España apura la alarma y adelanta la apertura de fronteras europeas al 21
El país encara la última semana del estado de alarma, con Galicia ya en la nueva normalidad desde este lunes.
España afronta la última semana en estado de alarma, con Galicia ya fuera a partir de este lunes, y se prepara para la libre circulación entre comunidades autónomas el próximo 21 de junio, fecha a la que se adelanta también la apertura de fronteras con los países del espacio Schengen.
El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha anunciado la fecha a los presidentes autonómicos dejando atrás la apuesta inicial por el 1 de julio, después de que la Comisión Europea recomendara abrir las fronteras internas el día 15 y de que varios socios optaran por ese calendario.
La excepción será Portugal, que prefiere mantener cerrados sus pasos hasta el 1 de julio. Será entonces también cuando se abrirán de forma escalonada las fronteras con terceros países considerados “seguros”.
A la espera de esa próxima movilidad nacional e internacional, vista con esperanza y también con preocupación por varios presidentes autonómicos, los gallegos estrenan la “nueva normalidad”, con sus propias reglas, mientras que la mayoría del país estará en la fase 3 y solo Madrid, Barcelona, Lleida y las provincias castellanoleonesas de Salamanca, Ávila, Segovia y Soria continuarán en la fase 2.
Después de tres meses de normas relativamente homogéneas para todo el país, según la fase en la que se encontrara cada territorio, esta semana comenzarán a vislumbrarse los efectos del fin del mando único.
Galicia, que ha dejado claro que la nueva normalidad no significa el fin de las restricciones y las limitaciones de aforo, publicó este sábado sus nuevas normas y el mismo paso ha dado la Comunidad Valenciana, que ha diseñado una fase 3 “avanzada” con reglas muy similares a las gallegas y en algunos casos incluso más flexibles.
Si en fase 3, por ejemplo, no se puede superar el 50% del aforo de bares y restaurantes o de locales comerciales, Galicia y la Comunidad Valenciana amplían desde este lunes ese margen al 75%.
Del 75% de las terrazas, Galicia pasa al 80% y la Comunidad Valenciana no les pone límite, como tampoco lo hace para el número de asistentes a las bodas.
Aunque en la fase 3 se permite abrir discotecas y bares de ocio nocturno con un tercio del aforo, y así lo ha regulado la Comunidad Valenciana, por el momento el gobierno gallego solo permitirá que tengan terrazas a aire libre.
El resto de gobiernos autonómicos deberán tener listos sus propios reglamentos para el próximo fin de semana, cuando se pone fin al estado de alarma y se volverá a permitir la movilidad en todo el territorio nacional.
El debate de la movilidad interna
Las condiciones de movilidad interna antes y después del 21 de mayo se han convertido en caballo de batalla política y suspicacias entre territorios tradicionalmente vacaciones con una incidencia menor de la pandemia y grandes núcleos de población que se han visto mucho más afectados.
El gobierno gallego ha pedido una normativa que permita limitar los movimientos entre ayuntamientos y comunidades autónomas sin necesidad de activar nuevamente el estado de alarma, mientras que el murciano ha cuestionado la libre movilidad a partir del día 21 entre autonomías previamente en distinta fase de desescalada.
En un punto intermedio está Cantabria, que el martes o miércoles aprobará un decreto para permitir ya desde el viernes la entrada y salid de personas de regiones limítrofes, eso sí, en fase 3 de desescalada, como País Vasco, Asturias y La Rioja.
Las fronteras y los aeropuertos
Otro punto crucial de los preparativos de la desescalada será la llegada de turistas extranjeros procedentes de países europeos integrados en el espacio Schengen a partir del 21 de junio.
El ejecutivo andaluz, uno de los principales puntos de entrada de turistas extranjeros en la península, ha pedido un protocolo “garantista” para no “importar” casos con la apertura de las fronteras.
Y el madrileño ha reclamado un plan para Barajas ante la apertura del aeropuerto internacional.
El plan piloto turístico de Baleares
La apertura de fronteras será otra prueba de fuego en la lucha contra el coronavirus, pero antes, este mismo lunes, comienza en Baleares el experimento de los corredores turísticos con Alemania.
El plan piloto será más corto de los esperado por la decisión del Gobierno de adelantar la apertura de las fronteras habrá seis vuelos —5 en Mallorca y 1 en Ibiza, frente a los 41 programados— y en él participarán corrientes pero también especialistas y personal propio de los turoperadores para evaluar las medidas de seguridad adoptadas y preparar un futuro “desembarco”.
Su principal aportación será probar el funcionamiento de los protocolos de seguridad sanitaria de cara a una temporada en la que espera que reactive, aunque sea parcialmente, el principal motor económico del archipiélago —y de buena parte del país— en plena temporada estival.