'Verano 1993' arrasa en unos Gaudí llenos de dardos pro-independentistas
Las otras ganadoras han sido 'Incierta gloria', 'Tierra firme' y 'La llamada'.
La película Verano 1993 ha sido la gran ganadora de la noche del cine catalán, tras conseguir los premios Gaudí a la Mejor película, dirección y guión para la debutante Carla Simón. La velada ha estado marcada por las reivindicaciones en favor de los soberanistas, con aparición de Carles Puigdemont incluida.
Esta ópera prima también se ha llevado el Gaudí a Mejor actriz secundaria para Bruna Cusí y el de Mejor montaje para Ana Pfaff, un total de cinco estatuillas de las 14 categorías a las que optaba.
Simón ya llegaba a los Gaudí después de ganar el Gran Premio del Jurado Internacional de la sección Generation Kplus del Festival de Berlín, cuatro premios Feroz (Mejor filme dramático, Mejor dirección, Mejor guión y Mejor actor de reparto) y la Biznaga de Oro del Festival de Málaga.
La joven directora podría revalidar esta trayectoria en una semana en los Goya, en los que también opta a la mejor película y mejor dirección novel.
La otra triunfadora de la gala ha sido Incierta gloria, el filme de Agustí Villaronga basado en la novela homónima de Joan Sales, que ha obtenido ocho de los 16 premios a los que optaba, entre ellos el de protagonista femenina para Núria Prims y el de mejor actor secundario para Oriol Pla.
TAMBIÉN GANAN 'TIERRA FIRME' Y 'LA LLAMADA'
Tierra firme ha obtenido el Gaudí a Mejor película en lengua no catalana, dos años después de que su director, Carlos Marqués-Marcet, lo ganara con 10.000 km. El presentador de la gala, David Verdaguer, estaba nominado por dos películas y ha recogido su segundo Gaudí como Mejor actor por la misma cinta.
La llamada, el debut de los Javis de OT,se ha hecho con el nuevo Premio del público a la Mejor película, una iniciativa en la que han participado más de 10.000 espectadores.
El triunfo de las ganadoras ha dejado con tan solo dos galardones de las 12 nominaciones que tenía a la película de Isabel Coixet La librería, que se ha tenido que conformar con los Gaudí a Mejor dirección artística para Llorenç Miquel y Mejor música original para Alfonso Vilallonga.
El Gaudí a la Mejor película europea ha sido para Dunkerke, de Christopher Nolan.
EL INDEPENDENTISMO SE CUELA EN LA GALA
En la gala, de más de dos horas, ha habido referencias al procès: una aparición fugaz de Puigdemont en el vídeo de introducción de Verdaguer, que también se ha referido a "la presencia de numerosas autoridades y la ausencia de otras", al tiempo que la cámara mostraba las sillas vacías de "president", "vicepresident" y "conseller de Cultura", sobre las que descansaba un lazo amarillo.
La Academia del cine catalán exhibía también con orgullo "una paridad histórica en el palmarés", con 11 de los 22 premios Gaudí que han ido a reconocer "el talento de las mujeres". En las nominaciones, las mujeres representaban el 40%.
Verdaguer, que ha dado dinamismo a las habitualmente aburridas galas, ha sido en momentos reivindicativo, como cuando ha pedido "más cine y más cultura"; en otros, cómico, y en algún momento, sarcástico, como cuando ha insistido en criticar al iconoclasta director Albert Serra.
La ceremonia ha tenido lugar en el Fòrum de Barcelona ante 2.000 asistentes, entre ellos el presidente del Parlament, Roger Torrent, y la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau.
El acento reivindicativo ha teñido las intervenciones de los ganadores, entre ellas, el Gaudí de Honor, Mercedes Sampietro, que ha pedido a los políticos que "pacten, negocien y hagan política y dejen a los actores la ficción, la épica y la emoción, que es lo que sabemos hacer".