Qué se sabe de Lin Shin, el supuesto nuevo comisionista del caso de las mascarillas
Tras aparecer en la documentación aportada por el empresario Luis Medina, Podemos reclama al juez que confirme su identidad.
El caso de las mascarillas parece no tener fin y, mientras el juez Adolfo Carretero continúa con la investigación, Luis Medina ha añadido un nuevo nombre hasta ahora desconocido, el de Lin Shin.
En la documentación recientemente aportada por el empresario al Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid aparece dicho nombre como uno de los intermediarios que junto a Alberto Luceño y el aristócrata recibieron ingresos económicos por la compra del material sanitario del Ayuntamiento de Madrid.
En total, detallan que cada uno percibió un millón de dólares por las mascarillas, 915.000 por los test y 1.125.000 por los guantes. Algo que ha obligado a Podemos a presentar un escrito al juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, en el que reclama averiguar la identidad de esta persona.
En la solicitud a la que ha tenido acceso EFE, a la formación morada le causa “cierta sorpresa” que las sumas reflejadas en el cuadro aportado para “Alberto”, “Leno” y “Lin Shin”, sean prácticamente coincidentes con las cantidades que fueron finalmente percibidas por Alberto Luceño, 5,5 millones de dólares, según la Fiscalía Anticorrupción.
Desde Podemos defienden que es “necesario” que se identifique y localice “a quien se refleja en dicho cuadro de comisiones con la identidad de “Lin Shin”, con el objetivo de llegar a imputarle.
Pide por tanto al juez que requiera a Luceño que “aporte todos los datos identificativos de los que disponga a tales efectos” y que solicite al Ayuntamiento de Madrid y a la de la empresa funeraria, personadas en condición de acusación particular, que “confirmen si tienen conocimiento de la participación en la operación” de ese supuesto comisionista.
La aparición de Lin Shin se produce en un momento de la causa en el que se ha llegado a practicar un registro en el domicilio de Luceño después de que el fiscal sospechase de un correo que supuestamente habría enviado el empresario malasio San Chin Choon al juzgado en el que certificaba que los dos investigados eran agentes exclusivos suyos.