Un nuevo estudio sugiere que los anticuerpos del resfriado común podrían proteger contra la covid-19
Los datos preliminares muestran que algunas personas, especialmente los niños, pueden tener anticuerpos que ayudarían a mitigar el impacto del virus.
Los anticuerpos adquiridos tras haber pasado un resfriado común podrían ofrecer cierta protección contra el SARS-CoV-2 (el virus que causa la Covid-19). Algo que ocurriría particularmente en niños.
Así lo dice un nuevo estudio preliminar publicado la semana pasada en la revista Science, y cuyos resultados son casi fruto de un accidente.
Investigadores en Londres estaban trabajando en el desarrollo de nuevas pruebas más sensibles para la detección de anticuerpos Covid-19. Lo que se sabe es que el cuerpo produce anticuerpos, o proteínas, en respuesta a una infección, y estos pueden proporcionar cierto nivel de inmunidad en un futuro, aunque todavía no está claro durante cuánto tiempo.
Mientras trataban de verificar el funcionamiento de estas nuevas pruebas, los investigadores hallaron que algunas personas parecían tener anticuerpos que reaccionan a la Covid-19 pese a no haber estado en contacto con el virus.
Análisis de 300 muestras
Los expertos observaron 300 muestras de sangre recolectadas antes de la pandemia y encontraron que casi todas esas personas tenían anticuerpos que protegen contra los coronavirus que causan el resfriado común. (Hay muchas cepas diferentes de coronavirus, algunas son las que provocan el resfriado).
Además, alrededor del 5% de los adultos tenían anticuerpos que “reconocerían” el SARS-CoV-2 incluso aunque no estuviesen resfriados en el momento en que se les extrajo la sangre. Mientras que el 7% de los adultos que recientemente habían contraído un catarro tenían anticuerpos similares.
Lo más sorprendente es que casi la mitad de los niños del estudio tenían anticuerpos frente al SARS-CoV-2.
Más probabilidades en niños
“Nuestros resultados muestran que los niños tienen muchas más probabilidades de tener estos anticuerpos de reacción cruzada que los adultos”, asegura en un comunicado de prensa el autor del estudio Kevin Ng, candidato a doctorado en el Instituto Francis Crick de Londres.
“Se necesita algo más de investigación para entender por qué ocurre esto”, agrega, “pero podría deberse a que los niños están expuestos de forma más regular a otros coronavirus”.
De hecho, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) aseguran que el resfriado común tiende a ser la razón principal por la que los niños faltan a la escuela. La media estima que pasan tres o más resfriados al año.
Si se confirman las conclusiones, sería una buena noticia para los padres saber que tantos días de estornudos y llantos han servido para algo. Los expertos, de momento, recomiendan precaución.
Reconocer no es combatir
Por un lado, el hecho de que los anticuerpos “reconozcan” un virus no significa que necesariamente lo combatan.
“Los anticuerpos preexistentes que los investigadores encontraron en personas no infectadas reaccionaron con la porción de proteína punzante del SARS-CoV-2 llamada ‘S2’”, cuenta Philippa Marrack, directora del Departamento de Inmunología y Medicina Genómica del National Jewish Health.
La proteína S es la parte del virus que sobresale y esencialmente lo que se pega a las células humanas, explica Marrack. Los anticuerpos contra la parte “S2” de esa proteína “tienen menos probabilidades de ser útiles”, agrega, señalando el asombroso impacto global de Covid-19 (51 millones de casos y subiendo) como evidencia de que la mayoría de las personas no parecen tener anticuerpos contra el virus SARS-CoV-2.
Según la Academia Estadounidense de Pediatría, que está rastreando la Covid-19 en niños en aproximadamente la mitad de Estados Unidos, sólo entre un 0,6% y el 6,4% de los menores que han sido infectados con el virus han requerido hospitalización. (Algunos estados incluyen a adultos jóvenes de hasta 20 años en sus datos). En general, el organismo afirma que las enfermedades graves entre este grupo son “poco frecuentes”.
Investigadores externos como Marrack están de acuerdo en que vale la pena seguir con los estudios, aunque, en última instancia, ella cree que es probable que haya muchos factores que tienden a hacer que los niños sean menos susceptibles a enfermedades graves como consecuencia de la Covid-19.
“Los anticuerpos que se han generado en respuesta a otros coronavirus pueden ayudar hasta cierto punto”, expone.
Por ahora, la mejor defensa sigue siendo la misma: lavarse las manos regularmente, mantener la distancia social y usar una mascarilla.
Los expertos continúan aprendido sobre el virus.
Este artículo ha sido traducido de la edición estadounidense de El HuffPost, originalmente del inglés.