Siete problemas de pareja que SIEMPRE (re)surgen en Navidad
Tú y tu pareja no sois los únicos que discutís más en estas fechas.
Las Navidades pueden ser la época más maravillosa del año para algunos, pero esto no se cumple necesariamente entre las parejas.
El estrés causado por los viajes, los gastos, las agendas al límite y los cuñados las relaciones familiares complicadas pueden dificultar las cosas entre vosotros, ya sea individualmente o como pareja.
La edición estadounidense del HuffPost se ha puesto en contacto con varios terapeutas matrimoniales para conocer cuáles son los problemas de pareja más comunes cuando acaba el año y cómo resolverlos. Estas han sido sus respuestas:
1. No ser sincero sobre los gastos navideños
"Entre comprar regalos, billetes de tren o de avión, las fiestas, las decoraciones, la comida extra y mucho más, los gastos navideños pueden llevar a ciertas discrepancias sobre cuánto y en qué debería gastarse el dinero. Las cosas se complican si un miembro de la pareja trata de ocultar al otro sus gastos o si los presupuestos no se hablan con tiempo.
Para evitar la sensación de infidelidad económica, sentaos y trazad un plan financiero realista a tiempo. Decidid juntos cuánto dinero podéis permitiros gastar, cread un presupuesto y ajustaos a él. Ve a tu lista de regalos y elige quién está en el top 10 y qué parte de tu presupuesto irá a parar a cada persona. Crea un plan para hacer regalos alternativos (baratos) que ilusionarán al receptor, como galletas caseras, manualidades o tarjetas DIY o una cena en casa para más adelante". ―Sheri Meyers
2. Decidir dónde celebrarlo (sin quedar mal con nadie)
"Un problema que suele surgir durante estas fechas es cómo decidir con qué parte de la familia celebrar cada fiesta. La solución clásica es pasar Nochebuena con una familia y Nochevieja con la otra. O se puede rotar para cambiar cada año. Si estas soluciones no funcionan, siempre puedes invitar a ambas partes de la familia a tu casa, pero eso también puede suponer una enorme carga de estrés para cualquiera". ―Danny Gibson
3. El alcohol se va de las manos
"Beber en exceso es un problema en estas fechas. Y no sólo por el alcohol, sino por el mal comportamiento que puede derivar de ese abuso. Independientemente de si tu pareja tiene un problema con el alcohol o no, está bien hacer un plan antes de cada fiesta para aclarar, por ejemplo, cuántas copas beber y cómo volver a casa". ― Kurt Smith
4. Choque de tradiciones
"Imagina que tu familia es más de regalos de Papá Noel en lugar de Reyes o que estás acostumbrado a ver el árbol repleto de regalos y tu pareja piensa que menos es más. Como pareja, cada día aprendemos a sobrellevar nuestras diferencias, pero hasta los más veteranos pueden verse contrariados en estas fechas. Las tradiciones navideñas se crean cuando somos niños y suelen arrastrar una buena carga emocional, lo cual nos vincula mucho a ello y nos hace más inflexibles de lo deseado.
Independientemente de si decidís llegar a un término medio o de si cada año hacéis una cosa, recuerda que no hay una sola forma que sea la buena. Incluso podéis crear una tercera vía que satisfaga a ambos tanto (o más) como la tradición con la que te criaste". ― Winifred M. Reilly
5. Tratar con familia política tóxica
"Si el abuelo Gruñón se emborracha en cada encuentro o tu suegra no es capaz de decir algo bueno sobre ti o tu primo llega siempre dos horas tarde, probablemente también se comportará de esta manera en estas fiestas. En vez de enfadarte, asúmelo y prueba una reacción diferente en la dinámica familiar. Por ejemplo, respira hondo y compórtate como el anfitrión respetuoso, maduro, racional, pacífico y cálido que eres.
Ten un plan B con tu pareja para resolver estas situaciones en equipo. Crea una señal o una palabra secreta que signifique 'ven aquí, por favor. Necesito ayuda'. Cuando pongáis en marcha vuestro plan, relájate y prepárate para lo bueno. Concéntrate en mantener la calma y en pasar una buena fiesta juntos". ― Meyers
6. Tener filosofías diferentes sobre los regalos
"Quizás a uno le encanta investigar, buscar y comprar el regalo perfecto, independientemente del importe, mientras que el otro es más práctico y no ve necesario un gasto extraordinario para un regalo navideño. Algunas personas piensan que la cantidad de dinero que se gastan en los regalos para la familia o amigos es un reflejo directo de la cantidad de amor que sienten por ellos. Si ambos miembros de la pareja no están de acuerdo en esto, puede que uno o los dos sienta rencor o enfado.
Para evitar este problema, la pareja debería hablar de la compra de regalos y acordar más o menos cuánto van a gastarse. Probablemente esto suponga la revisión previa de facturas y gastos futuros". ― Gibson
7. Encontrar tiempo para estar juntos cuando la agenda es un caos
"Si ya de por sí tenemos una vida ajetreada, añade los regalos, las fiestas y todos los factores estresantes que consumen tiempo y dinero, y verás reducida la conexión emocional con tu pareja.
¿Cómo se puede evitar la desesperación de esa desconexión emocional y mantener la unión y el romanticismo en Navidades? Para que la relación siga viva es imprescindible una dosis diaria de lo que yo llamo las tres A: atención, aprecio y afecto. Y no lleva ni mucho tiempo ni energía. Consiste en elegir aquello en lo que quieres centrar tu atención: en el amor o en el estrés. Si te centras en el amor, el cariño y las cosas por las que estás agradecido, las Navidades y vuestra relación irán mucho mejor. La conexión amorosa prospera en un clima de aceptación, reconocimiento y agradecimiento. Así que aseguraos de abrazaros cada día, de decir 'te quiero' y 'gracias' por las cosas pequeñas y las grandes que hacéis el uno por el otro". ― Meyers
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' EEUU y ha sido traducido del inglés por Marina Velasco Serrano