Esta es la estrategia de Illa para ganar las elecciones
A pesar del “todos contra Illa”, la campaña socialista busca el tono positivo y no entrar en el cuerpo a cuerpo.
En apenas tres días ha quedado confirmado que las elecciones en Cataluña van de un “todos contra Illa”. Este es el diagnóstico que hacen en la sede del PSC en Barcelona. Pero la consigna tras estos primeros días es la misma: “el tono de la campaña no va a variar” y será “tranquilo, de buen talante sin entrar en el cuerpo con nadie, como quieren los ciudadanos”.
En definitiva, “una campaña como su candidato”, explican fuentes del equipo de Salvador Illa. El socialista catalán ya está al 101% sumergido en en esta nueva misión, como prometió antes de dejar el Ministerio de Sanidad, y sale, a pesar de ese aspecto a veces grisáceo, a por todas y convencido de que puede ganar y ser el próximo presidente de la Generalitat.
“Fem-ho” (“Hagásmolo”), este es el lema de una campaña diseñada con máxima precisión por el PSC, en constante coordinación con la calle Ferraz de Madrid, para llevar a Illa a la plaza de Sant Jaume el próximo 14 de febrero. Tras años de travesía en el desierto, los socialistas creen que ahora las condiciones de una sociedad cansada del procés y de la pandemia pueden llevar a que su mensaje cale en un amplio espectro de la sociedad, aunque en las encuestas resiste el independentismo.
Es una campaña extraña, con mascarillas, con geles hidroalcohólicos, con mítines de salón, pero el PSC lo va a dar todo. Y no sólo los socialista catalanes, todo el PSOE, empezando por el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ya acompañó a Illa en el arranque del jueves y que va a estar en total hasta en cinco ocasiones en actos en Cataluña.
La campaña diseñada combina tres caravanas: una liderada por el propio Illa, otra para los actos de Sánchez y una tercera en la que estarán todos los cargos orgánicos e institucionales. La implicación de todo el partido se vio también en el arranque con la presencia de la vicepresidenta, Carmen Calvo, en otro acto en Tarragona y con el ‘cerebro’ en la oscuridad de Ferraz, Santos Cerdán, también entre el escaso público en Barcelona.
Los socialistas creen que ese “todos contra Illa” puede incluso beneficiarles durante estas dos semanas: “Eso centra al candidato y levanta la atención”, resumen fuentes del PSC. Además, entienden que puede dividirse aún más el voto independentista con la aparición de nuevos partidos como e PDeCAT y el PNC, en esa lucha entre ERC y Junts.
Los socialistas mantiene su idea de hacer una campaña a lo Illa: propositiva, sin insultos a los rivales, explicando el programa, con talante. Con varias ideas clave, como resaltan desde el PSC, de que es la “oportunidad” de poner fin a diez años “desastrosos en Cataluña, que han dividido y empobrecido al país”. “Pasar página a una Cataluña del reencuentro que no deje escapar las oportunidades económicas y de proyectos”, ahondan en el entorno de Illa. “Que Cataluña vuelva a ser lo que era”, lanzan.
Esa lucha será apasionante hasta el último momento, con las encuesta vaticinando resultados muy ajustados. En la publicada por el Centro de Investigaciones Sociológicas, Salvador Illa se haría con la victoria, con una Esquerra pisando los talones. En cambio, en el CEO de la Generalitat, la fotografía salients es la de que ERC vencería por delante de Junts y del PSC.
Una de las principales misiones que tiene Illa, y no lo ocultan en el PSC, es ir directamente a por los votantes que en las últimas elecciones apoyaron a Inés Arrimadas (Cs), muchos de ellos anteriormente habían metido papeleta socialista. Uno de los puntos “fuertes”, agregan las fuentes, es la idea que va a trasladar el candidato: “Si gano, presentaré mi candidatura”. Los socialistas catalanes recuerdan que el “intenso” apoyo que tuvieron los naranjas tras el 155 luego se malogró y se tiró a la basura ese capital político con la decisión de no intentar una investidura aunque no dieran los números. Por lo tanto, se subrayará que el cambio sí es posible ahora si es el más votado.
Ese 101% del candidato se plasmará en actos, en explicaciones constantes del programa, en participación en todos los debates posibles, en entrevistas y en mucha presencia en las redes sociales durante estas dos semanas. Con ideas marco como que es el candidato del reencuentro y de las soluciones.
Por ello va a desplegar un discurso en el que tendrá mucha importancia que esa solución no vendrá de una parte o de la otra y que la unión hace más fuerte a Cataluña. Todo ello en un momento de pandemia, con lo que venderá su parte de gestión. Explotando ese aura que tenía en Sanidad de que no va a perder ni un minuto en recriminaciones a los adversarios.
En esa oferta a los catalanes que va a plantear Illa incide en valores básicos de la socialdemocracia, como la necesidad de una Sanidad y una Educación públicas (algo que tiene previsto repetir en todas sus apariciones). Justicia social y equidad, pilares de su candidatura. Pero todo ello combinado con una economía en la que Cataluña vuelva a ser un referente para el resto de regiones de España. Una de las obsesiones del PSC es que se mire otra vez a Barcelona en el resto del país con admiración y como ejemplo, que vuelva ese seny.
Por ello, Illa ha decidido ya hacer público el nombre del que sería su vicepresidente económico: Maurici Lucena. Un hombre con buena reputación en la gestión, que actualmente está al frente de Aena y que ha pasado tanto por el ámbito público como por el privado (estuvo en el Banco Sabadell). Gestos también para encontrar apoyos incluso en antiguos votantes nacionalistas, que no quieren el “radicalismo”, como dicen en el PSC, del frustrado intento de la independencia. Dejar atrás las falsas quimeras y centrarse en lo importante, será otra de la frases que más repetirá el candidato.
El equipo de Illa ha encargado también un millón de octavillas para repartir a lo largo y ancho de Cataluña y se está promocionando el voto por correo ante la situación epidemiológica en plena tercera ola. El mensaje: votar es seguro.
Los socialistas han estudiado al dedillo todos los datos de las encuestas para identificar los grupos en los que son fuertes y en los que todavía pueden crecer y arañar votos. Sus plazas fuertes son las provincias de Barcelona y Tarragona, a tenor de las proyecciones del CIS, donde aspiran a ser la fuerza más votada, con un porcentaje superior al 20 por ciento, en tanto que les cuesta más en Girona y Lleida.
Y creen que en estos días se puede explorar todavía más la figura de Illa, que es el único aspirante que aprueba, también en virtud el CIS. Además, encabeza el listado cuando se pregunta a los catalanes que quién le gustaría que fuera el próximo de la Generalitat. Sus mejores porcentajes de aceptación están entre los más mayores, mientras que Pere Aragonès (ERC) le gana entre los menores de 24 años. Es además el más valorado por las mujeres (y en este grupo hasta casi un 28% todavía no ha decidido su voto). Un dato que se tiene mucho en cuenta: los votantes de Cs y de En Comú Podem, recoge el barómetro, lo prefieren a él como presidente antes que incluso a los ‘número uno’ de sus partidos.
Salvador Illa, al 101%. ¿Le servirá para ganar?