Un verano de festival de teatro en festival y tiro porque ya (me) toca

De nuevo llega el verano y España se llena de grandes y pequeños festivales de teatro. Este año, habrá una reina teatral, la obra Safo. Y un rey que será El burlador de Sevilla. Ambas estarán en el Grec de Barcelona, y, por separado, en el Festival de Mérida y en el Festival de Almagro, respectivamente.

Safo es la apuesta teatral que une a la rockera Christina Rosenvinge, que pone la música y será parte del elenco, a la directora de escena Marta Pazos y a María Folguera, que pondrá la dramaturgia. Si a eso se añade un estupendo elenco que incluye a Natalia Huarte, no hay duda de que Safo va a reinar, al menos desde el punto de vista mediático y en el interés del público.

El burlador de Sevilla de Tirso de Molina es la apuesta veraniega de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, que en otoño llegará a Madrid. Así que tiene un gran elenco, que incluye a Rafa Castejón y a Arturo Querejeta. Un director que ya ha demostrado que tiene algo que decir a partir de los clásicos, como es Xavier Alberti. Y apuestas seguras y de calidad para la iluminación, Cornejo, la escenografía, Max Glaenzel, y el verso, Vicente Fuentes.

Si estos dos espectáculos serán los reyes, ¿cuál es la aristocracia que le acompañará?

El Grec, un teatro griego que se desborda por toda la ciudad

El Grec recupera al fauno en su cartel y también su importancia. Por eso, como ya se ha dicho, Safo, la reina teatral del verano y El burlador de Sevilla, el rey, coincidirán en este festival. Un festival que ofrece en el teatro griego, un concierto homenaje a Sondheim, con cuarenta músicos y ocho cantantes. Y donde se va a estrenar Paraíso perdido, obra hecha por Helena Tornero a partir del poema de John Milton, que dirige Andrés Lima y que contará con Pere Aquillué.

En general, la oferta es abundante. Con grandes platos internacionales como Ein volksfeind (Un enemigo del pueblo) de ibsen dirigida por Thomas Ostermeier. O Bros de Castelucci en el Tetre Lliure de Montjuic. Hasta exquisitos platos locales preparados por Alex Rigola, con Ofèlia (Panic Attack); Jordi Casanovas con Inmunitat; Marta Buchaca con Quant temp em queda?; u Oriol Broggi con 28 i mig, una ensoñación que parte de 8 ½ de Fellini.

Tampoco se queda corto en cuanto a danza. De hecho, comienza con las entradas agotadas para ver a la primera compañía de Nederlands Dance Theater. Sigue con el estreno absoluto de Seises de Israel Galvan. Y La Veronal presentarán Opening night.

En cuanto al teatro que viene de otras partes de España destaca Tartufo de Molière, que con Pepe Viyuela a la cabeza del reparto puede que rompa taquillas. También deberían triunfar Los Torreznos que llegan con Las cosas, una performance que de puro absurdo hará reír y mucho.

Incluso no se han olvidado de los niños y han programado Olympus kids: amazones, prometeu, demèter la creación de Agrupación Señor Serrano para niños de 7 a 11 años, a la que está prohibido que asistan los adultos. O el espectáculo de danza familiar Loop de Arcaladanza. Y, en el propio teatro griego FIQ (¡Despierta!), un espectáculo de acrobacias.

Del 29 de junio al 1 de agosto

Festival de Almagro, Pasqual, Pimenta, Marsillach, Galicia y la otra orilla

La entrega del Premio Corral de Comedias a Lluis Pasqual y el elencazo del espectáculo de Adolfo Marsillach soy yo de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, pondrán el punto de glamur que todo festival necesita. Un glamur que se completará en el homenaje que se le va a hacer a Helena Pimenta.

Por otro lado, Urugay, el país invitado de esta edición presenta cuatro espectáculos. Constante un Calderón que ponen en escena otros dos Calderones, Guillermo y Gabriel, que prometen un Calderón al cubo. Semiramis, una versión de La hija del aire también de Calderón. El perro del Hortelano, de Lope de Vega. Y, Góngora estuvo aquí, una obra sobre qué pasaría si Góngora volviese. Suficiente para hacerse una idea de cómo se hace teatro clásico en aquel país.

No son las únicas obras que vendrán de allende de los mares. La más interesante será una versión musical de La vida es sueño que viene de Chile. Pero también habrá de Argentina (La celosa de sí misma), Colombia (¡Donde hay agravios no hay celos!), de Guatemala (El Polpo Vuh), de México (Amor: Laberintos para cuerpos y pantallas y En perseguirme mundo ¿qué interesas?). Hasta de Nueva York llegará una versión de aspecto violento de La vida es sueño.

