Venezuela estrena moneda con cinco ceros menos en medio de la hiperinflación
Maduro ha anunciado además que los ingresos de los trabajadores se multiplicarán por 35 desde el 1 de septiembre.
Venezuela ha estrenado este martes una nueva familia de billetes con cinco ceros menos tras una reconversión monetaria que ha arrancado en un día decretado como no laborable y en medio de la hiperinflación en que está sumergido el país desde finales de 2017.
La simplificación contable se enmarca en el plan de "recuperación y expansión económica" ideado por el jefe de Estado, Nicolás Maduro, que ha anunciado otras medidas para hacer frente a la grave crisis, algo que el oficialismo respaldará este martes con una movilización, mientras la oposición lo rechazará con un paro nacional.
Los billetes del nuevo cono monetario que han comenzado a circular este martes bajo el nombre de bolívar soberano tienen denominaciones que están más ajustadas a la inflación nacional, que según estimaciones del Fondo Monetario Internacional cerrará el año en el 1.000.000%.
El presidente venezolano ha calificado de exitosos el arranque de la reconversión y ha asegurado que para la noche de este lunes todas las operaciones estaban funcionando al 100%.
Sin embargo, la Comisión de Finanzas del Parlamento, de mayoría opositora, ha señalado que la reconversión ha arrancado casi desfasada debido a la hiperinflación.
"Es una reconversión monetaria que ya prácticamente quedó desfasada frente al espiral inflacionario que se le suma a la hiperinflación que estamos viviendo", ha dicho en una rueda de prensa el presidente de la comisión, Rafael Guzmán.
El legislador ha criticado que el Gobierno no acompañe la simplificación contable con otras medidas para frenar la inflación.
"Parece que los pronósticos del FMI (...) se van a quedar cortos", ha advertido Guzmán, que ha vuelto a rechazar los anuncios económicos de Maduro, entre los que también figura un aumento abrupto de salarios.
Maduro ha insistido este martes en que "viene un proceso de adecuación de la economía" y ha informado de que mañana, martes, el Banco Central y el Ministerio de Finanzas explicarán los términos de las subastas de divisas que por el momento se realizarán tres veces a la semana, aunque planea que se hagan a diario.
El mandatario prevé acabar con el dólar del mercado negro y para ello ha dicho que se establecerá "un solo tipo de cambio fluctuante anclado al petro (criptomoneda gubernamental)" y ha llamado a todos los sectores privados "a entrar en juego".
Pero además el gobernante venezolano ha anunciado que aumentará el precio de la gasolina a estándares internacionales y ha convocado a los ciudadanos a acudir a un censo para que puedan obtener un subsidio.
Precisamente la gasolina, cuyo precio es tan bajo que llenar un depósito mediano es 700 veces más barato que en la vecina Colombia, ha experimentado un aumento de facto este lunes pues los billetes con que se pagaban estos combustibles son de circulación ilegal desde este martes.
La nueva etapa
Efe ha podido constatar que dos gasolineras del centro de Caracas cobran hasta diez veces más que el viernes por llenar los depósitos de automóviles y motocicletas, un precio que sigue siendo casi gratis debido al subsidio estatal a estos hidrocarburos.
Por su parte, la principal patronal del país, la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), ha advertido de que las empresas están en riesgo de quiebra tras los ajustes económicos decretados por Maduro.
"Ajustar los salarios, aunque necesario, al ser incrementados en un monto del 3.500% se hace totalmente inmanejable para una economía que está sumergida en una grave depresión, no existe el nivel de actividad económica, ni el flujo de caja en las empresas para poder cumplir con este incremento", ha indicado Fedecámaras.
Maduro ha anunciado el viernes que los ingresos de los trabajadores se multiplicarán por 35 desde el 1 de septiembre y que el Ejecutivo asumirá el diferencial en las nóminas de todo el sector privado durante 90 días para garantizar que no suban los precios.
Esta oferta, según la patronal, es "poco creíble por sus dificultades de aplicación, sin olvidar la necesidad de elevar el dinero inorgánico" para cumplirla.
El presidente de Fedecámaras, Carlos Larrazábal, cree que el plan de ajuste del Ejecutivo está "lleno de incoherencias", entre ellas la intención de mantener un control de precios que será renovado mañana, cuando el Gobierno anunciará los nuevos costos 'acordados' de 25 productos.