Podemos pone reparos a reformar el delito de malversación: "Es delicado y tiene aristas"
También estudian si el agravamiento de las penas por desórdenes públicos puede afectar al derecho a la protesta pacífica
Podemos cree que reformar el delito de malversación, como están negociando ERC y el Gobierno, es un asunto “delicado”, que estudiarán con mucho cuidado porque tiene “aristas”, una cautela de los morados que contrasta con la posición de los comunes e IU, que en principio no ponen reparos a retocarlo.
Con esta prevención se ha expresado el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, por las consecuencias que pudiera tener en los delitos de corrupción, después de que ayer el presidente del grupo, Jaume Ausens, de los comunes, se mostrara totalmente dispuesto a reformar el delito de malversación para que vaya ligado al nuevo delito de sedición denominado “desórdenes públicos agravados”.
Y en la misma línea que Asens ha hablado también este martes el diputado de Izquierda Unida Enrique Santiago al considerar, igual que el portavoz de los comunes, que hay que distinguir entre el lucro personal del que no lo es.
En este sentido, ERC apunta ahora a una reforma de la malversación ligada exclusivamente a la sedición que se pretende derogar. De esta forma se beneficiaría sólo a los condenados del procés y no el expresidente del PSOE y de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, y otros cargos ligados al PP.
A diferencia de la reforma del delito de sedición, que Podemos aplaude, ha insistido Echenique en una rueda de prensa en la Cámara, retocar el delito de malversación “tiene aristas” y por eso lo mirarán con lupa una vez que la propuesta se ponga sobre la mesa.
Echenique ha asegurado que la reforma relativa al delito de malversación no se ha debatido dentro del grupo parlamentario y cree que Asens lo que ha trasladado es su opinión personal o la de los comunes.
Fuentes parlamentarias han señalado que el acuerdo para reformar el delito de sedición lo han cerrado el PSOE y ERC, subrayando que los republicanos catalanes pueden estar satisfechos porque no han logrado sacar adelante nada tan importante para ellos en la negociación de los dos Presupuestos anteriores.
Han dicho igualmente que Jaume Asens conocía más aspectos de la negociación de la reforma del delito de sedición, que ellos conocieron poco antes de hacerse pública pero no tenían todos los detalles, y han apuntado que todo debe ser consensuado y hablado para evitar que haya discrepancias en algunas cosas.
Por ejemplo, los morados también están estudiando presentar enmiendas en lo que tiene que ver con el derecho de manifestación porque el agravamiento de las penas por desórdenes públicos puede afectar al derecho a la protesta pacífica y, según Echenique, hay juristas que advierten que podría limitar este derecho.