Siete consejos para videollamadas que debería conocer Isabel Díaz Ayuso
El WiFi de la Asamblea de Madrid le falla a la presidenta de la Comunidad de Madrid y acaba congelada en una videoconferencia. No es la primera vez sufre problemas así.
No es que se le pida a Isabel Díaz Ayuso que se salte el confinamiento y asista a las reuniones de manera presencial, aunque Pedro Sánchez ya le lanzó un órdago el pasado domingo: “La próxima Conferencia de Presidentes te vienes a Moncloa”. La presidenta de la Comunidad de Madrid sufre de recurrentes problemas con las videollamadas. Cuando no es el audio, es la imagen, que se queda congelada, ya sea en reuniones laborales o en entrevistas en televisión.
De hecho, este jueves en el pleno de la Asamblea de Madrid la conexión le ha vuelto a fallar varias veces, por lo que algunos diputados ya han pedido que las sesiones se celebren de manera presencial.
Díaz Ayuso podría ir hasta la Asamblea de Madrid para los plenos. Puede desplazarse libremente como cualquier otra autoridad, más aún después de recibir el alta el 10 de abril tras 26 días de aislamiento por dar positivo en coronavirus. Sin embargo, para que no esté obligada a hacerlo y pueda seguir confinada, hemos consultado a expertos en conexión de redes para saber cuáles son los trucos imprescindibles para que una videoconferencia sea redonda, sin fallos. Para que no vuelva a ocurrir, presidenta.
1. La mejor conexión es la de fibra óptica. Tengas fibra o ADSL, puedes conectar el portátil o el ordenador de mesa al router mediante un cable de red. En el caso de que te conectes con el móvil a través de datos y superes los megas contratados... mala suerte.
2. Comprueba que no haya mucha gente conectada a la misma señal: si varias personas viven en la misma casa, que no esté uno viendo Netflix, otro Spotify, y un tercero jugando en línea al mismo tiempo que estás en la videollamada. (Con más razón si tu línea es ADSL).
3. Si usas portátil y tienes que estar conectado por Wifi, hazlo a un canal al que no estén conectados los vecinos. La aplicación móvil Wifi Analyzer te puede indicar cuál es el menos saturado.
4. Evita trabajar en un espacio que esté separado del router por un baño —no es lo mismo una pared normal de pintura y ladrillo que una cubierta por más aislantes— o una cocina. Los equipos electrónicos como frigoríficos o microondas tampoco ayudan a que fluya el WiFi. Cuantos más obstáculos, más interferencias.
5. Cierra todas las puertas de casa, a excepción de la del cuarto en el que esté el router y la del espacio en el que estés trabajando con el ordenador, la tablet o el móvil. Cuanto más cerca del aparato, mejor. Para que no reboten las ondas lo recomendable es evitar tabiques.
6. Utiliza el router más profesional: los que llevan mucha más antena. A mayor antena, mayor señal.
7. Recurre a un repetidor. Si desde el router no llega bien la señal al lugar en el que la necesites, el repetidor se encargará de darte la conexión que te falta. Hay varios tipos, como el extensor de cobertura Wifi o el de doble banda.
Dentro de los primeros, existen los amplificadores de una sola pieza, que captan la señal que va a través del Wifi y reproduce una especie de eco, es decir, emite una segunda onda. Hay piezas más económicas, pero si consigue una mala calidad de señal a través del Wifi lo que repetirá será otra mala señal.
En este mismo grupo están los amplificadores de señal a través de la red eléctrica. Son dos o más aparatos (el emisor conectado al router con cable y el receptor se conecta a un enchufe. Que ambos tengan que estar conectados a la misma red eléctrica no suele ser nunca un problema.
Todo es cuestión de cobertura.