Se suicida Javier Biosca, acusado de la mayor estafa de criptomonedas en España
El fiador del empresario, Juan Antonio Zuloaga Bilbao, en paradero desconocido tras no acudir a declarar a un juzgado de Madrid
Javier Biosca, acusado de la mayor estafa de criptomonedas investigada por la Audiencia Nacional, ha fallecido este martes a los 50 años en la localidad malagueña de Estepona, donde se ha suicidado.
Biosca se ha precipitado sobre las 11:15 horas desde el balcón del hotel Ona Valle Romano del citado municipio, en la calle Flaminio, ante la presencia de varios testigos, según las fuentes consultadas.
El fallecido estuvo en prisión provisional desde junio de 2021 hasta finales de marzo de este año, estaba siendo investigado como principal responsable del fraude cometido por Algorithms Group, compañía a la que las acusaciones particulares reclaman 818,5 millones de euros.
Los delitos que se imputaban a Biosca, además de a su mujer y su hijo, son estafa, intrusismo, blanqueo, delitos societarios, apropiación indebida y asociación ilícita, todo tras presuntamente captar clientes con la promesa de rentabilidades del 20% o del 25% semanal.
De acuerdo con las acusaciones, a partir de los primeros meses de 2020, éste comenzó a dejar de pagar a la mayor parte de los inversores, algunos de los cuales son, a su vez, plataformas de inversión en bitcoins que invertían en la empresa atraídos por los altísimos intereses.
El fiador, en paradero desconocido
El fiador de Javier Biosca, que debía comparecer el 16 de noviembre en el juzgado de instrucción nº 35 de Madrid tras una denuncia presentada por la Asociación de Afectados por Inversiones con Criptomonedas, se encuentra en paradero desconocido.
La asociación, a la que representa Zaballos Abogados, presentó una denuncia contra el fiador de Biosca, Juan Antonio Zuloaga Bilbao, y contra el arquitecto Antonio Ochoa Giménez, por presuntos delitos de falsedad en procedimiento judicial y obstrucción a la Justicia.
Ambos presentaron, para hacer frente a la fianza de un millón de euros impuesta por el juez de la Audiencia Nacional que investiga la presunta estafa, un inmueble lleno de deudas -un palacete en ruinas en Llanes (Asturias)- con un valor inflado artificialmente.