¿Por qué y para qué hay una huelga feminista el 8 de marzo?

¿Por qué y para qué hay una huelga feminista el 8 de marzo?

Las razones por las que los colectivos feministas argumentan que es necesaria la huelga del 8M.

Medios de comunicación, políticos, diferentes personajes de la cultura... En las últimas semanas la huelga feminista convocada para el próximo 8 de marzo ha sido objeto de debate público. Más de 70 países, entre ellos España, han llamado a las mujeres a "parar el mundo" en una huelga diferente a las que conocemos: no sólo será una huelga laboral, sino también de consumo, estudiantil y de cuidados.

Muchos se hacen las mismas preguntas: ¿quién convoca la huelga? ¿Contra quién? ¿Quién está llamado a secundarla? Al ser un hecho sin precedentes en España, han surgido muchas dudas sobre las cuestiones técnicas de la misma.

Pero muchos se hacen preguntas todavía más importantes: ¿Por qué hay una huelga feminista? ¿Qué se reclama? Como la discriminación y la desigualdad de género está presente en todas las esferas de la vida pública, así como en la vida privada, las razones para hacer huelga son muy amplias y pueden resultar algo confusas. Y las reclamaciones también son muchas y muy variadas. La principal: visibilizar el papel fundamental de las mujeres en toda la sociedad.

La Comisión 8M, encargada de coordinar las distintas asambleas nacionales y de organizar las acciones para ese día, ha elaborado un extenso documento con las distintas razones para hacer huelga. Estas son algunas de las cuestiones más importantes por las que está convocada la huelga.

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  • Las mujeres siguen realizando el trabajo doméstico y de cuidados, un trabajo que se invisibiliza y no se reconoce. Además, este trabajo se realiza de forma gratuita y precarizada si es en el ámbito familiar. Por eso, se reclama que ese trabajo se visibilice y se realice en buenas condiciones. Además, que las trabajadoras del hogar tengan buenas condiciones.
  • Los recortes en servicios sociales, sanidad y dependencia recaen sobre los hombros de las mujeres. La Administración pública debería garantizar "de forma irrenunciable" y prioritaria la sanidad, servicios sociales, educación, ayuda a la dependencia...
  • No hay corresponsabilidad de los hombres o del Estado en las tareas domésticas y de cuidados. Son los trabajos más necesarios y menos reconocidos.
  • Porque a las trabajadoras del hogar no se le reconoce la importancia ni la dignidad y, en su mayoría, son mujeres migrantes.
  • Por una brecha salarial del 23% que genera precariedad laboral entre las mujeres.
  • Por la penalización de la maternidad en el mercado de trabajo. Perjudica a las mujeres a la hora de la contratación o de mantener el puesto. Por eso las feministas proponen incluir la "entrevista ciega" para puestos de trabajo y así no se pueda discriminar por raza, sexo o edad.