No, la vacuna contra el coronavirus no te hincha los testículos
Nicki Minaj está en el centro de la polémica tras afirmar que la vacuna contra el coronavirus afecta al rendimiento sexual de los hombres.
En la noche de este lunes la cantante Nicki Minaj puso a prueba los límites de la credibilidad al publicar un bulo sobre la relación entre las vacunas contra el coronavirus, el rendimiento sexual de los hombres y el tamaño de sus testículos. Lo que no sabía es que les estaba dejando a huevo la réplica a todos los que están cansados de que muchos famosos aprovechen su influencia para desinformar a sus seguidores.
Justo después de cancelar su asistencia a la Gala Met por ser obligatorio que todos sus asistentes estuvieran vacunados, la cantante compartió una anécdota inaudita sobre un supuesto amigo de su primo que se había quedado impotente y con los testículos inflamados supuestamente a causa de la vacuna.
Por desgracia para el amigo del primo de Nicki Minaj, ahora todo internet conoce su problemilla. Evidentemente, Twitter ha hecho de las suyas:
Esto es lo que pasa cuando contraes una ETS y no quieres que tu novia se entere.
Los Centros de control y Prevención de Enfermedades (CDC) tardaron poco en desmentir estas afirmaciones.
“No hay ninguna prueba de que las vacunas, incluidas las del coronavirus, causen infertilidad en los hombres”, explican los CDC.
Neel Parekh, urólogo de la Cleveland Clinic, lo explicó más en profundidad: “Hay que recordar que las vacunas de Pfizer y Moderna contra el coronavirus contienen ARN mensajero, no el propio virus. Las vacunas de ARN mensajero no alteran el ADN de tu cuerpo ni tienen capacidad para causar impotencia o inflamación testicular”.
Un estudio publicado por la Universidad de Miami sobre el efecto del ARN mensajero en la calidad del esperma concluyó que “no existen alteraciones significativas en ningún parámetro del esperma” entre los hombres sanos a los que analizaron.
Todas las organizaciones médicas de salud sexual siguen recomendando a los hombres que se vacunen contra el coronavirus.
Las teorías que han circulado sobre la “esterilización de la mujer” a través de estas vacunas también son falsas.
“Demasiada gente ataca a las vacunas contra el coronavirus con afirmaciones arbitrarias sin necesidad de aportar la más mínima prueba”, lamenta Amesh Adalja, académico de la Universidad Johns Hopkins y experto en enfermedades infecciosas. “El tuit de Minaj es una prueba de la poca cultura científica que hay entre la población, algo que ha obstaculizado en gran medida la respuesta a la pandemia”.
Las vacunas contra el coronavirus no causan disfunción eréctil ni infertilidad, pero el propio coronavirus sí puede ser un causante, según un estudio publicado en la revista especializada Journal of Endocrinological Investigation.
Los médicos señalan que han atendido a muchos pacientes que han sufrido este problema tras contraer el coronavirus.
“Se ha descubierto que la orquitis (inflamación testicular) y la disfunción eréctil son secuelas posibles entre hombres que sufren una infección activa de covid-19. Se piensa que este virus es capaz de atravesar la barrera hematotesticular”, expone Ranjith Ramasamy, director de urología reproductiva de la Universidad de Miami y coautor del estudio sobre el análisis de esperma anteriormente mencionado.
Las causas pueden ser varias: los datos demuestran que el coronavirus puede infectar y atacar los vasos sanguíneos, lo que explica por qué algunos pacientes de covid-19 sufren trombos, complicaciones pulmonares o renales y otros problemas bucales, como caída de dientes. Esa misma teoría explica también la disfunción eréctil.
Existe la teoría de que la covid-19 puede desencadenar una enfermedad cardiovascular llamada disfunción endotelial, que afecta a los vasos sanguíneos grandes de la superficie del corazón. Algunos expertos sostienen que esa puede ser la causa de la disfunción eréctil de algunos pacientes, aunque es una teoría por confirmar.
“Lo que hemos observado es que hay partículas virales en el pene de hombres que han dado positivo en coronavirus”, comenta Ramasamy. “Hemos descubierto que la covid-19 causa una disfunción generalizada de las células que forman los vasos sanguíneos del pene y que el problema persiste mucho tiempo después de superar la infección”.
El mundo quizás nunca llegue a saber qué sucedió, pero el urólogo Aaron Spitz tiene una teoría.
Un hombre que sufre disfunción eréctil puede pensar que ha sido culpa de la vacuna cuando en realidad el motivo era otro, resume Spitz, autor de la obra The Penis Book.
“Si a un tío le ponen la vacuna, quizás sufra efectos secundarios durante un día o dos, una reacción normal del sistema inmune”, recuerda. En esos momentos, cualquier intento de sexo puede ser decepcionante, teniendo en cuenta que quizás te encuentres hecho polvo.
“A tu cuerpo quizás no le apetezca y tal vez tengas una erección débil o nula”, advierte Spitz.
“Si da la casualidad de que es la primera vez que le pasa, es fácil que le provoque muchísima ansiedad la próxima vez que vaya a tener sexo. Pensará: ‘Espero no volver a tener problemas como la última vez’, y eso desencadena un círculo vicioso de ansiedad por el desempeño sexual”, expone.
Una vez más, esto solo es una teoría. Spitz no es el médico de esta persona ni ha analizado su caso. Spitz simplemente quiere dejar claro que no existen pruebas que demuestren una relación entre la vacuna y el sistema reproductor.
“Moraleja: si tienes miedo de que tus testículos o tu función sexual sufran contratiempos, lo que tienes que hacer es vacunarte, no arriesgarte a contraer el coronavirus. No solo porque el coronavirus puede ser la causa de esos percances, sino también porque es complicado disfrutar del sexo si estás muerto”, concluye Spitz.
Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.