El paso que tienes que seguir antes de ponerte la mascarilla (además de lavarte las manos)
Todos los días, también en invierno.
Cuando comenzó la desescalada los dermatólogos de la Fundación Piel Sana de la Academia Española de Dermatología y Venereología avisaron de que había que extremar las precauciones con el sol después de dos meses confinados. La necesidad de aplicarse protección solar es imprescindible también con mascarilla, aunque tape la mitad de la cara.
La razón es que todavía no hay estudios que señalen que los modelos de mascarillas que se utilizan para prevenir el coronavirus protegen frente a las radiaciones ultravioletas.
Por lo tanto no hay ninguna razón para creer que por llevar parte de la cara cubierta podamos librarnos de los efectos negativos del sol y por eso los dermatólogos insisten en la aplicación del fotoprotector antes de salir a la calle con la mascarilla puesta. Solo algunos modelos muy específicos que se utilizan para el senderismo u otro tipo de deportes al aire libre ofrecen un factor de protección superior al 50 pero, evidentemente, no sirven para prevenir contagios.
En cuanto al grado de protección que se debe elegir, los dermatólogos recomiendan no utilizar uno más bajo al factor 30, aunque para las personas de piel más blanca, sensible o con lunares, es recomendable utilizar el factor 50, especialmente los primeros días de exposición. Desde la Fundación Piel Sana han lanzado una campaña para promover hábitos saludables para la desescalada ya que, según sus informes, solo el 18% de la población se protege a diario de las radiaciones ultravioletas.
Para prevenir los efectos dañinos del sol puede aplicarse tanto un fotoprotector como el que utilizamos en la playa o una crema hidratante con SFP superior a 30, aunque hay que recordar que es necesario reaplicarlo cada dos horas si la exposición va a ser prolongada.