¿Por qué todavía no se sabe quién será presidente en EEUU?
La pandemia ha obligado a más de 100 millones de personas a emitir su voto por correo.
En 2016, la victoria de Donald Trump sorprendió al mundo alrededor de las 02:30 hora local del este (07:30 GMT), cuando se confirmó que el candidato republicano había ganado en el estado de Wisconsin, lo que le permitió superar los 270 votos electorales necesarios.
Este año, sin embargo, el resultado no prevé conocerse hasta bastante más tarde. ¿Por qué?
Por estresante que resulte, y por mucho que el actual presidente se resista a esperar los recuentos oficiales, así será. La pandemia ha obligado a más de 100 millones de personas a emitir su voto por correo, lo que dilatará los plazos.
Algunos estados, según su propia ley electoral, no podrán abrir, procesar o contar las papeletas hasta un día después de las elecciones o incluso hasta después del cierre de las urnas. Algunos de ellos, estados clave como Michigan, Pensilvania y Wisconsin.
Al contrario de lo que Tump ha hecho durante toda la campaña -sembrar dudas en torno al voto por correo y acusar de posible fraude a los demócratas-, Joe Biden se ha esforzado en dejar claro que “no habrá ganador hasta que se cuente el último de los votos”.
Se espera que la mayoría de esos votantes anticipados se inclinen por el demócrata, motivo por el cual Biden llama a la calma y a la paciencia.
A la espera de los estados clave
Hasta ahora, el magnate ha vuelto a dar la sorpresa con respecto a los pronósticos. Gana en Ohio, en Florida y Texas.
Ahora la batalla está todavía abierta en otros cuatro territorios decisivos como son Arizona, Pensilvania, Wisconsin y Michigan, donde se esclarecerá en buena medida el resultado final y donde se pronostica que venza el republicano, con la excepción del primero, en el que Biden tiene una holgada ventaja.