Trabajadoras de las artes escénicas critican la desigualdad de género en el sector
Sólo el 7% de películas españolas están dirigidas por una mujer.
Las mujeres de las artes escénicas en España son invisibles para las instituciones. Al menos esa es la sensación que tienen, diez años después de la puesta en marcha de la Ley de Igualdad, muchas actrices que llevan años trabajando en el sector y aseguran que siguen sin disfrutar de las mismas oportunidades que sus compañeros masculinos. Distintas asociaciones de mujeres critican la falta de voluntad política para acabar con la desigualdad en el sector. "No estamos ni en la agenda de Igualdad ni en la de Cultura", lamentan.
Además de las condiciones laborales típicas de estos trabajadores—actrices, representantes y guionistas—, que ya son poco usuales (horarios y salario dispar, entre otras cosas), las mujeres sufren las consecuencias de que no se las valore igual que a sus compañeros. Por eso se enfrentan a una menor visibilidad, menor presupuesto a la hora de emprender proyectos, a la brecha salarial y a la brecha por edad.
En el artículo 26 de la Ley de Igualdad se otorga igualdad de trato y de oportunidades de mujeres y hombres en todo lo que concierne a la creación y producción artística e intelectual. Pero las trabajadoras critican que la ley no se cumple y reclaman más voluntad política para acabar con este incumplimiento, más planes y medidas de acción positiva y más estudios contundentes.
Varias asociaciones han denunciado la situación en diferentes momentos. El último acto fue en los Teatros Luchana con motivo del aniversario de la ley de Igualdad al que acudieron representantes de la asociación Clásicas y Modernas y de la Asociación de Mujeres Cineastas y en Medios Audiovisuales (CIMA); además de distintas actrices, guionistas y representantes.
El último estudio realizado por la CIMA pone de manifiesto que, en 2015, había un 26% de mujeres frente a un 74% de hombres en el cine español. Así lo afirma la directora de la Asociación y guionista Virginia Yagüe, que critica la dificultad para encontrar datos sobre la situación de las mujeres en el sector: "Deberían ser ofrecidos por las instituciones pero es muy difícil encontrarlos". Además señala que, según datos del Instituto Complutense de Análisis Económico (ICAE), de media las directoras tienen la mitad de dinero que un varón para emprender una película.
"La baja presencia de mujeres afecta a la producción", asegura Yagüe, "y sólo un 28% de actrices en películas españolas hablan". "Apenas se ve a las mujeres sin relaciones eróticas o amorosas y salimos cuatro veces más en ropa interior", explica. Según el informe Mujeres en la Cultura de 2012 —el último que hay del Ministerio de Cultura—, en el 28,5% de las películas en las que aparecen personajes femeninos, estos sufren algún tipo de violencia. "El cine está en manos masculinas", dice rotundamente la cineasta. De hecho, las cinco películas nominadas a los premios Goya este año estaban dirigidas por hombres y cuatro de ellas tenían argumentos claramente masculinos.
Otros datos de la CIMA son los siguientes:
- Sólo el 7% de películas españolas están dirigidas por una mujer.
- Sólo un 15% de películas han sido realizadas a partir del guión de una mujer.
- Las películas producidas por una mujer componen un 21% de la industria.
- Sólo hay un 20% de mujeres en los organigramas de los equipos directivos de las cadenas de televisión.
- En televisión, las mujeres con puestos de responsabilidad y poder suponen un 5,7%.
- En los festivales de cine, las mujeres presentes en los jurados que deciden el palmarés no superan el 33%.
A la vista de estos datos, actrices como Berta Ojea, Secretaria de Igualdad en la Unión de Actores y Actrices, critican que existen "brechas salariales y brechas por edad": "La ley obliga a que haya igualdad, pero esto no se aplica", asegura. "Las mujeres están seis puntos por debajo de los hombres en la cultura. La industria cultural sigue siendo conservadora para las mujeres", asevera la actriz.
A su lado, Elvira Herrera, representante de actrices y actores, señala que "los actores varones siguen cumpliendo años y las mujeres no pasan de los 30". Ella no puede prometer nada a sus actrices, porque "no tienen dónde exhibir su talento". Cree que están "en manos de señores que no quieren oír lo que quieren decir las mujeres". Además, afirma que la brecha salarial es notable: "De media, las mujeres cobran unos 200 euros menos que los hombres, porque ellos son más conocidos". La actriz Paula Echevarría también criticó esta desigualdad en la última edición de los premios Feroz.
