Qué pinta EEUU y otras claves en la extraña detención del hijo de 'El Chapo' Guzmán
Ovidio Guzmán es uno de los líderes del Cartel de Sinaloa y aparecía como objetivo de la Justicia estadounidense.
La detención de Ovidio Guzmán, uno de los hijos del “Chapo” Guzmán más buscados por EEUU, ha desatado olas de violencia en el norte de México y especulaciones sobre el papel de Washington, que solicita su extradición desde 2019.
Pero también ha despertado muchas dudas por el momento y la sucesión de hechos. Estas son las cinco claves sobre la detención del heredero del “Chapo” y lo que ha ocasionado:
1. De su detención al ingreso en prisión
Ovidio Guzmán fue detenido en la madrugada del jueves en el norteño estado de Sinaloa, en un operativo de las Fuerzas Armadas mexicanas que terminó en disturbios violentos en la región.
Posteriormente, el narcotraficante fue trasladado en avión a la Ciudad de México, donde lo pusieron a disposición de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (Femdo) y lo internaron en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1 Altiplano -conocido también como el penal de Almoloya-, ubicado en Estado de México, donde también estuvo recluido su padre, quien se fugó de ahí en 2015.
2. Al menos 29 muertos en los disturbios por su arresto
La detención de Guzmán, apodado “El Ratón”, derivó en una jornada de violencia en Sinaloa, especialmente en Culiacán (capital del estado), Los Mochis y Mazatlán, que se saldó con al menos 29 muertos, una decena de militares y 19 miembros del crimen organizado, informó el Gobierno mexicano.
Los bloqueos de carreteras con vehículos incendiados, las agresiones armadas, el cierre de aeropuertos y la suspensión de actividades empresariales y escolares recordaron al “culiacanazo”, los sucesos violentos acontecidos en Sinaloa en 2019 tras la primera detención del narcotraficante, que fue puesto en libertad por orden del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, para evitar muertes civiles.
3. La extradición a EEUU, congelada
El Gobierno mexicano descartó desde el primer momento extraditar por la vía rápida al presunto criminal a Estados Unidos, quien tiene abierta una solicitud desde 2019.
El canciller, Marcelo Ebrard, estimó que Washington tardaría entre cuatro y seis semanas en presentar cargos penales, por lo que previó que el proceso sea lento.
Este mismo viernes un juez federal mexicano congeló temporalmente la posibilidad de que Guzmán sea entregado a las autoridades estadounidenses y le otorgó permiso para recibir comunicaciones en el penal en el que está recluido, después de que sus abogados defensores presentaran recursos de amparo.
4. Sus cargos: narcotráfico y posesión de armas
Ovidio Guzmán enfrenta acusaciones tanto en México como en Estados Unidos, lo que enredaría todavía más las posibilidades de que sea extraditado.
En su país de origen, se enfrenta a posibles delitos contra la salud (narcotráfico) y posesión de armas de fuego de uso exclusivo del ejército, además de estar investigado por delincuencia organizada, según expuso la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.
Estados Unidos, que ofrecía desde diciembre de 2021 una recompensa de 5 millones de dólares por su captura, imputa al narcotraficante delitos que versan sobre la conspiración para la introducción de drogas a ese país.
5. Qué pinta EEUU en todo esto
La detención del delincuente sorprendió al ocurrir días antes de la visita a México del presidente estadounidense, Joe Biden, con motivo de la Cumbre de Líderes de América del Norte, lo que abrió la puerta a especulaciones sobre la influencia de Washington en la política mexicana contra el narcotráfico.
No obstante, el Gobierno mexicano negó cualquier relación entre los dos hechos y aseguró que Estados Unidos no participó en el operativo en el que se detuvo a Guzmán.
“Actuamos con autonomía, con independencia, sí hay cooperación y la va a seguir habiendo, pero las decisiones las tomamos como gobierno soberano, independiente, y estas decisiones las tomamos en el gabinete de seguridad”, aseveró López Obrador.