Por qué los hombres nunca se abrochan el segundo botón de la chaqueta del traje
La respuesta está en la Historia.
Las normas protocolarias dicen que los hombres nunca deberían abrocharse el segundo botón de una americana de dos botones. Se considera apropiado abrochar el primero, pero nunca el segundo.
Entonces... si se supone que nadie debería abrocharse el segundo botón, ¿por qué existe?
Como pasa con muchas curiosidades del mundo de la moda, la Historia (con mayúsculas) tiene algo que ver. Cuenta la leyenda que al rey Eduardo VII de Inglaterra —un rey de curiosos vicios— le quedaba pequeño el traje y empezó a dejar de abrocharse el segundo botón de la chaqueta. Al no querer avergonzarle, los demás le imitaron. Y la tradición sigue vigente.
Entre otras teorías también se barajaba que el origen de esta costumbre estuviera en los dandis, que no se abrochaban la chaqueta para que quedara a la vista que llevaban varias capas de ropa, o en los que montaban a caballo, para mayor comodidad. Pero Robert Johnson, el director de la sección Moda de la edición británica de la revista GQ, apoya la teoría del rey Eduardo y señala que "no hay nada más raro que la etiqueta en la corte real".
Hoy en día, las chaquetas de hombre llevan dos o tres botones, aunque algunas llevan solo uno. Para las chaquetas de tres botones, hay que recordar este orden: "A veces, siempre, nunca"; es decir, que el botón de arriba se puede abrochar a veces, el botón de en medio se debe abrochar siempre y el botón final no se debe abrochar nunca. En el caso de las chaquetas de dos botones, siempre se debe abrochar el botón de arriba y nunca el de abajo.
Tanto si Eduardo VII fue una verdadera inspiración para el mundo de la moda como si su historia no es más que una leyenda, los trajes modernos se confeccionan para llevar el segundo botón sin abrochar de manera que quedan demasiado apretados si se abrochan.
"El hecho de llevar el segundo botón abrochado hace que la chaqueta quede demasiado estirada y da sensación de poca movilidad", explica al HuffPostClive Dilnot, profesor de Diseño de la universidad neoyorquina The New School.
En palabras de Dilnot, muchos hombres prefieren no abrocharse ningún botón. De acuerdo con la guía de estilo de la revista de moda masculina Black Lapel, es aceptable desabrocharse la chaqueta por completo antes de sentarse para evitar que la tela tire o se arrugue.
¡Qué alivio! Gracias, rey Eduardo.
Este artículo fue publicado originalmente en la edición estadounidense de 'The HuffPost' y ha sido traducido del inglés por Lara Eleno Romero.