Siete datos curiosos para conocer mejor la historia de LEGO
El inconfundible ladrillo cumple 60 años.
En 1932 el carpintero danés Ole Kirk Kristiansen comenzó a fabricar juguetes de madera. Dos años más tarde fundaba LEGO, la compañía de juguetes a la que más tarde se sumó su hijo Godtfred. Tiempo después, tras muchas ideas, innovaciones y perseverancia, LEGO patentó su inconfundible ladrillo. Fue en 1958, hace 60 años. Su sistema de acoplamiento, el que conocemos hoy en día, abrió paso a un mundo infinito de posibilidades de construcción que ha conquistado tanto a niños como a mayores.
Para celebrar años de construcciones, parques temáticos y miles de figuras, hemos recopilado siete curiosidades sobre el ladrillo de LEGO y la compañía danesa.
Ole Kirk Kristiansen nombró a su compañía juntando dos palabras danesas: Leg y Godt, que significan "juega bien". Su sorpresa llegó cuando descubrió que "lego" en latín significa "construyo", una bonita paradoja que Kristiansen se planteó modificar pero que finalmente mantuvo.
El precursor de los ladrillos que utilizamos hoy en día, comenzó a comercializarse en 1949 con el nombre de "ladrillos de unión de automática". Cuatro años más tarde pasaron a llamarse LEGO Mursten, para que el nombre de la marca estuviera en cada pieza.
Godtfred Kirk Kristiansen, el hijo del fundador, lanzó en 1950 el LEGO System in Play, un sistema que se basaba en el producto: más ladrillos, más construcciones. Desde LEGO insisten en que la idea era "crear un juguete que preparase al niño para la vida, que apelase a su imaginación y desarrollase el impulso creativo y la alegría de creer que son los factores de motivación de todo ser humano".
Desde que en 1946 se encargase la primera máquina de moldeo por inyección de plástico, LEGO compaginaba piezas de este material con otras de madera. Esto terminó en 1960, cuando un incendio destruyó por completo el almacén de juguetes de madera y se suspendió la producción.
Para reforzar su imagen y valores Godtfred Kirk publicó en 1963 una especie de decálogo en el que se enunciaban las diez características de LEGO. Desde el valor de la creatividad y la seguridad hasta la observación de que tanto niños como niñas podían disfrutar con él, un punto no habitual en aquella época. Un año después comenzaron a imprimirse las primeras instrucciones de construcción de LEGO.
A día de hoy hay ocho parques temáticos LEGOLAND con reproducciones de edificios emblemáticos, figuras de personajes ilustres y atracciones esparcidos por el mundo. El primero se abrió en 1968 en Billdun, la ciudad danesa en la que nació la marca. Después llegaron otros en Reino Unido, California o Japón, y está prevista la apertura de otros tres en Corea del Sur, Shanghai y Nueva York.
Además, en 2017 se inauguró la Casa LEGO en Billdun. El edificio de 12.000 metros cuadrados se fabricó con 25 de millones de los míticos ladrillos de la marca.
En 1978 se lanzan al mercado las primeras minifiguras de LEGO, caracterizadas por su color amarillo. Piratas, astronautas, vaqueros y hasta los personajes de Harry Potter se han transformado en este mítico muñeco que nació para fomentar los juegos de rol.
En sus inicios las figuras solo podían ser amarillas, y hasta 1989 no tenían expresiones faciales. Fue la colección de los piratas que se lanzó ese año la pionera. En 2004 las minifiguras sin licencia comenzaron a abandonar el amarillo y algunas, como las de Harry Potter, optaron por un color más natural.