Las asociaciones feministas de actores y actrices denuncian que las mujeres no obtienen los puestos de responsabilidad que su formación merece. "Una cultura desigual crea desigualdad", afirman en un manifiesto conjunto, "una cultura creada principalmente por hombres produce unos contenidos que refuerzan el protagonismo masculino al presentar al varón como sujeto". Critican también que esos contenidos luego pasen a la educación perpetuando la desigualdad. Esta desigualdad en las artes y las ciencias constituye, para ellos, un "grave déficit democrático".
La guionista y directora de cine Inés París afirmaba en Mujeres en la Cultura de 2012 que "el cine es cosa de hombres": "Hay muchas mujeres trabajando en la industria del cine pero no están en puestos directivos, que es donde se decide qué se cuenta y cómo". Señala lo costoso que es para ellas tener una carrera con un mínimo de continuidad. "Se podría decir que las películas dirigidas por hombres tienen protagonistas masculinos en un 80%, mientras que a las mujeres se las muestra como seres pasivos que no se comunican", asegura.
El cine español ofrece una imagen estereotipada de las mujeres que premia a mujeres jóvenes y guapas. Por eso una de las mayores críticas es la brecha por edad. Se excluye a las actrices en función de su edad o de un aspecto físico que no responde a los roles estandarizados. París denuncia que esto es causa de que no haya más mujeres en puestos de dirección y resalta el "carácter de agente socializador" del cine.
La actriz Isabel Veiga Barrio tiene clara la diferencia de trato que se recibe por ser mujer en su sector: la duración media de la carrera profesional de ellas es de 7 a 10 años y la oferta de trabajo se concentra en grupos de edad entre 20 y 35 años. En cambio, los hombres tienen una duración media de trabajo de 30 años y mayor concentración del mismo entre los 40 y los 60. "La trayectoria de las mujeres es discontinua, intermitente y con periodos de inactividad laboral". Una idea que denunciaba en febrero la actriz Michelle Jenner, al señalar que son necesarios más papeles para mujeres maduras: "Quiero seguir trabajando toda mi vida".
Desde las distintas asociaciones de las artes escénicas exigen el cumplimiento de la ley vigente y de los manuales de buenas prácticas en el acceso a los puestos de decisión. Resaltan la necesidad de paridad en los jurados y en las candidaturas a los premios, así como de más subvenciones al mundo asociativo.
Además, piden más diálogo y aliados entre los partidos políticos para que pongan medidas y sanciones para el cumplimiento de la ley por parte de las empresas contratantes. "Así se visualizan talentos ocultos", señala Ojea.
Todas estas diferencias no ocurren únicamente en las artes escénicas. Escritoras, pintoras, escultoras o poetas también denuncian la discriminación que sufren en los sectores donde trabajan. Estos son algunos de los datos del informe Mujeres en la Cultura de 2012:
- En 30 ediciones de Premios Nacionales de Artes Plásticas sólo ha habido seis mujeres ganadoras.
- En las Medallas de Oro al Mérito en Bellas Artes, sólo ha habido nueve mujeres ganadoras desde 1969.
- Casi el 70% de licenciados son mujeres, pero esto se invierte a un 30% en la selección de jóvenes candidatas a ayudas, becas y premios.
- Sólo un 10% de mujeres han recibido premios nacionales por sus obras literarias, frente a un 90% de hombres.
- Sólo un 8% de mujeres han recibido el Premio Nacional de Literatura Miguel de Cervantes.
- Un 11% de mujeres han recibido el Premio Nacional de las Letras Españolas.
- Un 5% de los ganadores del Premio Nacional de Literatura Dramática son mujeres, un 6% el de Literatura Nacional Narrativa y un 9% el Premio Nacional de Poesía.
- Un 0% de mujeres ha ganado el Premio Nacional del Cómic.
La escritora Erica Jong decía en su libro Miedo a Volar: "La mujer tiene problemas mucho más grandes (que el hombre) para llegar a ser artista porque tiene problemas mucho más grandes para llegar a ser persona". El libro se publicó en 2003, pero parece que 14 años después sus denuncias siguen igual de vigentes.
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