Todas las polémicas de la saga ‘Saw’ hasta la llegada de ‘Spiral’
Sus creadores han pedido en infinidad de ocasiones que no se denomine a las películas como “tortura porno".
En 2004, Saw entró con fuerza en las salas y ganó montones de adeptos que le han guardado fidelidad durante 17 años. La saga arrancó como un thriller macabro. Con cada nueva entrega su dureza ha ido a más, y ya no hay quien le salve de la etiqueta gore. Su reboot, Spiral: Saw, llega este viernes 21 de mayo a los cines.
Saw nunca ha sido una película de terror ‘al uso’. La franquicia siempre ha explotado su parte exhibicionista para los amantes de la sangre. De hecho, llegó a gozar de prestigio como una saga de culto del género, especialmente con sus dos primeras películas.
La primera ingresó más de 103 millones de dólares en taquilla a nivel mundial, con un presupuesto de producción que apenas superaba el millón. El total de ingresos de toda la saga supera los 975 millones y la suma del presupuesto se queda en 77.
En esta última ocasión, Spiral “ha incinerado” a Aquellos que me desean muerto, de Angelina Jolie, según The Hollywood Reporter. Recaudó en su primer fin de semana 8,7 millones de dólares, mientras que la de Jolie, con grandes expectativas, apenas consiguió 2,8 millones.
Spiral —con Chris Rock, Samuel L. Jackson entre su reparto— cuenta la historia de la investigación de unos crímenes que recuerdan a varios del pasado. Sin ser consciente, uno de los detectives ya está atrapado en el juego del asesino, que en su origen fue John Kramer (Tobin Bell), apodado Jigsaw (o Puzzle).
Hacía que sus víctimas apreciaran sus vidas sometiéndolas a torturas macabras que exigían sacrificios. Incluso se han llegado a crear rankings de las trampas más gores de la franquicia. Con esta la premisa, las polémicas siempre han estado servidas.
Censura en España
La sexta parte de la saga debería haberse estrenado el 16 de octubre de 2009 en España, pero el ministerio de Cultura la dejó relegada a los cines eróticos al calificarla como una película X. La cinta no contenía escenas de sexo explícito ni lenguaje inapropiado, pero se entendió que hacía apología de la violencia.
Sin embargo, la historia de Saw VI no era muy diferente a la de sus predecesoras: trampas mortales, torturas y contenido sangriento, pero ninguna de ellas recibió dicha calificación. Parte del público entendió que era una forma de apoyar el cine español quitándose de encima un taquillazo de fuera, ya que coincidía en cartelera con títulos como After o Yo, también.
Finalmente, con un año de retraso, Saw VI se proyectó en salas comerciales tras pasar por el filtro de un montaje específico, reeditado.
La “pornografía de la tortura”
Los creadores han pedido en infinidad de ocasiones que no se denomine a sus películas como “tortura porno”. La última vez que lo han hecho ha sido este mismo mes.
El director de Spiral, Darren Lynn Bousman, ha mostrado su enfado en Twitter por la forma en la que los críticos se están refiriendo a ella, y ha pedido nuevamente que dejen de llamarla “tortura porno”. Según Bousman, no todo es violencia, sino que el thriller está muy presente, por lo que no es una película más del cine gore o cine splatter (otra forma de referirse a esa ‘tortura porno’).
“Bueno. ¿Podemos simplemente PARAR con las referencias a la “tortura porno” en los artículos? Eso es tan 2008”.
Estas han sido algunas de las críticas:
Saw III está considerada como una de las entregadas más heavies de la saga. Su proyección en salas generó numerosas noticias sobre los desmayos que sufrieron los espectadores que acudieron a verla —especialmente en Reino Unidos, donde Emergencias asistió tres llamadas en un solo día—, justo en el momento en el que aparecieron dos escenas: la de una víctima que debe arrancarse unas cadenas y con ello partes de su cuerpo y la de una intervención quirúrgica.
La BBC habló de una “avalancha” de desmayos en un cine y de varias mujeres que tuvieron que ser trasladadas al hospital. En ese momento, la cinta encabezaba la taquilla británica.
No todo el mundo está de acuerdo en que la mejor forma de seguir la historia del asesino del Puzzle sea respetar el orden de las películas. De hecho, son varios los artículos de medios especializados en los que se ofrecen listas alternativas para ver las entregas —y aún así, no perderse en la historia—.
Esta misma semana, Variety las ordenaba de la siguiente forma: Saw (2004), Spiral (2021), Saw II (2005), Jigsaw (2017), Saw III (2006), Saw VI (2009), Saw IV (2007), Saw V (2008) y Saw 3D: The Final Chapter (2010).
“La historia general se ha vuelto cada vez más complicada en la búsqueda de mantener vivo el trabajo del antagonista anciano”, justifican. El asesino original muere en la tercera película, y a partir de ahí se crea “un árbol genealógico” de fieles y víctimas que quieren seguir con su legado. Pese a ello y todos sus flashbacks, verlas desordenadas no es un problema, siempre y cuando se empiece por la primera.