Los combustibles, en máximos históricos: ¿hasta dónde van a subir los precios?
El precio del petróleo cae, pero los combustibles suben a un ritmo imparable mientras los sectores piden al Gobierno medidas urgentes para amortiguar esta crisis.
El conflicto bélico se localiza en territorio ucraniano, pero las consecuencias salpican a todo el mundo. Por eso, en las últimas semanas, el alza en los precios es imparable y, principalmente en los carburantes. Una guerra que ha provocado una crisis energética que tiene a EEUU y Rusia, dos de los mayores productores de petróleo, en liza por el futuro de la seguridad europea y mundial. Mientras, los indicadores de las gasolineras marcan cifras hasta ahora nunca vistas y el escenario se presenta muy complicado tanto para particulares, transportistas, áreas de servicio y hasta para el Gobierno.
Los próximos días van a ser clave con el presidente del Gobierno inmerso en la búsqueda de apoyos para reformar el sistema energético de la Unión Europea, una parte del sector del transporte en paro indefinido y las distribuidoras exigiendo medidas contundentes que, por el momento, no llegarán hasta el 29 de marzo, con o sin Europa.
Y en el aire, una pregunta: ¿hasta dónde va a llegar el precio de los carburantes? El rápido ascenso en los últimos días deja ver que el ritmo se mantendrá. Ya en algunas estaciones de servicio, la gasolina y el gasóleo ha superado la barrera de los dos euros, pero hay voces dentro del sector que lo elevan previsiblemente hasta los 2,5 euros el litro.
“Yo ya no descarto absolutamente nada”, expresa Nacho Rabadán, director general de la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES). En entrevista para El HuffPost, el representante de las gasolineras no se atreve a dar una cifra máxima pero reconoce que la situación “es muy difícil” y “les da miedo”.
Mientras tanto, a las gasolineras les cuesta más rellenar las cisternas de suministros y eso lo van a seguir repercutiendo en el precio de venta. Según los datos difundidos este jueves por el Boletín Petrolero de la Comisión Europea, que recoge el precio medio registrado en más de 11.400 estaciones de servicio españolas entre el 8 y el 14 de marzo, sitúan el precio medio de la gasolina en España en 1,844 euros el litro y de 1,817 euros para el gasóleo.
Con estos precios, llenar un depósito medio de 55 litros con gasolina cuesta actualmente más de 101 euros, mientras que con gasóleo alcanza los 100 euros. Esto supone pagar cerca de 36 euros más que a principios de 2021 si se utiliza gasolina, y 41 euros más si se elige gasóleo.
Aún así los precios en España se sitúan por debajo de la media europea. La gasolina más cara se encuentra una semana más en Países Bajos (2,336 euros) y Alemania (2,259 euros), mientras que el gasóleo con el precio más alto se compra en los países nórdicos, concretamente en Suecia (2,349 euros) y Finlandia (2,032 euros).
¿Por qué baja el petróleo y sube la gasolina?
Para calcular el precio de la gasolina se toman en cuenta varios factores como: el precio internacional del petróleo, la demanda, la oferta, la inflación, la tasa de cambio, la estabilidad política en países productores y hasta la propia especulación.
Por ello, Rabadán explica que la situación no se va a revertir hasta que las cotizaciones de la gasolina y del gasóleo se estabilicen. Y aclara que, aunque en los últimos días se ve una caída en los precios del petróleo por el avance en las negociaciones entre Rusia y Ucrania, esto no tiene un impacto inmediato en el precio de los carburantes. “Nosotros no compramos petróleo, compramos gasolina o gasóleo y el precio no baja en la misma proporción”, añade.
Según el experto, las cotizaciones internacionales del barril de crudo y de los productos refinados no son exactas y mantienen un “decalaje de unos días”. De ahí que se conozcan caídas en el petróleo pero los precios de los carburantes no sigan el mismo camino.
Aún así, la evolución del mercado no es de subida constante si no que está experimentando cierta volatilidad. En este sentido, Rabadán detalla que esa tendencia según los traders del sector es perjudicial porque “hace que quienes compran los barriles no sepan hacia dónde va el mercado” y eso se resiente en los precios de los productos refinados.
