Un bar de Valencia se lleva los aplausos con la decisión que ha tomado con el Mundial
"Los principios de una persona deben estar por encima del dinero”.
El pasado domingo dio el pistoletazo de salida el Mundial de Qatar y lo hizo rodeado de polémica y con el foco mediático no solo puesto en lo que ocurre sobre el terreno de juego.
La violación de derechos humanos del colectivo LGTBI, la situación de la mujer en el país o las continúas declaraciones de los responsables han hecho que más de uno hayan decidido no seguir los partidos, incluso los de la selección española, por principios.
En los últimos días, la cafetería Lar Botánico de Valencia se ha hecho famosa por anteponer los derechos humanos al dinero que pueden ganar con el Mundial. Por ello, esta tarde no va a poner el partido debut de España contra Costa Rica, igual que no aún no ha puesto ninguno de los disputados ni pondrá los que están por llegar hasta que termine el próximo 18 de diciembre.
César Soler, el gerente del local, planteó esta idea a su hermano y su tío, los otros responsables del bar, hace un mes y medio. Les dijo que no le llamaba lo suficiente como para darlo.
“En Qatar no se respetan los derechos humanos ni las libertadas fundamentales, está coartada la libertad de la mujer, etc. Tampoco se ve ambiente de Mundial, se está jugando en diciembre parando las ligas... Fue un cúmulo de cosas que me hacían defender esta postura”, cuenta ahora Soler. La decisión fue apoyada por su familiares.
La semana pasada comunicaron su decisión en una pizarra para que todos los clientes conocieran su medida. “Debido a que no aprobamos la celebración de un mundial de fútbol en un país en el cual no se respetan las libertades fundamentales, no retransmitiremos ningún partido, incluidos los de la selección española. Lamentamos las molestias, pero nuestra moral no nos lo permite”, escribieron en la pizarra.
Este mensaje llegó a Twitter gracias a un usuario y se hizo viral. Soler, que lleva 26 años trabajando en este bar, comenta que la mayoría de la gente les apoya en su decisión. “Algunos están a favor y otros en contra, pero casi todos entienden que no los pongan por principios”, relata.
Además, afirma que no van a perder clientela por esta decisión: “Tú no pierdes a la clientela por un partido de fútbol. Llevamos 49 años abiertos y es una estupidez eso de que la vayamos a perder ahora”.
La consecuencia que tendrá su medida, según añade, es que no ganarán los beneficios extra que les podría repercutir el Mundial y que, en otras citas similares, ha podido rondar los 3.000 euros. “Los principios de una persona deben estar por encima del dinero”, deja claro el responsable del local.
Su decisión la llevan hasta el final
El próximo 18 de diciembre, España podría disputar su segunda final de una Copa del Mundo y lograr la segunda estrella, tras la que consiguió en 2010 en la cita de Sudáfrica.
Los partidos de las elimintorias y, por supuesto, la final serían una oportunidad de oro para que los bares hicieran grandes cajas. Pero ni una situación como esta, de España pasando rondas, le llevaría a Soler a cambiar de opinión.
“Cuando tomas una decisión de este tipo por principios, ética y moral tienes que llevarla hasta el final. Como digo, los principios deben anteponerse siempre”, asegura.
“Si cambiamos la idea conforme avanza el Mundial estaríamos dando la razón a los que nos han tachado de oportunistas. Cuando tomas una decisión así hay que ser serios y no montar un circo”, añade.
Soler incluso reconoce que si no tiene que trabajar igual tampoco ve el partido: “Por ejemplo, los fines de semana cerramos y este domingo no creo que vea el España-Alemania. No me nace ver este Mundial, prefiero salir a pasear, ponerme una película, leer, etc. Es que no me llama”.
Una decisión valiente que le priva de mayores ingresos económicos, pero que le ha servido para ganarse el respeto de muchos clientes.