Quién es y qué ha hecho antes Estela de Castro, la autora de las fotos oficiales de los reyes y sus hijas

Los reyes Felipe VI y Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, han estrenado fotos oficiales. Este martes el Palacio de la Zarzuela ha presentado las nuevas diez instantáneas de la familia real, con fotos de cada miembro por separado, una de la familia al completo, otra de las dos niñas y dos de la pareja. La autora de todas ellas es la retratista Estela de Castro (Madrid, 1978).

Ésta es la primera vez que la fotógrafa trabaja para la Casa Real, aunque su experiencia es amplia. Más de 25 años la avalan. Se formó en la Escuela de fotografía Look de Madrid, trabajó como asistente de fotógrafos en Ciclorama Estudios Madrid y realizó talleres de formación con Javier Vallhonrat, Rafael Navarro, Eduardo Momeñe, Valentín Vallhonrat y Óscar Molina. Además ha participado en 11 exposiciones colectivas y en 17 individuales, la primera en 2005.

Fue precisamente una de estas muestras la que la llevó hasta los Reyes. “Ocurrió hace unos meses. Al parecer, en Zarzuela conocían mi trabajo a través del proyecto Fotógrafos, que estuvo en Photoespaña”, cuenta en una entrevista con ¡Hola!. “Me llamaron y me dijeron que les gustaba el estilo, la forma de utilizar la luz, cómo eran los personajes de mis retratos, la cercanía y naturalidad... eso les gustó”, continúa la artista, a la que le pidieron “un tipo de retrato cercano, en el que transmitiera cercanía”.

Fotógrafos es un proyecto vivo que arrancó en 2011 y que la artista ha expuesto en varias ocasiones. A Photoespaña llegó en 2014, aunque la última vez que se vio fue en 2018 en el Festival Granada Eclipsa.

Este trabajo, del que ha compartido parte en su Instagram (con algo más de 5.700 seguidores), tiene la vocación de “convertirse en un archivo exhaustivo de nuestros creadores, y que incluye fotógrafos pertenecientes a distintas generaciones y con diferentes planteamientos estéticos y conceptuales”.

Entre los fotógrafos inmortalizados están Ramón Masats, Rafael Sanz Lobato, Joan Colom, Alberto García-Alix, Cristina García Rodero y Carlos Pérez Siquier.

De Castro ha trabajado (casi) en total libertad con la Casa Real. “Al ser fotografías institucionales tienes que priorizar los rostros y no puede haber mucho espacio vacío, pero he podido hacer lo que he querido. He podido decidir y me han dejado crear”, asegura en ¡Hola!. “He seleccionado la luz, el fondo, el espacio, los colores... Tuve que ir varias veces al palacio para ver los diferentes elementos. Si recurría a una lámpara, a una silla...”, explica la fotógrafa.

Su estilo de trabajo se asimila al de los pintores. Prácticamente no usa Photoshop y cuida mucho los detalles. “Pienso mucho y disparo poco”, asegura la artista, que trabaja siempre con luz natural y que en esta ocasión usó a una pareja de amigos de la misma estatura que los reyes como figurantes. “Imagínate, es mucha responsabilidad y no puedes perder el tiempo. Además, tuve cinco ayudantes para las sesiones de fotos”, explica.

La cuenta de Instagram de De Castro está llena de retratos y numerosas fotografías de personas, aunque también de animales. Famosa es su serie Zoocosis (2017), en la que busca hacer visible el sufrimiento de los animales del zoo. “Un mundo irreal que ha creado con la excusa de la conservación de algunas especies y la educación en el respeto hacia los animales”, escribe en su web.

Según la autora “esta falta de libertad provoca conductas estereotipadas y repetitivas generadas por el estrés, la soledad y la apatía, dando lugar a un síndrome llamado Zoocosis”.

Son comportamientos y posturas anómalas, especialmente en los animales que permanecen encerrados en espacios muy pequeños, que se refleja en esta seria fotográfica que realizó durante dos años junto a su compañero Juan Cañamero.

“La fotografía es el mayor arma que tengo para denunciar, para contar, para expresarme y, en definitiva, para vivir. Por eso necesitaba también hacer uso de ella para enfrentarme a este tema”, aseguró en una entrevista en 2017 en la presentación del Proyecto PHES, también con su compañero Juan de Cañamero.

Fue una idea que surgió tras ver unas imágenes del bombardeo del último hospital infantil que quedaba en Siria. La exposición contó con 84 instantáneas cedidas por conocidos fotógrafos junto a un retrato de éstos hechos por Estela de Castro. El dinero recaudado fue a cuatro ONGs: Sohram-Casra (Turquía), Il gattaro d’Aleppo (Siria), Jugent Retter (en el mar Mediterráneo) y Proyecto Elea (Grecia).

“Si tantas personas se han volcado de corazón con esta causa, significa que somos muchos los que pensamos que es una situación trágica a la que tenemos que dar solución. Es desconcertante la actitud de indiferencia que tienen los gobiernos”, dijo en la presentación de la muestra benéfica en el Centro Universitario De Artes TAI de Madrid.

Suyo también es el proyecto Mi hermano, sobre el largo proceso hospitalario que acompaña las enfermedades neurodegenerativas, en este caso el síndrome Lennox-Gastaud. “Una enfermedad cuyos principales síntomas son retraso mental e incapacidad psicomotriz, asociado a crisis convulsivas”, dice su carta de presentación.

Esta enfermedad produce también escoliosis y obliga a quien la tiene a llevar corsé.

Estela de Castro ha trabajado también para conocidos medios de comunicación como las revistas Esquire, Forbes y Tapas, en las que ha hecho  retrato editorial, o los periódicos El País, El Mundo y La Vanguardia.

También ha sido impartido clases en la Escuela de Fotografía Efti (Madrid) y en el Centro Universitario de Artes TAI de Madrid, y desde 2019 imparte talleres de retratos en la Escuela Lens de Madrid.