Sarcoma de Ewing: causas y síntomas de la enfermedad que no pudo superar Elena Huelva
La joven influencer ha fallecido este miércoles tras más de tres años de una batalla que visibilizó un tipo raro de cáncer.
Apenas transcurridos tres días del año, una de las personalidades más queridas, la conocida influencer Elena Huelva, ha fallecido este miércoles, con apenas 20 años y después de dar un ejemplo de vida y lucha.
La joven sevillana ha muerto víctima de una enfermedad catalogada como rara, el Sarcoma de Ewing y por cuyo conocimiento ha hecho mucho. A través de numerosos stories, mensajes y publicaciones en sus redes, Elena Huelva no solo se ganó el cariño de millones de seguidores, sino que mostró la realidad de una enfermedad desconocida para una gran mayoría.
Según un reportaje de El País, cada año unos 50 niños en España son diagnosticados con esta afección, que se trata de un tipo raro de cáncer surgido en los huesos o en el tejido blando alrededor de ellos y que, aunque suele iniciarse alrededor de los huesos de la pierna y la pelvis, puede hacerlo en cualquier punto.
Como apuntan desde la Clínica Mayo de EEUU, los elementos más comunes de una enfermedad cuyo origen no se conoce con certeza y cuya tasa de superviviencia está en el 70% en niños y en alrededor del 56% en adolescentes, según el Instituto de Investigación del Hospital Infantil Saint Jude (Memphis, EEUU).
Entre los síntomas habituales están el dolor, la hinchazón y la sensibilidad cerca del área afectada, así como dolor generalizado de huesos, cansancio sin una causa aparente, fiebre sin origen conocido y pérdida involuntaria de peso.
Su origen no está aún claro, pero sí se ha descubierto que este tipo de cáncer cominza cuando una célula desarrolla cambios en su ADN y afectan, en la mayoría de los casos, a un gen llamado EWSR1.
En cambio, sí están algo más analizados los posibles factores de riesgo, entre ellos la edad, porque afecta más a niños y adolescentes; la ascendencia, con especial afectación en población europea por encima de otros orígenes o el sexo, con algo más de incidencia en hombres que en mujeres.
De cara a su tratamiento es clave iniciarlo cuanto antes, para evitar la metástasis por todo el cuerpo. El Hospital Saint Jude cita tres vías habituales para tratar esta enfermedad rara: la quimioterapia, habitualmente el primer paso y el más agresivo; la cirugía, que recomiendan tiempo después de las sesiones de quimioterapia, y una tercera vía en último recurso, la radioterapia, para matar o disminuir las células cancerosas que no pueden extraerse quirúrgicamente