Las aplaudidas tres portadas contra la LGTBIfobia de 'ELLE' en Hungría
"Seis enamorados. Un amor”.
Las políticas de Hungría contra el colectivo LGTBI han llegado hasta el punto de que el pasado mes de junio se aprobó una ley que prohíbe cualquier referencia a la sexualidad en los colegios e impide la difusión en televisión de contenidos sobre el colectivo. La situación del país no sólo ha generado el descontento de ciudadanos del resto del mundo. Incluso la Unión Europea le enseñó la puerta de salida y Bruselas le abrió un expediente por discriminación.
A esas reacciones se ha sumado la edición húngara de la revista ELLE, que ha publicado tres portadas en las que se ha posicionado claramente contra las medidas del primer ministro ultraderechista, Viktor Orbán. Un gesto que se suma al color con el que la publicación ha rellenado las letras de su cabecera en redes sociales, el de la bandera LGTBI, y para el que ha utilizado el late motiv “tres portadas. Seis enamorados. Un amor”.
Jordán Adél (actriz) y Székely Kriszta (directora de teatro)
“La atracción puede desarrollarse entre dos personas en cualquier momento, basta con que se miren a los ojos”.
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Oltai Kata (feminista) y Nagy Zsolt (actor)
“No lograremos la igualdad si le prohibimos algo a los demás”.
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Pál Márton y Hanol Ádám (activistas)
“Hogar, lealtad, familia. Esos también son nuestros valores”.
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La publicación de ELLE ha generado mucho ruido en redes sociales, especialmente en Twitter, donde personalidades como el jugador de waterpolo Víctor Gutiérrez o el presidente del Grupo Parlamentario Más Madrid, Eduardo Rubiño, han destacado su “ayuda” para dar “visibilidad y naturalidad” a un colectivo que se enfrenta al auge del odio desde las propias instituciones:
En julio, el primer ministro húngaro anunció un referéndum sobre la ley homófoba, aunque pidió a los ciudadanos que su respuesta fuese “no” a la consulta, que plantea si deben permitirse charlas de orientación sexual a la conveniencia de que se promuevan terapias de cambio de sexo entre menores, entre otras cuestiones.
El mes anterior, más de la mitad de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE denunciaron en una carta las “amenazas” contra los derechos fundamentales y la discriminación contra el colectivo LGTBI en el país.
Incluso los aficionados alemanes que asistieron al partido que enfrentaba a su selección con la de Hungría en la Eurocopa condenaron las políticas del Gobierno y la decisión de la UEFA de prohibir iluminar el estadio de Munich con los colores del arco iris.
