Soraya Sáenz de Santamaría reaparece y responde así a quienes le piden que vuelva a la política
La exvicepresidenta repasa su trayectoria y habla de la actual situación política.
Fue la mujer más poderosa de España de la mano del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy. Ahora, cuatro años después de dejar la política tras la moción de censura, Soraya Sáenz de Santamaría, que es miembro del Consejo de Estado, reaparece en un acto organizado por la Cadena SER.
Se trata de una de las jornadas de los Congresos del Bienestar, que se han celebrado este fin de semana en Tudela (Navarra), donde la exvicepresidenta del Gobierno ha repasado su trayectoria política, ha hablado sobre su vida lejos de los focos y también se ha pronunciado sobre cómo ve ella, desde la distancia, la actual situación.
Pero también ha dejado claro lo que responde a quienes le piden que regrese a la política.
“Los poderes económicos me dicen: tienes que volver”, explica. “Y yo les contesto: ¿y tú? ¿Vendrías conmigo?”, responde.
En una charla con la catedrática de Filosofía Amelia Valcárcel, Sáenz de Santamaría explica que, tras dejar la política, ha “redescubierto hacer cosas ordinarias”. En política, explica, “pierdes el anonimato, que es un placer, también la vida cotidiana, que es otro placer”.
También contó alguna anécdota de su etapa como vicepresidenta. Por ejemplo, el día que fue a jurar su cargo al Palacio de la Zarzuela, en presencia de los reyes Juan Carlos I y Sofía.
Según relató, de camino al Palacio le llamaron con un problema muy importante que debía decidirse inmediatamente. “Ese día que yo veía a mis compañeros contentos e ilusionados yo solo pensaba en lo que me quería contar a mi aquel señor que hoy es amigo mío, ese día de supuesta tranquilidad, podría haber esperado media hora”, se lamenta.
La exvicepresidenta cree que en política “dan más satisfacción las pequeñas cosas para ayudar a gente que lo necesita, detalles que solo los puedes hacer si tienes ese poder”.
Sobre la actual situación política, Sáenz de Santamaría cree que “hace falta más participación de la sociedad civil en ese ejercicio de poder” y que “ha vuelto la idea de los políticos fuertes, de los hombres fuertes, algunos verdaderos autócratas”. “Sobrevuela la idea de que necesitamos un hombre fuerte y ahí se desdibuja la figura del autócrata y el demagogo”, afirma.
También lamenta la excesiva exposición mediática de los líderes políticos. “He visto muchos políticos enganchados a verse en los medios de comunicación, aunque salieran mal. Esa necesidad de verte en los papeles, de estar, de sentirte en el meollo de algo. Es muy peligrosa esa seducción. La política es una manera fácil de ser popular, de ser conocido, es terrorífico”, asegura.