Un brote de coronavirus obliga a confinar a 178 alumnos de un colegio en Getafe
Por el momento, hay 49 personas afectadas por el mismo.
El colegio público Ana María Matute de Getafe se ha visto obligado a confinar ya 18 de las 28 aulas del centro a causa de un brote de contagios por covid-19, que se inició el 20 de octubre pasado y que afecta, al menos, a 49 personas, la mayoría de ellos alumnos del centro.
Desde la Consejería de Sanidad han confirmado a Efe que el colegio ha sido intervenido por Salud Pública y que, por el momento, hay 49 personas afectadas por el mismo, aunque fuentes sindicales aseguran que son más, ya que “no se iniciaron las pruebas de cribado hasta el 5 de noviembre pasado”.
Por su parte, fuentes de la Consejería de Educación han añadido a Efe que, a día de hoy, permanecen en cuarentena en sus casas “178 alumnos y 7 aulas”, ya que “gran parte de las aulas en cuarentena han retornado ya a su actividad y el resto lo harán en breve”.
El sindicato CCOO ha criticado que, a pesar de las “continuas peticiones de actuaciones y de solicitud de medidas preventivas e incluso del cierre temporal del centro educativo”, la Comunidad de Madrid “hizo oídos sordos” y “no inició las pruebas de cribado hasta el pasado viernes”.
“Pero ahí no queda la cosa. Inexplicablemente dichas pruebas solo incluyeron al alumnado, dejando fuera al profesorado y demás trabajadores y trabajadoras del centro educativo”, añaden desde CCOO en un comunicado, donde acusan al Gobierno regional de “descoordinación y falta de diligencia”.
Según el sindicato, este retraso en el cribado de los alumnos “ha provocado que un pequeño brote que se podía haber atajado con una actuación rápida haya derivado en una extensión del contagio que ha obligado a confinar 18 de las 28 aulas del colegio”.
Aún así, desde la Consejería de Sanidad insisten en que se han seguido “todos los protocolos de cribado a los escolares y a los profesores relacionados con el brote”, para lo cual se cuenta con un convenio con Cruz Roja “que incluye el desplazamiento de sus equipos para los cribados”.
En cuanto al posible origen del brote, desde la Consejería barajan la posibilidad de que haya surgido “por la relaciones sociales que se han mantenido en torno al Puente de Todos los Santos”, algo “previsible en el actual contexto en el que nos encontramos y en parte por la relajación del uso de la mascarilla”.