Así es un día en el rodaje de 'El Ministerio del Tiempo'
Hugo Silva, Nacho Fresneda, Jaime Blanch y Cayetana Guillén Cuervo nos desvelan los secretos del Ministerio.
Silencio. Acción. Repetimos. Silencio. Repetimos otra vez. Una más. Esta es la buena. Descanso para comer. Retomamos.
Esta es la dinámica que siguen los miembros del equipo de El Ministerio del Tiempo desde diciembre, cuando empezó el rodaje de la tercera temporada. La nueva entrega, que todavía no tiene fecha de estreno confirmada en Televisión Española, tendrá 13 capítulos divididos en dos tandas. Un día de trabajo se traduce en seis minutos de capítulo.
Dos premios Ondas, tres Fotogramas de Plata, tres premios Feroz, cuatro premios Iris y tres Premios Madrid Imagen avalan a la serie, que se ha convertido en una de las ficciones más importantes de Televisión Española desde que se estrenó el 24 de febrero de 2015.
A pesar del éxito de crítica y público, la cadena se hizo de rogar y no anunció la renovación por una tercera temporada hasta septiembre de 2016, cuatro meses después de la emisión del último episodio de la segunda entrega.
A la multinacional de vídeo bajo demanda Netflix hay que agradecerle la continuidad de la serie: la cadena ha proporcionado un respiro a los ajustados presupuestos de los que disponía las productoras Onza Partners, Cliffhanger y de la propia TVE.
Al llegar a las instalaciones situadas en Boadilla del Monte, a las afueras de Madrid, el olor a barbacoa inunda el ambiente. Son las 11 de la mañana y el amplio equipo de técnicos está preparando un tentempié antes de volver a otro largo día de grabación.
En el rodaje están cuatro de los protagonistas de la serie: Cayetana Guillén Cuervo, Jaime Blanch, Nacho Fresneda y Hugo Silva que comparten escena en el famoso despacho de Salvador Martí (Blanch). Fuera de plano, más de 30 personas trabajan con la precisión de un reloj suizo para que todo salga perfecto. Antes de empezar a rodar, una máquina de humo se activa para darle al ambiente un tono de pesadez. Después silencio absoluto. Y acción.
Detrás de las cámaras, la script se encarga de recordarle a los actores las líneas cuando se equivocan mientras el director, Gabe Ibáñez, repite una de las escenas porque el travelling de la cámara no ha sido suficientemente rápido.
Como en cualquier rodaje no hay casi descansos y un pequeño instante entre escena y escena nos pone cara a cara con Hugo Silva, que vuelve a la serie de forma definitiva como Pacino. Silva ya había participado en seis episodios de la segunda temporada, cuando sustituyó a Rodolfo Sancho (Julián Martínez), que abandonó temporalmente la ficción para ser el protagonista de Mar de plástico (Antena 3).
Silva, caracterizado como su personaje, asegura que está muy agradecido por la gran acogida del público y de la crítica. Su personaje ha encajado como un guante con Fresneda (Alonso de Entrerríos) y Aura Garrido (Amelia Folch) y parece que llevan una década compartiendo escena. El actor afirma que el éxito se debe a los guiones y a la construcción de los mismos: "Los roles entre Alonso, Amelia y Pacino están muy definidos y eso facilita mucho el trabajo".
Esa unión entre los tres actores es una de las grandes bazas de la serie. "En esta profesión todo es muy sencillo o es imposible y la química se tiene o no se tiene", afirma Fresneda, caracterizado como Alonso de Entrerríos pero con ropa actual.
Fresneda revela entre susurros —porque sus compañeros están rodando a escasos metros— que en esta temporada su personaje seguirá sin adaptarse a su nueva época. Las escenas junto a Hugo Silva —con el que comparte piso en la ficción— son las más aplaudidas de la serie y muestran la gran química que hay entre ambos. "Pacino y Alonso tienen un problema, que no se entienden. Los años 80 y el Siglo de Oro son muy distintos y claro...", asegura el actor.
ÉXITO TRANSMEDIA
Los miembros de la patrulla suelen viajar por la historia de España para evitar que se produzcan cambios que alteren los acontecimientos más importantes del país. Cuando se emite un episodio de una época concreta, las búsquedas se disparan en Google. Además, Hugo Silva afirma que conoce institutos en los que se ponen los episodios para aprender de Historia.
El Ministerio del Tiempo ha logrado crear una base de fans llamada ministéricos que ocupan todas y cada una de las tendencias de Twitter durante la emisión de los episodios.
La serie es todo un ejemplo de producto transmedia: los fans pueden disfrutar de Una llamada a tiempo, un podcast en cuatro capítulos, con Hugo Silva y Jaime Blanch, realizado en colaboración con Radio Nacional que narra las misiones en las que Pacino ha participado por petición de Salvador entre su marcha en la segunda temporada y esta tercera.
Además, en la segunda parte de la tercera temporada habrá una nueva experiencia de realidad virtual, Salva el tiempo, en la que se podrá caminar e interactuar con objetos y personajes de la serie.
La serie también ha saltado al cómic y desde el mes de abril está en las tiendas Tiempo al tiempo, el capítulo especial creado para este formato que protagoniza Salvador Martí.
EL PAPEL DE AURA GARRIDO
La serie se graba en dos amplios platós. En uno de esos emplazamientos se encuentra el conocido despacho de Salvador, que da pared con pared con la mesa en la que Angustias (la secretaria) da paso a los miembros de la patrulla que vienen a dar parte de la misión.
En el plató no está Aura Garrido ya que se encuentra inmersa en otros proyectos que aceptó en ese impasse entre la segunda y la tercera temporada, cuando TVE se pensaba si renovar o no la serie. La actriz dejó grabadas parte de sus escenas nada más comenzar el rodaje y parece que tendrá menos protagonismo que en las pasadas entregas.
Macarena García, que tampoco se encuentra en plató, es una de las nuevas caras que podrán verse en la nueva temporada. "Será una mujer referente, luchadora y resistente de la II Guerra Mundial", ha dicho la actriz sobre su papel en la serie.
Una calle más arriba, en otro gran edificio, está el plató en el que se encuentran las famosas puertas del Tiempo que llevan a las distintas épocas de la historia, el archivo del Ministerio y la cafetería.
No es raro ir paseando por los amplios platós con grandes cromas (pantallas verdes) y encontrarse al mismísimo militar venezolano Simón Bolívar y a un supuesto funcionario del Ministerio repasando entre dientes su papel porque está a punto de entrar en escena. Además del revolucionario bolivariano, en esta nueva temporada aparecerán el director de cine Alfred Hitchcock, Hitler, Goya y Buñuel, como se desveló en el tráiler.
Guillén Cuervo (Irene Larra en la serie) tiene su propia legión de seguidores: los cayetaners. La actriz acaba de terminar de rodar una escena junto a Blanch, que ha durado unas dos horas y que probablemente no ocupa más de un minuto en pantalla. Todavía con la ropa del personaje, se sienta en la silla de su falso jefe y habla sin tapujos sobre la sexualidad de Irene. "El personaje está escrito de una manera muy inteligente y aborda su homosexualidad sin tratarla. Irene es así y ya está, por eso muchas chicas jóvenes se han sentido identificadas con ella", asegura.
Después de más de seis horas de rodaje, Jaime Blanch, la máxima autoridad del Ministerio, se dirige a la audiencia y deja un mensaje breve y conciso: "Yo vería El Ministerio del Tiempo por higiene mental".
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