'Teo', el hombre que mueve los hilos de la derecha española
Así es García Egea, el 'arquitecto' de España Suma y urdidor de los pactos con Cs y Vox
Junio de 2018. Hace calor, centro de Madrid. Un PP en estado de shock tras la moción de censura a Mariano Rajoy. Nadie se esperaba esta situación. En el parque de El Retiro unos niños juegan en la zona infantil. Y en el banco están sentados sus respectivos padres. En este momento hacen un pacto: Pablo Casado y su futuro ‘número dos’, Teodoro García Egea, darán la batalla en las primarias.
Nadie daba un duro por ellos esos días. Todo parecía jugarse en el gran duelo Soraya Sáenz de Santamaría vs. María Dolores de Cospedal. Pero la política española es apasionante y el joven Casado acabaría apenas un mes después coronado contra todo pronóstico como líder del Partido Popular.
Una carrera en la que Egea fue “determinante”, como explica a El HuffPost el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. ‘Teo’, como lo llaman todos en el partido. Él sería el encargado de la estrategia como director de la campaña de las primarias. Y acertó de lleno en lo que quería su partido. Casado lo tuvo claro: tenía que ser su secretario general en Génova 13. El hombre encargado de llevar el día a día del partido, engrasar la maquinaria territorial, con lealtad absoluta y con el ánimo suficiente también para resolver ‘marrones’.
Como el que han tenido que enfrentarse estos días en Euskadi, que ha acabado con la destitución de Alfonso Alonso como candidato para las próximas elecciones y que ha reavivado aquel clima de las primarias entre ‘sorayos’ y ‘casadistas’. García Egea tuvo que tomar las riendas ante el desafío que le planteó el exministro de Sanidad. La situación se volvió “insostenible”, como señalan fuentes de Génova 13, pero comentan en el entorno del secretario general que quieren ser “elegantes” y no van a destripar lo que pasó durante esas duras horas.
Detrás de esta crisis en el Partido Popular estaba el movimiento que promovió la dirección de presentarse en coalición junto a Ciudadanos. Una línea estratégica marcada por el propio Egea, que tiene la obsesión de reagrupar de nuevo el voto de centro derecha en torno al Partido Popular. El dirigente murciano es el ‘arquitecto’ de esa idea conocida como España Suma y el País Vasco es esa primera parada que pretende culminar de cara a las próximas elecciones generales.
Ese ha sido uno de sus ejes principales de actuación durante el último año, a la par que ha sido el gran urdidor de los pactos con Cs y con Vox que permitieron mantener algunas comunidades clave, como Madrid y Murcia, y conseguir plazas simbólicas como el Ayuntamiento de Madrid o la Junta de Andalucía. Ahora, confían en su círculo, pondrá tener más tiempo para dedicarse a temas de pura organización interna después de un año de infarto repleto de citas electorales.
García Egea apenas tiene 35 años, pero es un auténtico animal político. El gran público no conocía a este joven diputado antes de las primarias, pero su pasión por lo público viene desde su época casi adolescente y su ingreso en Nuevas Generaciones. Las redes ardieron ya con su nombramiento al descubrir que era campeón en competiciones de lanzamiento de huesos de aceituna. Pero, ¿cómo es realmente? ¿Qué dicen sus colaboradores, cargos del partido y enemigos? ¿Cómo es el hombre que mueve los hilos de la derecha?
Sí hay algo que repite todo el mundo es que es un trabajador nato, no para nunca. “El día empieza la noche anterior”, comentan desde su equipo, que le manda las portadas de los medios cuando casi todo el mundo duerme. Él ya se hace una idea de por dónde van ir los tiros cuando se levante España. “Te agota, es un salvaje trabajando. Cuando se le mete algo en la cabeza, no descansa. Tengo llamadas suyas a las dos de la mañana durante la campaña, antes y después”, confiesa Carlos Mazón, presidente de la Diputación de Alicante.
Y no hay paredes en su relación con Pablo Casado. Hablan constantemente. Si no están de viaje, se reúnen a diario, intercambian mensajes todo el rato. Ha sido un año y medio “con muchas batallas y elecciones”, confiesa un colaborador de García Egea, que entiende que ahora se abre una “nueva etapa”: ahora se puede centrar más en temas internos.
