Hallan nuevos síntomas para identificar el actual brote de viruela del mono
Un estudio basado en datos de pacientes en Londres marca diferencias con anteriores brotes de la enfermedad.
Un poco de luz sobre la enfermedad del momento. Un estudio, publicado en The BMJ (antiguamente conocido como British Medical Journal), ha identificado importantes diferencias en los síntomas de la viruela del mono entre el brote actual y los anteriores en regiones endémicas. Este hallazgo, apuntan los investigadores, podría a ayudar a los médicos a detectar antes las infecciones de un virus que ya ha dejado cuatro muertos fuera de África, dos de ellos en España, conocidos en los últimos días.
Según los datos extraídos de 197 positivos detectados en Londres entre mayo y julio, hay rasgos diferentes. Por ejemplo, el dolor rectal y la hinchazón en el pene, algo que no se daba en anteriores brotes.
De esos 197 pacientes, todos hombres con una edad media de 38 años, 196 se identificaron como homosexuales, bisexuales u otros hombres que tienen sexo con hombres. Y todos presentaban lesiones en la piel o en las membranas mucosas, con mayor frecuencia en los genitales o en la zona perianal. Sobre esta mayoría de positivos en hombres, la OMS lanzó un reciente aviso llamando a reducir el número de sus parejas sexuales, un mensaje que el colectivo LGTBI calificó como “estigmatizante”.
La mayoría (86%) de los pacientes informó de una enfermedad sistémica (que afectaba a todo el cuerpo). Los síntomas sistémicos más comunes fueron fiebre (62%), inflamación de los ganglios linfáticos (58%) y dolores musculares (32%).
Y en contraste con los informes de casos existentes que sugieren que los síntomas sistémicos preceden a las lesiones cutáneas, el 38% de los pacientes desarrollaron síntomas sistémicos después de la aparición de las lesiones mucocutáneas, mientras que el 14% presentaron lesiones sin características sistémicas.
Un total de 71 pacientes refirieron dolor rectal, 33 dolor de garganta y 31 edema de pene, mientras que 27 tenían lesiones orales, 22 tenían una lesión solitaria y 9 tenían las amígdalas inflamadas.
Algo más de un tercio (36%) de los participantes tenía también una infección por el VIH y el 32% de los que se sometieron a pruebas de detección de infecciones de transmisión sexual tenía una infección de transmisión sexual. En total, 20 (10%) de los participantes fueron ingresados en el hospital para el tratamiento de los síntomas, en su mayoría dolor rectal e hinchazón del pene. Sin embargo, no se registraron muertes y ningún paciente requirió cuidados hospitalarios intensivos.
Solo un participante había viajado recientemente a una región endémica, lo que confirma la transmisión en curso dentro del Reino Unido, y únicamente una cuarta parte de los pacientes había tenido contacto conocido con alguien con infección confirmada por viruela del mono, lo que plantea la posibilidad de transmisión por parte de personas sin síntomas o con muy pocos.
“La comprensión de estos hallazgos tendrá importantes implicaciones para el rastreo de contactos, el asesoramiento en materia de salud pública y las medidas de aislamiento y control de la infección en curso”, subrayan los investigadores, que piden que se siga estudiando para fundamentar las políticas de control y aislamiento de la infección y orientar el desarrollo de nuevos diagnósticos, tratamientos y medidas preventivas.
No obstante, los investigadores reconocen algunas limitaciones, como el carácter observacional de los resultados, la posible variabilidad de los registros clínicos y el hecho de que los datos se limitan a un solo centro.