Un profesor de Química analiza una gasolina 'low cost' y otra normal y alucina con lo que encuentra
Él mismo reconoce que le ha sorprendido.
Con el precio de los carburantes disparados y con las vacaciones de semana santa a la vuelta de la esquina, las gasolineras ‘low cost’ se convierten en una opción más que atractiva para numerosos conductores. Pero la misma pregunta ronda la cabeza de todos: ¿ese líquido es de la misma calidad que el convencional? ¿Puede estropear el coche?
El Programa de Ana Rosa se ha puesto manos a la obra y ha hecho una prueba: han cogido una muestra de gasolina 95 de una ‘low cost’, a 1,76 euros el litro, y otra en una de una famosa marca, a 1,87.
Con esos dos bidones han ido a la Universidad de Barcelona, donde han analizado la composición de ambas muestras Carles Fité, profesor titular de Ingeniería Química, y Rodrigo Soto, profesor lector de Ingeniería Química.
Ambos se han mostrado sorprendidos por los resultados que han encontrado. “Básicamente todas son iguales. Yo no veo ninguna diferencia a este nivel de análisis”, ha señalado Fité.
″¿Al final estaríamos repostando la misma gasolina?”, ha querido saber la reportera de Telecinco. “Contienen básicamente los mismos compuestos y en las mismas proporciones”, ha sentenciado Soto. “Sale todo muy muy igual”, ha ratificado Fité.
José Cortes, presidente de la Asociación de Gasolineras Libres (AGLA), había asegurado a El HuffPost que las gasolinas de marca y las low cost son “exactamente igual”.
“Es combustible, es el mismo producto”, añadía mientras recordaba que el producto base de la gasolina “es el mismo en todos lados, es una cosa que está regulado”. Concretamente, todas las estaciones de servicio que hay en España se nutren de un carburante que comercializa Exolum, la actual denominación de la Compañía Logística de Hidrocarburos.
La Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP) matizaba, eso sí, que “las gasolineras tradicionales mejoran las propiedades con los aditivos”.
“Mejoran el rendimiento del motor a largo plazo porque aumentan su lubricidad y reducen su consumo y a reducir su consumo también se reducen las emisiones de CO2”, señalaban desde la AOP, donde sí se indicaba que “a largo plazo” repostar en gasolineras tradicionales “es beneficioso para el motor ya que es un carburante que tiene más calidad”.