El exministro de Industria Miguel Sebastián ha contado este sábado en su cuenta de Twitter que ha dado positivo por coronavirus y que ha tenido que ir a Urgencias por el nivel tan bajo de saturación que tenía: 90%.
“Al final he caído”, ha dicho el exministro y colaborador de distintos programas de LaSexta como Al Rojo Vivo y LaSexta Noche.
“Fiebre y nivel de saturación bajo”, explica en su tuit Sebastián, quien ha asegurado que ha sido “muy difícil resistir la presión social de las comidas y contra las mascarillas en reuniones”.
“Alguno se alegrará, pues es lo que pretenden, que nos contagiemos todos”, ha agregado.
Al final he caído…. Fiebre y nivel de saturación bajo. Muy difícil resistir la presión social de las comidas y contra las mascarillas en reuniones. Alguno se alegrará, pues es lo que pretenden. Que nos contagiemos todos….. pic.twitter.com/4u8C6ePzSP
Un mensaje que ha generado mucho revuelo, no sólo por la preocupación que ha generado entre muchos ver la saturación de Sebastián, que ha explicado en otros mensajes que se encontraba en Urgencias; sino por las dos últimas frases, que muchos han criticado.
Un poco hasta los huevos de los que se contagian por culpa de los demás que le incitan a ello. https://t.co/Z4xwfsEcqk
Decide que el coste de oportunidad de quedar bien ante sus colegas (porque según él querría llevarla pero no lo hace por su entorno) merece poder enfermar. Luego se contagia y la culpa es de… ¡los demás! 🔅 https://t.co/NZcDl6VYBN
Se contagia del COVID y se las arregla para convertirlo en un reproche hacia los demás. Son insuperables. Juegan a un nivel de arrogancia y cretinismo que escapa de nuestro entendimiento. https://t.co/TvUdA7i5Ba
Presión social? Mi hijo es el único en su clase en la universidad que lleva mascarilla. Yo misma sigo usando mascarilla en sitios de interior. Personalidad se llama. https://t.co/AQPqjttWUF
Pues no vayas. Así de fácil, es tu decisión y las consecuencias tu responsabilidad. https://t.co/buNUHYpvzo
— Doctorando Extraño. En el multiverso laboral. (@StrangeLetrado) June 12, 2022
La presión social los cojones. No pedías encerrarse en casa para siempre? Pues irresponsable, asesino, mataancianos y todo lo que le has gritado a los jóvenes.
¿Se contagian otros? Irresponsables. ¿Me contagio yo? La presión social. De verdad que es difícil ser más impresentable. 😂😂😂 https://t.co/kFEO89I98J
— Jaime (A)Abeja 渓 蜂 🕊🇪🇺🇪🇸🇵🇹🇨🇿 (@JacobusApis) June 11, 2022
Miren que él les advirtió, se lo dijo, se lo explicó... Pero nada, no han parado ustedes hasta que han contagiado a Miguel & Sebastian. ¡ESTARÁN CONTENTOS! https://t.co/aMexmkapkj
En respuesta a uno de los mensajes, Sebastián asegura no haber dejado de usar la mascarilla “salvo contadas ocasiones”. “Pasear por el parque y algunas reuniones en las que pedían que todos se quitaran la mascarilla para las fotos”.
Yo no he dejado la mascarilla salvo contadas ocasiones. Pasear por el parque y algunas reuniones en las que pedían que todos se quitaran mascarilla para fotos
Una persona duerme en una cama a unos pocos pasos de un cadáver, envuelto en bolsas protectoras y tendido en el piso de un centro de mayores, en Barcelona, el 19 de noviembre de 2020.
Con trajes de protección para evitar infecciones, dos trabajadores de una funeraria preparan el cuerpo de un anciano fallecido por COVID-19 antes de retirarlo de un centro de mayores, en Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
El cuerpo de una persona muerta por Covid, cubierta en su cama de un asilo de Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
Con trajes de protección para evitar contagios, empleados funerarios sacan el cuerpo de una persona mayor fallecida a causa del coronavirus tras retirarlo de una residencia de ancianos, en Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
Dos empleados de una funeraria retiran el cuerpo de una víctima de COVID-19 de una residencia de ancianos, en Barcelona, el 19 de noviembre de 2020.
Empleados de una funeraria trasladan el cuerpo de un anciano fallecido por coronavirus en una camilla tras retirarlo de una residencia de mayores, en Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
Marina Gómez, empleada de una funeraria, maneja el cadávez de una víctima del coronavirus en la morgue de su empresa, Mémora, en Barcelona, el 16 de noviembre de 2020.
Una empleada de funeraria, tratando un cuerpo, el 17 de noviembre de 2020 en Barcelona.
Un trabajador de una funeraria prepara un féretro de una víctima del COVID-19 antes de su incineración, en un tanatorio de la empresa Mémora, en Girona, el 19 de noviembre de 2020.
Un empleado del crematorio recoge las cenizas de un fallecido por covid en el tatatorio de Mémora, Girona.
Familiares de un fallecido por Covid. en el tanatorio Mémora de Girona, el 29 de noviembre de 2020.
Familiares de un fallecido por Covid. en el tanatorio Mémora de Girona, el 29 de noviembre de 2020.
112
El cuerpo de un anciano víctima del coronavirus, descansa tapado con una sábana sobre una cama en un centro de mayores en Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
Una persona duerme en una cama a unos pocos pasos de un cadáver, envuelto en bolsas protectoras y tendido en el piso de un centro de mayores, en Barcelona, el 19 de noviembre de 2020.
Con trajes de protección para evitar infecciones, dos trabajadores de una funeraria preparan el cuerpo de un anciano fallecido por COVID-19 antes de retirarlo de un centro de mayores, en Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
Con trajes de protección para evitar contagios, empleados funerarios sacan el cuerpo de una persona mayor fallecida a causa del coronavirus tras retirarlo de una residencia de ancianos, en Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
Empleados de una funeraria trasladan el cuerpo de un anciano fallecido por coronavirus en una camilla tras retirarlo de una residencia de mayores, en Barcelona, el 13 de noviembre de 2020.
Marina Gómez, empleada de una funeraria, maneja el cadávez de una víctima del coronavirus en la morgue de su empresa, Mémora, en Barcelona, el 16 de noviembre de 2020.
Un trabajador de una funeraria prepara un féretro de una víctima del COVID-19 antes de su incineración, en un tanatorio de la empresa Mémora, en Girona, el 19 de noviembre de 2020.