Esa organización en la que todavía hay rencillas con algunos ‘sorayos’, que ven en García Egea un PP alejado del centro y que ahuyenta a los votantes más moderados por su relación con Vox. Un apoyo de la ex vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría durante las primarias y que pide anonimato lo retrata así: “Un advenedizo sin experiencia, impetuoso y no reflexivo. No dudo de su inteligencia, pero quizá demasiado joven e inexperto para tan altas responsabilidades. Discurso impostado, se le nota la actuación, demasiado chascarrillo en sus intervenciones”.
Los suyos, en cambio, defienden que desde que llegó a Génova 13 se ha buscado la integración, sin importar a quien se hubiera apoyado. Un ejemplo que ponen es la relación ahora con Juanma Moreno, presidente de Andalucía y uno de los grandes apoyos de Santamaría durante aquellas primarias. Su ‘número dos’ en Andalucía, Elías Bendodo, lo explica así: “Hemos tenido la madurez suficiente todos de entender que el congreso terminó aquel mes de julio y ahora todos a trabajar codo con codo”.
Bendodo, hoy consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía, estuvo en aquella famosa foto junto a Santamaría y su equipo comiendo pizzas en Génova mientras Casado reunía a exministros de Rajoy en un restaurante vasco en Madrid a escasas horas de celebrarse las primarias. Pero señala que desde aquella derrota “ha ido fraguando una relación no solo política con Teo, sino de amistad”. ¿Cómo lo define? “Buena cabeza, buena persona, una persona adelantada a su tiempo”.
Vivieron muchas horas juntos precisamente para alcanzar el pacto en Andalucía que desbancaría por primera vez al PSOE del Palacio de San Telmo en Sevilla: “Sus hitos serían esos acuerdos y poner las bases de lo que puede ser la reunificación del centro derecha en España con ese acuerdo PP-Cs en el País Vasco”.
Las negociaciones desde dentro: “Habilidad, paciencia”
También recuerda muy bien las negociaciones junto a García Egea el alcalde de Madrid, que arrebató a Carmena el Palacio de Cibeles gracias a los votos de Vox y Ciudadanos. “Las encaró con habilidad y paciencia, no eran absolutamente fáciles, dependían de otros dos partidos, cuyas relaciones eran complicadas. Mucha paciencia, habilidad, persuasión y mucha relación humana”.
Reconoce Martínez-Almeida que ser secretario general de una formación es “un papel ingrato: siempre que pasa algo en el partido al final te echan la culpa. Lo lleva con lealtad al partido y a Casado. Es consciente de que tiene que hacer ese papel y jugar ese rol. Sin embargo, lo lleva razonablemente”.
Y reflexiona el alcalde sobre lo que ha pasado en Euskadi y ese papel de García Egea: “Ha sido un momento duro, todos los compañeros del Partido Popular conocemos y valoramos la trayectoria política de Alfonso Alonso y sus cualidades personales, pero al mismo tiempo había que tomar decisiones. Ha sido una situación bien resuelta”. Por cierto, Almeida revela que la primera vez que tuvo conocimiento del dirigente murciano fue cuando se quedó ‘Teo’ atrapado a la altura de Albacete y no podía llegar a Madrid, por lo que lo llamaron de urgencia para que lo sustituyera en un debate de La Sexta Noche.
Ese papel de secretario general conlleva el contacto directo con todas las organizaciones autonómicas. Y algo que destacan todos los consultados es su “memoria”: se sabe el nombre de casi todos los alcaldes. Llega a más, según relata la presidenta del PP de Canarias, Australia Navarro. Conoce a todos los cargos del partido en las divisiones insulares. Y algo que se agradece, comenta, es que “llamas y no tiene hora”.”La importancia de que te cojan sobre la marcha”, insiste. Él los escucha, pero también, como dice esta dirigente: “Cuando hay que imponerse, se impone. Le corresponde esa función”.
A García Egea le encanta la estrategia política. “Cuando nosotros vamos, él ya viene”, dice una persona que trabaja a diario con él. Lo analiza todo, siempre con ese enfoque de ingeniero de Telecomunicaciones. Anda ahora obsesionado con el blockchain y ha dado hasta charlas en congresos.
Una mente a la que también enloquecen todas las películas y series sobre ciencia ficción y submarinos. No se cansa de ver, según confiesan sus allegados, películas como K-19 y La caza del Octubre Rojo. Le ha impactado también en los últimos tiempos la serie de Chernobyl, que ya está entre sus favoritas, como La casa de papel. Incluso a sus colaboradores les suelta de vez en cuando frases de El Profesor. También disfrutó viendo The Blacklist y House of cards.