También de fuera viene Don Juan, versión firmada por Antuñano y que se ha montado con actores de Costa de Marfil. La otra es Mirar a los mirones, entremés, posiblemente cervantino que los Grumelot, con el apoyo del Globe Theater londinense, montarán con su estilo performativo y con actores ingleses y españoles.

Y con todo y con eso, el festival incluye todavía más obras de diferentes puntos de España, pero sobre todo de Galicia, la comunidad invitada. De donde llegan Estela do día, Calderón enamorado, A barca do inferno, Arte sen guión y el estreno absoluto de Toffana, la historia del veneno indetectable que persiguió la Santa Inquisición.

Desde el 30 de junio al 24 de julio

Festival de Mérida, dos teatros para griegos, romanos y estrellas mediáticas

Este festival se expande en Mérida. Los grandes estrenos se seguirán viendo en su teatro romano, pero en el Teatro María Luisa recibirán esos espectáculos que están en gira y ya han triunfado en otras plazas. Lo que proporciona la opción de prolongar la estancia en Mérida y a los emeritenses ver aquellas obras de las que solo oyen hablar.

Entre los estrenos de este festival, no cabe duda de que el público está esperando Miles Gloriosus. ¿Porque es una comedia de Plauto? Pues probablemente no. La están esperando porque la protagoniza el simpático Carlos Sobera que se mete todas las noches en su casa como el celestino o el cupido de First Dates. Al que acompañan otros actores populares como Elisa Matilla o Juanjo Cucalón. Todos bajo la dirección de Pep Antón que ya ha demostrado en este teatro sus dotes para la comedia de enredo y popular.

Si no se llega a tiempo para conseguir una entrada para esta comedia dos buenas alternativas estarán en el Teatro María Luisa. Una es Antígona de Chapitô, de la que es muy probable que los fans agoten entradas, lo hacen siempre. La otra es Las bingueras de Eurípides de las chirigóticas Niñas de Cádiz.

Además de risas es de esperar que La tumba de Antígona, obra de María Zambrano, ponga inteligencia y belleza en el cierre del festival. Un festival que habrá empezado con un Shakespeare de tema romano, Julio César. Una producción argentina con un equipo artístico que no es cualquier cosa. Todos son unas estrellas en su país de las que llenan los teatros de la Avenida Corrientes hasta en verano con tan solo anunciarse, sobre todo María Casán, a la que hay que ver cómo pisa el escenario.

Un festival que tratará específicamente temas de actualidad como la ecología o el feminismo. El primero vendrá de la mano del Misántropo que a los padres y abuelos atraerá por Beatriz Carvajal y a los adolescentes y jóvenes por Angy Fernández. Y la reivindicación de las figuras femeninas llegará con la Minerva que protagoniza Assumpta Serna dirigida por Scott Cleverdon. Además, claro está, de la Safo que se hablo al principio de este artículo.

Pero este año, no solo de teatro vive este festival. Habrá mucha danza. El flamenco de Rafaela Carrasco con Ariadna, al hilo del mito. O el de María Pagés con De Sheherezade. Y el Ballet Español de Murcia con Penélope.

En medio de todo esto, puede que pase desapercibido el musical El aroma de Roma de Woody Aragón. Las obras que es seguro que no pasarán desapercibidas, por la buena prensa que tienen, serán ¡Qué salga Aristófanes! de Els Joglars y Numancia de Nao d’amores y la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

Del 1 de julio al 21 de agosto

Otros festivales

Para aquellos que no quieran o no puedan desplazarse a los anteriores siempre existe un festival cercano que mezcla producciones locales con nacionales o internacionales. Como la Mostra Internacional de Teatro de Ribadavia que este año atraerá todas las miradas por presentar Billy’s violence de la Needcompany. Como el de Peralada que aunque fundamentalmente se dedica a la música tiene programada a Mónica Bellucci con la obra María Callas “Lettres y Memoires”. O el de Olite, en la que destacan un montón de éxitos La Panadera, Para acabar con Eddy Bellegueule, Hoy puede ser mi gran noche, La melancolía del turista, Las aves, Las que limpian y el teatro inmersivo de Los números imaginarios con Quijotes y Sanchos.

Y muchos otros que todavía no han presentado su programación como el del Teatro Castillo de Peñiscola para los que vayan a Alicante, o el de Teatro Clásico de Alcántara para los que prefieran Extremadura, o el de Olmedo en Castilla y León, los Veranos de la Villa de Madrid o Festival del auditorio de El Escorial.

Hagan juego, señoras y señores. Vayan de festival de verano en festival y tiren de nuevo porque ya les toca.