresa estatal de ingeniería China ENFI tuvo que superar numerosos obstáculos en Papúa Nueva Guinea hasta lograr sus objetivos.

Durante su segundo año de funcionamiento, en 2013, la compañía produjo el 40% de su capacidad aproximadamente y en 2016 sufrió un terrible accidente: una tubería se rompió, matando a un trabajador y provocando el cierre de la planta durante 78 días.

Afortunadamente para esta empresa matriz de ENFI, una minera estatal, su economía le permitió seguir adelante y sobreponerse a todas las dificultades. En 2017, alcanzó su capacidad de diseño. Además, marcó un gran cambio con respecto al níquel en China, que se encontraba muy rezagada con respecto a Occidente en la década de los 2.000.

Adaptación

La empresa privada china Lygend Resources and Technology contrató a ENFI y comenzó a preparar el terreno para construir en la isla de Obi, al este de Indonesia, en diciembre de 2018. Fue capaz de adaptar el proceso en lo que fue necesario, como cambiar a un tipo de titanio más barato. También empleó una técnica para reducir el nivel de humedad del producto final de níquel para mejorar la eficiencia, explica Wang Duodong, ingeniero jefe de Lygend.

En ese momento, las empresas de Japón y Occidente se mostraba cautelosas, preocupadas por los costos y el posible daño ambiental. De hecho, la planta china de Papúa Nueva Guinea sufrió un fallo en una bomba en 2019 provocó que los lodos minerales se desbordaran de un tanque hacia las aguas cercanas, con los riesgos que ello implica.

Pero esto no frenó el proyecto indonesio, que fue una asociación entre Lygend y Harita Nickel, una minera indonesia, y en 2021 las dos primeras líneas de producción estaban en funcionamiento a plena capacidad. Actualmente, En la actualidad, hay al menos cuatro plantas de HPAL de este tipo en funcionamiento en Indonesia, y se esperan tres proyectos más para finales del próximo año.

Reestructuración del mercado

Este éxito de China ha remodelado la industria del níquel, ya que ha acelerado el desplome de sus precios, dejando fuera a los competidores occidentales. La proporción del suministro mundial de níquel refinado dentro de China o por empresas chinas en el extranjero ha aumentado del 34% en 2015 al 58% este año, según Benchmark Mineral Intelligence.

En el lado opuesto, las minas de níquel y cobalto en Australia, Nueva Caledonia controlada por Francia, Brasil y Estados Unidos han cerrado o se están viendo obligadas a hacerlo, incapaces de competir con el aumento de los minerales chinos de bajo costo.