Si pierdes más pelo últimamente, este puede ser el motivo
Desde una perspectiva evolutiva, una de las funciones del pelo ha sido dar calor, algo que no es tan necesario en los meses de verano.
Escrito por Amanda MacMillan
Si te has quedado últimamente mirando el peine o el desagüe de la ducha preocupado porque se te está cayendo mucho el pelo, quizás no tengas de qué preocuparte. Un nuevo estudio del British Journal of Dermatology indica que perder más pelo en verano y otoño es completamente normal.
Ya se sospechaba desde hacía tiempo de la posibilidad de que la pérdida de cabello siguiera un patrón estacional. Se había detectado de forma anecdótica y se había observado en pequeños estudios previos, pero dichos análisis solo se centraban en un sector demográfico o geográfico concreto, de modo que los resultados no podían extrapolarse a todo el mundo.
Ahora, los investigadores de la Universidad Johns Hopkins y la Universidad de Washington han enmendado esa carencia compilando las estadísticas de Google Trends (tendencias de búsqueda de Google) de ocho países repartidos en ambos hemisferios, con los términos "hair loss" (caída del cabello). Analizaron los registros desde 2004 hasta 2016 y compararon los datos mes a mes y estación a estación.
A lo largo y ancho de los ocho países, los resultados eran los mismos: la gente buscaba más información en Internet relativa a la pérdida capilar en verano y en otoño en comparación con el volumen de búsquedas de invierno y primavera. Según los autores del estudio, este hallazgo es importante para los médicos que reciben muchos pacientes en esas dos estaciones con dicho síntoma y que, además, les servirá a la hora de valorar la efectividad de determinados tratamientos. Sin embargo, es necesario profundizar para determinar la causa de esta caída estacional y hasta qué punto deberían preocuparse quienes la sufren.
"Es normal que se produzca un aumento moderado de la caída de pelo en verano y otoño. Esto ya entra en el plano de la especulación, pero desde una perspectiva evolutiva, una de las funciones del pelo ha sido dar calor, algo que no es tan necesario en los meses de verano", sugiere el doctor Shawn Kwatra, profesor asistente de Dermatología en la Escuela de Medicina de la Universidad John Hopkins y coautor del estudio.
La tendencia a desarrollar un pelaje más grueso en invierno y mudar el pelo en verano ya se ha documentado en diversos animales, como los monos, gatos, perros y camellos. En los seres humanos, la caída de pelo estacional se ha registrado con más frecuencia entre mujeres que entre hombres, según indica el doctor Kwatra, si bien su estudio basado en búsquedas de Google no tenía forma de distinguir entre ambos sexos.
De acuerdo con la Academia Americana de Dermatología, es normal perder entre 50 y 100 pelos al día, por lo que encontrarte unos cuantos cabellos en la ducha al acabar no tiene por qué ser preocupante, sobre todo si es un mes cálido.
Si, pese a todo esto, esos pelos perdidos te preocupan lo suficiente como para recurrir al doctor Google, probablemente lo que te convenga sea una visita real a un médico especializado. En Estados Unidos, el 40% de las personas sufren más pérdida de cabello de la que desearían, y tanto hombres como mujeres notarán que se intensifica al hacerse mayores.
Además del factor estacional, la pérdida de cabello puede estar provocada por sucesos muy estresantes (el nacimiento de un bebé, fiebre alta), por pérdidas de peso de más de 9 kilos o por una alteración a la hora de tomar la píldora anticonceptiva. Otros factores que afectan son la dieta, la genética o los niveles tiroideos.
Por suerte, la pérdida de pelo no tiene por qué ser definitiva, ya que el médico te puede recomendar remedios, como suplementos alimenticios o tratamientos tópicos que pueden frenar el proceso.
Pero, según advierte el doctor Kwatra, ir al médico no solo es importante por el pelo, sino porque una caída excesiva de cabello puede ser señal de un problema médico subyacente mayor que conviene revisar lo antes posible.
Este post fue publicado originalmente en Health.com, apareció posteriormente en el 'HuffPost' y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.