Los bulos tras la sentencia del 'procés'
De las penas de Tejero al colapso de Barajas.
El aeropuerto de Barajas colapsado por independentistas, Oriol Junqueras condenado a una pena superior que la de Tejero, manifestantes repartiendo billetes de avión en El Prat...
Como en otras fechas marcadas por la movilización independentista, la tensión vivida en las calles de Cataluña tras conocerse la sentencia del “procés” ha abonado el terreno a la desinformación en las redes sociales.
Algunas de las falsedades surgidas tras la publicación del fallo del Tribunal Supremo, que impone penas de prisión de 9 a 13 años para los líderes del proceso soberanista por un delito de sedición, son las siguientes:
Tejero fue condenado a menos años que Junqueras
No es cierto que, como afirman algunos mensajes en Twitter, el exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras, condenado a 13 años, vaya a pasar más tiempo en prisión que el coronel golpista. “Tejero fue condenado a 10 años por un golpe de Estado, armado y abriendo fuego real en el Congreso de los Diputados!”, se lee en uno de esos tuits.
En realidad, Antonio Tejero fue condenado a 30 años por un delito de rebelión militar en el 23-F. En febrero de 1993, algo menos de 10 años después de que el Tribunal Supremo dictara la sentencia, se le aplicó el régimen abierto, que le permitía acudir a la prisión de Alcalá solo para dormir y también disfrutar de fines de semana fuera de la cárcel y permisos por un máximo de siete días seguidos. Finalmente, obtuvo la libertad condicional el 3 de diciembre de 1996, más de 13 años después del fallo, dictado el 13 de abril de 1983.
Entregan billetes de avión a los manifestantes
Poco después de que el Supremo hiciera pública la sentencia, a primera hora de la mañana del lunes, activistas de la plataforma soberanista Tsunami Democràtic llamaron para bloquear El Prat a través de las redes. Pensaban conseguirlo repartiendo billetes de avión que permitieran a los manifestantes acceder a la zona de embarque del aeropuerto barcelonés, pero estas tarjetas eran falsas.
A través de un canal de Telegram, este autodenominado movimiento de “coordinación de acciones pacíficas de desobediencia civil” distribuyó decenas de tarjetas de embarque de apariencia real, pero con un número de serie falso que se replica en todos los documentos y un código QR que, al ser escaneado, conduce a una página de Wikipedia dedicada a Christopher Columbus Kraft, Jr., un ingeniero de la NASA.
Esta forma de protesta ha sido inspirada por los manifestantes de Hong Kong, que el pasado verano trataron de cortar el acceso a los aeropuertos con tarjetas de embarque de imitación con destino a “la libertad”.
Más de mil coches en Barajas
Twitter se llenó el lunes por la tarde de mensajes de apoyo a Tsunami Democràtic en los que se aseguraba que 1.200 coches colapsaban la terminal 1 del aeropuerto madrileño de Barajas en señal de repulsa por la sentencia. Sin embargo, nunca llegó a producirse ese colapso automovilístico premeditado y tampoco hubo incidencias en las inmediaciones del aeródromo madrileño, confirmaron distintas fuentes oficiales a lo largo de la tarde.
Tanto AENA como el Ministerio del Interior subrayaron que los accesos al aeropuerto de Madrid no registraban incidencias más allá del tráfico lento habitual debido a la lluvia.
Por su parte, la Guardia Civil difundía una imagen del tráfico en la entrada al aeropuerto que utilizan los vehículos procedentes de la A-2 tomada a las 19:20 horas, con el siguiente texto: “En los accesos al aeropuerto de Barajas se circula con total normalidad (para un día de lluvia en Madrid). No hay ningún colapso circulatorio”.
Los ‘Jordis’ tendrán el tercer grado en diciembre
El exlíder de la ANC Jordi Sànchez y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, podrían comenzar a disfrutar de permisos penitenciarios en diciembre, pero no necesariamente habrán accedido al tercer grado, como afirman algunos mensajes difundidos en redes como Twitter.
Los Jordis han sido condenados a nueve años de prisión y en diciembre ya habrán cumplido un cuarto de su pena, lo que les permitirá solicitar permisos de salida, como cualquier preso que se encuentre en segundo o en tercer grado. No en vano, tanto los Jordis como el resto de condenados por el “procés” podrán ser clasificados directamente en tercer grado si así lo decide la administración penitenciaria catalana, que tiene un plazo máximo de dos meses desde que reciba la sentencia para determinar en qué cárcel y régimen penitenciario cumplen su pena.
Los permisos para los penados en segundo grado son 36 días al año y deben ser validados por el juez de vigilancia penitenciaria. Los del tercer grado son 48 días y los concede la administración penitenciaria.
