¿Qué es exactamente el “pico” de contagios y por qué será dramático cuando llegue?

Llevamos tantos días escuchando lo importante que es alcanzar el pico de la epidemia para que comience a aplanarse la curva que, inconscientemente, lo hemos interiorizado como objetivo número uno en esta batalla contra el coronavirus.

Y, efectivamente, lo es. Pero quizás no hemos entendido bien del todo lo que supone llegar a ese famoso pico, que en absoluto significará “haber salido del túnel”, advierte Pedro Gargantilla, jefe de Medicina Interna del Hospital de El Escorial. “Nos esperan tres semanas críticas”, avanza.

La inversión de la curva llegará, como ha explicado Fernando Simón, director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, cuando un individuo infectado transmita el virus, de media, a menos de una persona. 

En Madrid, la Comunidad más afectada, las últimas cifras apuntan a que ese pico está cerca, y el Consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, espera que a partir del miércoles -cuando se cumplen dos semanas del cierre de centros educativos- empiecen a bajar los contagios por coronavirus, que ya se han ido reduciendo pasando de crecimientos por encima del 20% a en torno al 10%.

Cuando una persona transmita el virus a otro individuo, o menos

“Hace una semana, en Madrid las cifras de contagios se iban duplicando de un día para otro. Ahora, el número de casos se duplica cada cinco días. Esto quiere decir que antes, por cada infectado, se contagiaban seis o siete personas. Ahora, por cada paciente hay otros dos o tres contagiados adicionales. El pico al que nos acercamos se dará cuando una persona contagie a menos de una persona”, explica a El HuffPost Javier Padilla, médico de familia y autor del libro ¿A quién vamos a dejar morir?.

Cuando el número de casos nuevos en un día sea menor que el número de casos nuevos del día anterior eso marcará “un punto de inflexión”, ha declarado el consejero de Sanidad madrileño. Pero en ese cálculo hay más factores, apunta Padilla.

Se habrá llegado al pico cuando el número de casos activos empiece a descender, es decir, cuando disminuya el número de contagiados menos el de casos curados más el de fallecimientos. Esto es: casos totales - (altas + fallecimientos), explica el experto.

Por ejemplo, si el número de casos nuevos en un día es de 5.000, el de curados es de 1.000 y el de fallecidos de 600, la curva está en ascenso; pero si el número de casos nuevos es 3.000, el de curados asciende a 5.000 y el de muertos es 500, la curva irá hacia abajo. 

Aún no se pueden “lanzar campanas al vuelo”

Para Padilla, esto no equivale a un par de días con buenos datos, sino a un “proceso”, de lo cual no se puede hablar todavía en España, que este lunes ha registrado un incremento de casos del 14%, hasta alcanzar los 33.089 infectados tras sumar 5.517. En total, desde el comienzo de la crisis han fallecido 2.180 personas y se han curado 3.355.

El propio Fernando Simón ha señalado que, aunque el porcentaje de aumento es similar al de este domingo y que mantiene una tendencia, no es momento aún de “lanzar campanas al vuelo”.

“Según los datos que vamos valorando sí parece que se va suavizando progresivamente el incremento de casos que se notifican cada día; sin embargo, todavía no tenemos certeza de haber llegado al pico”, ha asegurado este lunes.

Y cuando llegue el pico... vendrá lo duro

Aun así, alcanzar el pico supondrá haber superado la “primera etapa”, no “resolver el problema”, ha aclarado el ministro de Sanidad, Salvador Illa. De hecho, lo peor para el sistema sanitario vendrá después del pico, advierten Pedro Gargantilla y Javier Padilla, ya que habrá una mayor acumulación de casos, y la peor parte se la llevarán las UCIs.

“Ese es el momento en el que puede colapsar el sistema sanitario”, sostiene Gargantilla. “Los pacientes están de media 20 días en la UVI. Así que cuando se alcance ese pico, la gente que entre a la UVI todavía tendrá tres semanas por delante de hospitalización”, y esos pacientes se irán sumando a los que ya estuvieran ingresados y a los nuevos casos que seguirán apareciendo, aunque en menor medida, se espera.

Gargantilla calcula que “tenemos por delante tres semanas duras”: una hasta que se alcance el pico y las dos siguientes, que “serán críticas”. Por eso el especialista pide a la gente que tenga paciencia, y que no les desconcierte esa ‘llegada al pico’ acompañada de altas cifras de fallecimientos, que los habrá. Por otro lado, tampoco vale confiarse y relajar las medidas de confinamiento antes de tiempo: “No se puede caer en el error de que, a la mínima mejoría, la gente piense que ya hemos salido de esto”.