¿Qué medidas se pueden tomar?
El Gobierno estudia varias posibilidades para amortiguar el impacto de la crisis energética aunque no ha detallado qué opciones tienen sobre la mesa. Sin embargo, desde varias asociaciones y sindicatos le proponen algunas que “deberían estar sí o sí” en esa batería de medidas que serán “un balón de oxígeno” para la competitividad de las empresas y el bolsillo de los ciudadanos.
Una de ellas es la que lanzan desde la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) que solicita que se extienda el gasóleo profesional bonificado a más de 800.000 autónomos que no pertenecen al sector del transporte pero cuya actividad exige el uso del vehículo. Esta medida supondría un ahorro de 4,90 céntimos de euro por litro consumido para esos trabajadores.
Esta se suma a las propuestas desde CEEES que incluyen: la reducción del impuesto sobre el valor añadido (IVA) del 21% al 10%; reducir el impuesto especial de los hidrocarburos al mínimo establecido; que la devolución del gasóleo profesional sea mensual en lugar de trimestral y que la revisión de los precios de transporte en función de la evolución del carburante se acorte de mensual a semanal. Desde la Confederación calculan que solo con la reducción del IVA los consumidores podrán ahorrar entre 12 y 18 euros sobre los precios actuales a la hora de rellenar el depósito.
Por su parte, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, en declaraciones recientes, se ha mostrado partidario de bajar impuestos “de forma temporal” para paliar “situaciones coyunturales y urgentes”, así como la aplicación de un IVA superreducido para determinados productos de primera necesidad.
El riesgo de que no salgan las cuentas
Sin embargo, es importante saber que tocar los impuestos puede tener consecuencias en los Presupuestos Generales del Estado que se realizan en base a unos precios medios del carburante que ronda el 1,40 euros el litro y un precio de crudo sobre los 60 dólares el barril. “Al final no les salen las cuentas”, apunta Rabadán.
Por ello, los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) ven “poco margen” a la bajada de impuestos en carburantes y tampoco ven viable reducir el IVA debido al “enorme coste” que supondría la medida.
“No se puede bajar el IVA al gasóleo ni a las gasolinas porque estamos ‘armonizados’ con la Unión Europea, que nos exige aplicar el tipo general del IVA en los carburantes e incluso nos demanda que aumentemos la tributación de gasolinas y gasóleos a la media europea”, argumenta el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, a la agencia EFE.
Por su parte, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no ha querido dar mayor detalle de las medidas que se tomarán aunque este miércoles dejó la puerta abierta a la opción a rebajar la fiscalidad de los carburantes tras ser preguntada por los periodistas. “Adoptaremos la medida más eficaz”, ha respondido.
Ante esta situación, algunos países ya mueven ficha como Francia que rebajará 15 céntimos el precio del litro a partir del 1 de abril, a pesar de que eso les suponga un coste de más de 2.000 millones de euros a las cuentas públicas.
Por otro lado, Nacho Rabadán recuerda que Polonia ha sido el primer país en tomar una medida fuera de lo establecido en el marco comunitario al bajar el IVA del 23% al 8% y sin consecuencias por el momento. No obstante, Rabadán no descarta que esta “vista gorda” esté relacionada como respuesta al esfuerzo que el país está haciendo con la recepción de más de 2 millones de refugiados ucranianos.
No obstante, la medida podría estar bien vista entre los Veintisiete si finalmente Pedro Sánchez consigue el beneplácito de sus homólogos sobre este tema. Por el momento se ha reunido con sus homólogos de Croacia, Eslovaquia, Rumania, Italia, Portugal, Grecia y Alemania en una gira europea para buscar apoyos y consensos en contar con una solución común. Si no, toca esperar dos semanas para ver qué medidas toma finalmente el Gobierno y cuáles son sus primeros impactos. Mientras tanto, hay que seguir los consejos de los expertos para que repostar salga algo más barato.