Un meteorólogo avisa de lo que "no sería raro" que pasase la próxima semana: de oír y no creer
"¿Un giro de guion de repente?".
El meteorólogo Luismi Pérez ha dejado visiblemente sorprendido al periodista Diego Losada en el programa de Cuatro En Boca de todos al señalar que la semana que viene podrían comenzar las nevadas en las cimas de la Cantábrica y de los Pirineos.
El experto ha señalado que el que vamos a vivir este fin de semana no será, probablemente, el último arreón de calor de verano: “De hecho, muy frecuentemente finales de agosto e incluso las dos primeras semanas de septiembre pueden ser de calor bastante destacable”.
Lo que sí ha señalado es que este fin de semana será “el último arreón de calor extremo” del año. De hecho, en los próximos días, según ha anunciado, “en el interior de Valencia no será raro que se llegue a valores de 45 o 46 grados de máxima”. “Cerca de la playa no va a querer estar nadie porque va a hacer muchísimo calor”, ha garantizado.
La única noticia ‘positiva’ de eso, ha destacado Pérez, es que con esas temperaturas “normalmente la humedad es baja y por tanto mejor para la sensación térmica”. Sin embargo, ha alertado de que ésta “es una situación crítica para los bosques”.
Preguntado sobre la sequía que sufre España, el meteorólogo ha señalado que tiene que llover mucho para solucionarse: “Para que nos hagamos una idea, tiene que llover de forma continuada, en forma no de chaparrones, sino de lluvia más estilo temporal porque lo primero que tiene que hacer el terreno es empaparse, lo segundo que esa agua se filtre y llegue a los acuíferos y el tercer paso es que estos acuíferos revienten en forma de manantiales y lleguen a los ríos y por tanto se llenen los pantanos”.
“No estamos en una época en que haya lluvias generalizadas pero, al menos, la perspectiva sí es buena porque la semana que viene parece que habrá un parón en este calor y en esta sequía. La semana que viene, a partir del martes, en muchas zonas del país tendremos chubascos y tormentas y probablemente no será raro que se empiecen a ver las primeras nevadas en las cimas de la Cantábrica y del Pirineo”, ha anticipado.
Ha sido ese anuncio el que ha provocado la inmediata reacción de Diego Losada, que ha exclamado: “Pero vamos, ¿un giro de guion de repente? ¿Estamos hablando de temperaturas extremas y me hablas de nevadas en agosto?”
“No sería raro porque en agosto ya podemos tener nevadas, anecdóticas, que conste, y en las cimas del Pirineo. Recordemos que el Pirineo tiene montañas de más de 3.400 metros. Por tanto no sería raro”, ha subrayado.
Pérez ha recordado, de hecho que los últimos años a finales de agosto y principios de septiembre ya ha habido las primeras nevadas: “Ya decimos que quedan en medio de un oasis de calor porque a buen seguro a finales de agosto o principios de septiembre estaremos hablando otra vez de sudar la gota gorda, seguro”.