Y siempre con la vista puesta en su Murcia. “Cada día sigue llamándome para analizar cuestiones de actualidad de la Región y darme su visión y consejo”, asevera el presidente autonómico, Fernando López Miras. Revela: “En el PP de aquí ya sabemos lo que es tener nuestra sede disponible los domingos, en Año Nuevo o el 15 de agosto porque Teodoro tiene alguna reunión”.
“Somos amigos desde hace muchos años, prácticamente desde que éramos adolescentes”, añade, para después lanzarse cuando se le pregunta sobre alguna anécdota: “Cada año se plantea un nuevo reto que consigue con creces, pero los amigos quedamos en el intento. Desde las artes marciales, hasta hacer un triatlón, pasando por el esquí de travesía, navegar a vela en mitad de una tormenta, tocar la guitarra o servir a la patria como oficial del Ejército del Aire”. Y no falla, a pesar de su agenda, a la cena de Navidad de amigos de toda la vida y a un pequeño viaje durante las vacaciones.
Precisamente ponen su punto de vista en esta comunidad algunos de sus críticos internos. Fuentes de lo que se considera el PP moderado le afean que “su resultado en Murcia en noviembre, siendo él de esa región y con su imagen”. La ultra derecha se impuso como primera fuerza y sacó más de 10.500 votos al Partido Popular allí, uno de sus grandes históricos bastiones.
Ha sido un larguísimo y complicadísimo tiempo electoral. Precisamente en abril los populares tocaron su suelo electoral con 66 escaños a nivel general, seis meses después en la repetición del 10-N subieron a 89 escaños, pero no hubo posible suma alternativa a Pedro Sánchez. En Génova 13 defienden que a partir de ahora sólo pueden subir y que no se puede achacar ese resultado el equipo que tomó las riendas tras las primarias.
“Estamos en línea de despegue, lo dicen las encuestas”. Así ve el tiempo que se abre Gema Igual, alcaldesa de Santander que apoyó en su día a Santamaría. Pero hoy hasta pasa días de vacaciones en Cantabria con García Egea: “Es una persona que sorprende. Juventud, firmeza y tesón. Es bueno para poder negociar”.
Ahora también ha arrancado la vida parlamentaria, paralizada por tanto ir a las urnas. A García Egea le toca enfrentarse en las sesiones de control al vicepresidente segundo y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias. A muchos les ha sorprendido que se ha cogido pronto el puntillo con un tono muy diferente al que domina los Sánchez vs. Casado. Estilo socarrón, irónico. El presidente de la Diputación de Alicante hace esta observación al hilo: “Él tiene la ironía de Murcia, a medio camino entre el humor andaluz y el manchego. Esa ironía también murciano-inglesa. Pero te deja temblando también con la ironía”. Otra píldora que confiesa: a García Egea le gustan muchos los memes y los comparte por el móvil con compañeros.
Eso sí, el pasado miércoles no hubo duelo entre los dos. Habrá que esperar una semanas. Iglesias estaba malo con amigdalitis y García Egea estaba entrando unas horas antes en el paritorio: acaba de tener a su segundo hijo, al que le llamará Teo.
Los que no están tan a favor de esa ironía son los diputados socialistas. Un parlamentario que lo conoce mucho lanza esta advertencia: “El hueso de la aceituna se le va a acabar atragantando”. “No muestra ningún gesto de voluntad de entendimiento, Egea no es nada moderado”, comenta este diputado, que avisa de que ha visto a los ‘populares’ incluso más agresivos que a los de Vox durante los primeros compases de la legislatura. “Si quieren ser alternativa, tendrían que tender puentes con los diferentes”, añade.
Lanzas políticas. Y muchos medios: García Egea mantiene muy buen contacto con los periodistas. Suele hablar en los pasillos del Congreso mientras otros dirigentes, de todos los colores políticos, salen corriendo. Le gusta mucho la comunicación y es adicto a las redes sociales, desde Twitter hasta Instagram.
Con dos pasiones cuando se apagan los focos. Le chifla la música, toca el piano y ahora está está enganchado a la guitarra. Lleva meses obsesionado con el flamenco. Ha apuntado hasta su hija a clases. Y al acabar la jornada se pone las zapatillas y las mallas y echa a correr. Uno se lo puede cruzar hasta en plena calle Serrano entrenando en pleno centro de Madrid. Siempre en acción. Teo, el hombre que mueve los hilos de la derecha española.