Gobierno y agentes sociales vuelven a la mesa laboral con los ERTE en el punto de mira
El Ejecutivo lleva una propuesta para ampliar los tipos de esta figura a su reunión semanal con patronal y sindicatos.
Una semana después de la reanudación de las reuniones para negociar los cambios en la reforma laboral, el Gobierno se reúne este miércoles de nuevo con los agentes sociales. Si en el anterior encuentro la temporalidad fue uno de los pilares del debate, en esta ocasión las partes abordarán otro punto clave en el actual contexto económico tras la pandemia: los ERTE.
En este sentido, la Cadena SER dio a conocer el martes que el Ejecutivo llevará a la mesa una propuesta para ampliar la tipología de esta herramienta. De esta forma, el plan sería ampliar los de fuerza a mayor con dos nuevas clases, los de reestructuración para facilitar la movilidad del trabajador de un sector a otro, así como los sectoriales, destinados a la reconversión por sectores.
La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha vuelto a hacer una llamada a la “discreción” y destacado que la negociación requiere de “silencio” y “apagar los focos” para alcanzar un acuerdo. “La propuesta de los ERTE que se está haciendo, lo que hace es un compendio de una herramienta muy eficaz durante esta crisis y que ha venido para quedarse”, ha apuntado la también ministra de Trabajo.
Una propuesta que podría variar sustancialmente
Las nuevas tipologías que serán llevadas a las negociaciones con patronal y sindicatos forman parte de un borrador que no está cerrado y que podría verse sujeto a cambios según las exigencias de las partes y de los representantes del Gobierno en la mesa, es decir, el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, el Ministerio de Trabajo y Economía Social y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Precisamente, el documento de 27 páginas parte del departamento que dirige el ministro José Luis Escrivá, negociado previamente con las otras partes del Gobierno. Entre las principales claves con los que aterriza la propuesta se encuentra la necesidad de que los nuevos ERTE cuenten con tiempos tasados, informa la SER.
La flexibilidad, prioritaria para la CEOE
Por otra parte, si la negociación anterior fue tildada por fuentes del diálogo social tanto de “bronca” como “constructiva”, esta también se prevé intensa. La posición de la patronal será esencial para llegar a un acuerdo de consenso y, en este sentido, los ERTE conforman una de las patas que han sido esenciales para minimizar el impacto económico de la pandemia en el empleo.
En el anterior encuentro, y a la hora de valorar los últimos datos del paro, la patronal destacó que si los ERTE han sido útiles para preservar el trabajo durante la pandemia es porque se han “inspirado” en la apuesta por la flexibilidad interna que había caracterizado a la anterior reforma laboral del 2012. Por este motivo, la postura de organizaciones como CEOE sobre las modificaciones que puedan producirse en los ERTE estará condicionada por dicho factor.
Los sindicatos quieren limitar el despido
También quedará saber cómo cuaja la nueva propuesta en el seno de los sindicatos, puesto que una de las banderas que se han hecho desde CCOO es la petición de introducir limitaciones al despido.
De esta forma, si los ERTE suponen un instrumento clave para evitar que las personas acogidas a ellos no acaben perdiendo su empleo, será esencial la posición de los sindicatos en esta materia. Así, la exigencia de restringir los despidos choca frontalmente con el interés de la patronal por la flexibilidad.